viernes. 29.03.2024
cmin
Foto: Ministerio de Presidencia

Ayer se aprobó, en el Consejos de ministros, traspasar una directiva europea, aprobada en el año 2021 contra el antisemitismo. Son tantos los errores intencionados que hay en la estrategia española, que no sé por dónde empezar.

El Ministerio encargado de esta trasposición ha sido el de Presidencia, Las Cortes y Memoria democrática, subdirección general de libertad religiosa.

Básicamente son de índole histórica, pero también práctico mis críticas. En la página 12 nos dice: “...Los diplomáticos españoles que durante la II Guerra mundial aplicaron el decreto de Primo de Rivera de 1924, para salvar a numerosos judíos sefarditas o no”. A pie de página, nota 10 pone: “...algunos de estos diplomáticos, son justos entre las naciones, como Sanz -Britz y Sebastián Romero Radigales...”.

Este plan nacional no tiene en cuenta los avances históricos en el Holocausto y España

Como ya he demostrado junto a otros investigadores y fue publicado en revistas especializadas, como en el número extraordinario del 2019 Hispania Nova, muchos judíos, nacidos en España, de origen ashkenazi, y brigadistas internacionales, fueron asesinados en los campos de exterminio nazis. Nadie les salvó.

En la página 14 pone: “... Antisemitismo en España... aunque en España no se siguió una política de persecución racial durante la guerra civil...”, ocultan que si hubo normativa racial, nada más acabar la guerra, la de paso de fronteras de 11 mayo de 1939 y la de depuración del colegio de médicos del 6 de octubre de 1939, que ya han sido publicadas y reconocidas por grandes historiadores como Ángel Viñas y Paul Preston, con mis informaciones, ya que a mis abuelos maternos (Los Hoenigsfeld), judíos polacos, les fue aplicada la primera, para volver a España, en Agosto de 1939.

En cuanto a mis críticas a la parte práctica dedicada a la enseñanza del Holocausto, encargada al Centro Sefarad Israel, quiero indicar que esta institución nunca se interesó por la abundante información documental que conservamos en el archivo familiar, donde puede verse claramente el ejemplo del Holocausto en el caso práctico de una familia afincada en Madrid (6).

Tanta oposición y negativa a todo lo que he ido descubriendo y publicando, solo le encuentro una explicación, y es que mi primer apellido es Calandre, pues soy nieta de un eminente cardiólogo republicano, represaliado Luis Calandre Ibáñez.

Por todo lo anteriormente explicado, no estoy de acuerdo en este plan nacional, porque no tiene en cuenta los avances históricos en el Holocausto y España.

Críticas al 'Plan Nacional para la Implementación de la Estrategia Europea de lucha...