sábado. 20.04.2024

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La Presidenta emite su voto en la escuela Nuestra Señora de Fátima, en la ciudad de Río Gallegos | 
Foto: Casa Rosada

@jgonzalezok | Argentina está conociendo el sondeo más ajustado de cara a las elecciones generales de octubre, con las primarias celebradas este domingo. El dato fundamental es que la elección está abierta: se confirma que Daniel Scioli, Mauricio Macri y Sergio Massa, por este orden, son los candidatos favoritos. Pero las deferencias entre ellos no son definitivas para marcar un candidato claramente vencedor.

Los resultados, que todavía no son finales y que pueden variar, no deberían variar de los siguientes:

- El Frente para la Victoria, sello electoral del gobierno, entre 36 % y 37 %. El único candidato era Daniel Scioli.

- Cambiemos, el espacio político que reúne a Mauricio Macri (PRO), Eduardo Sanz (UCR) y Elisa Carrió (Coalición Cívica), entre el 32 % y el 33 %. El candidato será el actual alcalde de Buenos Aires, Mauricio Macri

- UNA (Una Nueva Alternativa), algo más del 20 % de los votos. En este caso, el vencedor fue Sergio Massa, ex jefe de gabinete de Cristina Fernández, que al irse del kirchnerismo se alió con el gobernador de Córdoba, José Manuel De la Sota.

- Junto a estos tres candidatos, también competirán por la presidencia Margarita Stolbitzer (Progresistas), el veterano caudillo provincial Adolfo Rodríguez Saá (Compromiso Federal) y Nicolás del Caño del FIT (Frente de Izquierda y de los Trabajadores).

- Cinco agrupaciones no podrán participar en las elecciones al no haber superado el 1,5 % de los votos. MST-Nueva Izquierda y el Nuevo Mas, dos formaciones de origen trotskista, el Frente Popular (del reconocido dirigente social Víctor de Gennaro), y los prácticamente desconocidos Movimiento de Acción Vecinal y el Partido Popular.

Con estos resultados se confirmaría, casi con total seguridad, que habrá segunda vuelta en noviembre. La elección solo se resuelve en la primera ronda si el candidato vencedor saca más del 45 % de los votos, o más del 40 % si tiene un 10 % de diferencia respecto al segundo.

El resultado para Daniel Scioli no es el que esperaba, si es que se confirman los datos en el escrutinio final. Quería llegar al menos al 40 % y sacar en torno al 10 % de diferencia al segundo, en este caso Mauricio Macri. Ese sería el porcentaje que le garantizaría el triunfo, incluso sin necesidad de ir a una segunda vuelta. Pero la realidad ha sido otra, a pesar del discurso triunfalista que hizo ante la militancia.  

Un discurso en el que el protagonismo fue del sciolismo, no de La Cámpora o del cristinismo. Carlos Zannini, el candidato a vicepresidente, que sí es el representante más acabado del kirchnerismo duro, parecía poco cómodo en el escenario escuchando a Scioli. Sobre todo cuando éste afirmaba que mejoraría lo que hubiera que mejorar y cambiar lo que hubiera que cambiar.

En cualquier caso, Scioli ya trazó su estrategia para los próximos meses. Se presentará como el próximo presidente de la Argentina para consolidar su imagen. Tratará de seducir a una clase media esquiva y a los peronistas que en estos años fueron abandonando el kirchnerismo. En su agenda hay varios viajes internacionales con el mismo objetivo. Después de su visita a Cuba, donde tuvo la foto con Raúl Castro, recorrerá España, Italia, China, Rusia, México y Ecuador.

Una de las incógnitas de estas elecciones primarias era conocer cuál sería el impacto que tendría en la candidatura de Aníbal Fernández, jefe de Gabinete y aspirante a gobernador de la provincia de Buenos Aires, las graves acusaciones en su contra, que lo relacionan con el narcotráfico. Los primeros datos indican que el impacto ha sido escaso: le está ganando la interna a Julián Domínguez, con lo que sería el candidato del oficialismo. No sorprende, teniendo en cuenta que el asesinato del fiscal Nisman, en enero de este año, quedó definitivamente en el olvido.  

Un comentario generalizado coincidió en criticar el sistema de voto. En papel y con papeletas de enorme tamaño, que tienen que financiar cada uno de los partidos, lo que perjudica a todos menos al oficialismo de turno. El voto electrónico se usó ya con mucho éxito en la ciudad de Buenos Aires y la provincia de Salta. En otras dos provincias, Córdoba y Santa Fe, usaron la llamada boleta única, en la que el elector marca sus candidatos usando una única papeleta, con lo que se evita el habitual robo en el cuarto oscuro de las papeletas del contrario.

Tanto el voto electrónico como la papeleta única garantizan el derecho de los votantes y de los candidatos. En el Congreso hay varios proyectos al respecto, pero el gobierno, con su mayoría, se ha negado hasta ahora a tratarlos. 

Argentina: Escenario tripartito en las elecciones primarias