jueves. 28.03.2024
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Los denominados cheques familiares son, en realidad, una deducción de familia numerosa, por ascendiente con dos hijos o por personas con discapacidad a cargo. Se trata de una ayuda de 1.200 euros anuales -en el caso de una Familia numerosa de categoría especial sube a 2.400 euros- que puede obtenerse anticipadamente o como una Deducción en la Declaración del IRPF después de la Cuota diferencial. Por ello, se considera un “impuesto negativo”, o lo que es lo mismo, que puede originar una mayor devolución de la Renta, aunque ya no existan retenciones.

De esta deducción pueden beneficiarse los contribuyentes que puedan aplicar los mínimos por descendientes o ascendientes con discapacidad por cada uno de ellos, y los ascendientes o hermanos huérfanos de padre y madre, que forman una familia numerosa, o los ascendientes separados legalmente o sin vínculo matrimonial con dos hijos que puedan aplicar la totalidad del mínimo por descendientes y no tengan derecho a percibir anualidades por alimentos.

Esta ayuda tuvo su antecedente en el cheque bebé, la deducción de 2.500 euros que se creó en noviembre de 2007

En este sentido, también existe un aumento de 600 euros de la deducción por cada uno de los hijos que excedan del número mínimo exigido para adquirir la condición de familia numerosa general o especial.

A la hora de calcular las deducciones, se tiene en cuenta la proporcionalidad respecto al número de meses en que se cumplan de forma simultánea los requisitos legales, y tienen como límite para cada una, las cotizaciones y cuotas totales a la Seguridad Social y Mutualidades devengadas en cada ejercicio.

Los contribuyentes beneficiarios de las mismas deben ser trabajadores o autónomos dados de alta en la Seguridad Social o Mutualidad alternativa y cotizar durante los plazos mínimos fijados. También se incluye entre los beneficiarios a los desempleados que perciban prestaciones públicas y pensionistas de los regímenes públicos.

¿Y desde cuándo existe este cheque? Tuvo su antecedente en el cheque bebé, es decir la deducción de 2.500 euros anuales por cada hijo nacido o adoptado en el período impositivo con unos requisitos equivalentes, que se creó en noviembre de 2007 con efectos retroactivos a partir del 1 de julio de 2007.

Si entre el paquete de medidas de ajuste de la crisis, se suprimió con efectos desde 1 de enero de 2011; posteriormente, con efectos desde el 1 de enero de 2018, se retomó esta deducción por 1.200 euros para madres trabajadoras o autónomas con hijos menores de tres años, que aumenta hasta en 1.000 euros adicionales cuando tenga gastos de custodia del hijo menor de tres años en guarderías o centros de educación infantil autorizados en el período impositivo.

Los nacimientos en España se han reducido en torno al 30% a lo largo de la última década. Y todo tipo de ayuda, sobre todo si es de carácter fiscal, puede contribuir a fomentar la natalidad; aunque haya que analizar el cómo y el cuánto.

Carlos Cruzado, presidente de los Técnicos del Ministerio de Hacienda (GESTHA)

¿Qué son los cheques familiares?
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