sábado. 27.04.2024
trabajo digno

Una vez llegados a este punto lo más lógico sería mostrar el camino que habríamos de seguir para adquirir el anteriormente mencionado medio. Sin embargo es tan complejo y laborioso describir este camino; y tan vigente nuestra disposición a rechazar lo que empíricamente consideramos como una utopía, que tengo que dejar para aquéllos que estén dispuestos a afrontar la lectura de la obra ¿Es posible otra economía de mercado? lo que es imposible detallar en lo que solo son unos artículos.

Lo que sí considero necesario mencionar es que la explotación de las fuerzas del trabajo constituye un medio con el que garantizar la continuidad del Capitalismo; mantenerla a través de la utilización de una plusvalía que se necesita asegurar a través del incremento de la Productividad. Lo que ocurre es que como fue manifestado en mi anterior artículo:

"Lo que hay de más relevante en este proceso es que el valor contractual que el empresario paga al obrero por las mercancías y los servicios producidos, y el valor de cambio que hay que pagar por ellas en el mercado determinan una realidad que ha de condicionar a los que teniendo como renta los mencionados valores contractuales tienen que desembolsar por lo que se ha producido, valores de cambio".

Y para tratar de superar esta incidencia, el capitalismo precisa formar parte del Estado y utilizar la Política y la adulteración de la Verdad con el dominio de los medio de comunicación.

Con el advenimiento de la IA no sólo incrementaremos una productividad que ha de llevarnos a un aumento considerable del número de parados que tendrán que ser asistidos con los rendimientos marginales que las empresas hayan obtenido a través de una incrementación de los impuestos. Ante una situación como la manifestada y en la seguridad de que el Capitalismo se habrá de oponer con toda su fuerza a que se forme una sociedad en la que los poseedores de los medios de producción tengan que subvencionar a la mayor parte de la población para cubrir con el consumo de los que no puedan trabajar es algo que podemos dar por descontado. Lo que ocurre es que como consecuencia de esta impugnación se habrán de producir unas desigualdades tan mayúsculas que los que no puedan encontrar un puesto de trabajo (independientemente de los escasos subsidios que el capital le permita aportar al Estado), se habrán de producir unas concausas entre las cuales podríamos entresacar las siguientes:

a) La mayor parte de los que formaran las fuerzas del trabajo adquirirían una situación de dependencia y carencia de objetivos que, ante el hecho de no poseer medios con los que refirmarse como personas trastocarán su propia identidad. No podemos olvidar que según Hegel, la propiedad privada es la única forma que tiene el ser humano para reconocerse a sí mismo como persona. Un estado que al llevarle a considerarse como cosas generará obligatoriamente una revolución. Y las revoluciones hay que materializarlas de una manera inteligente. Sin dejarse llevar por el odio y la emotividad que del resentimiento se derivan. Como nos muestra la Historia, hasta ahora todas las revoluciones, ( independientemente de lo que han representado para el progreso) han consistido en una reposición de los que habían detentado el poder. Y esto, indefectiblemente se ha venido produciendo a través de la violencia y el terror. Una renovación de caras viejas por unas caras nuevas que volverán a estar marcadas por la impronta del poder.

b) Por su premiosidad, voy a señalar otro de los peligros que como consecuencia de nuestra naturaleza subjetiva va a comportar la aparición de la Inteligencia Artificial. Una inteligencia que más allá de las virtudes y menoscabos que habrán de generar en el mercado, sus consecuencias pueden llevarnos hasta la desaparición de nuestra propia especie. Hasta ahora a través de la utilización de los medios de comunicación, de la utilización de la fusión nuclear, de las criptomonedas y de Internet hemos llevado a cabo la una serie ordenada de consecuciones que han sido las últimas de nuestras revoluciones. Todas ellas han significado tanto un progreso para la humanidad como un medio con el que asegurar la continuidad del Capitalismo. Es cierto que con el uso de Internet estamos entregando, sin en cierta forma percibirlo, hasta los más últimos vestigios de nuestra intimidad; y por tanto poniendo en manos de los gestores de estas tecnologías la manera de controlarnos; pero no es menos cierto que, como ocurre con todas las revoluciones, las singularidades que con todas estas trasformaciones se producen no están en lo que éstas representan, sino en el uso subjetivo que de ellas hacemos. Desde la utilización del palo, como de los medios de desinformación, de la fusión del átomo, de las criptomonedas y de Internet. A partir ahora, con el manejo indebido de la IA hemos llegado a un punto de inflexión en el que la tecnología, como revolución, probablemente devendrá un medio que nos lleve a nuestra desaparición como seres conscientes. En contraposición a lo que en la obra de George Orwell 1984 Winston le dijo a Julia:

"Pueden forzarte a decir cualquier cosa, pero no hay manera de que te lo hagan creer. Dentro de ti no pueden entrar nunca."

y  lo que inconscientemente le llevó a escribir en el polvo de la mesa 2+2 igual a 5 es la demostración de cómo una tecnología subjetivamente utilizada puede llevarnos a la perdida tanto de nuestra voluntad como del dominio de nuestro consciente. Lo que  desgraciadamente nos puede ocurrir es que a través del uso de estas tecnologías no podamos ni siquiera considerarnos como cosas. Lo que de bueno tiene esta utilización (si pudiéramos considerar como algo virtuoso habernos convertido en animales), será que a través de esta manipulación del consciente y lo inconsciente habrá desaparecido el Capitalismo. Con la pérdida de la consciencia  y consecuentemente el control de nuestra mente habrán periclitado las luchas de clases. Los anteriormente asalariados se habrá trocado en una fuerza del trabajo semejante a la que realizan los animales. Como dijo Orwell en su obra 1984.

"Hasta que no tengan consciencia de su fuerza no se rebelarán"

Ahora la lucha estará entre los poseedores de los medios de producción. Una contienda en la que sólo podrá quedar uno. Triste final de nuestra trayectoria. ¿Ante este desenlace podemos seguir ignorando y tolerando lo que como título figura en el encabezado de este artículo?

Coma pienso y no piense (2+2 igual a 5)