viernes. 29.03.2024

Sí, eso es lo que, en ocasiones, el común de los mortales experimentaba... tiempo atrás, pues ahora, "el gobierno regional de la Comunidad de Madrid está fortaleciendo y ampliando una política de subvención con el 'cheque' que desde hace tiempo viene ejecutando en Educación Infantil, Bachillerato y Formación Profesional", nos recordaba en Nuevatribuna Pedro Badía Alcalá.

No es, todo este escándalo, moco de pavo: "Una política de una feroz insolidaridad, que da más al que más tiene y quita, aún más, al que menos tiene". Más claro, agua... de pago; e igual de claro, ya meses atrás: "En realidad les interesa generar bolsas de pobreza para luego instrumentalizarlas y blandirlas contra sus antagonistas políticos", tal y como nos adelantaba Roberto R. Aramayo en este medio.

Estamos en pleno desarraigo de clases trabajadoras en manos de políticos que no necesitan moderación alguna ante el micrófono

Generar realidades paralelas, las que se generan en aquellas sociedades destruidas por obras mastodónticas o mares ficticios: "Imagínate un río, pero sin árboles y sin nada enfrente. Hazte cuenta que es como un río, pero sin orilla. Todo agua / A veces, no es el mar / Es como a una se lo cuentan".

Se trata de la nota introductoria de un libro realmente original: Detendrán mi río. Desarraigo y memoria en un rincón de la España sumergida (Libros del K. O., noviembre de 2021).

En este trabajo, Virginia Mendoza nos hace saber algo muy significativo: "Se estima que la construcción de grandes presas ha desarraigado entre cincuenta y ochenta millones de personas en todo el mundo. Es una cifra a la baja que excluye a todos aquellos que no perdieron sus casas pero sí su medio de vida". Y en ello estamos, en pleno desarraigo de clases trabajadoras en manos de políticos que no necesitan moderación alguna ante el micrófono y los más desfavorecidos, éstos últimos al otro lado de las cámaras.

En todos los sentidos. ¡Pobres del mundo, uníos! Perdón, ¡pobres del mundo, unámonos!

Algunos hombres ricos