lunes. 29.04.2024
C. Tangana
C. Tangana

Ádrian Sanz González | @AdriSanz16666

El Madrileño, antes conocido, por unos pocos, como Crema, se muestra ingobernable, pero intoxicao por una mala mujer, su fama. En un filme, que, al fin y al cabo, no deja de ser un autorretrato de la amarga repercusión que le ha convertido en el ateo más espabilao de estos dos últimos años, gracias a su trato del flamenco y el rap. Todo esto, eso sí, llorando en la limo.

El 26 de febrero de 2021, Antón Álvarez Alfaro, conocido artística y mundialmente como C. Tangana, tocaba el cielo interpretativo con su disco El Madrileño. Un éxito rotundo que “obligó” al cantante hacer la gira de sus pesadillas. Un acto, que, en busca de volver impresionar al mundo en vivo y en directo, acabo con su interés musical

El cantante y rapero C. Tangana, en un ejercicio de solidaridad y cariño a los fans, muestra la cara B de lo que fue el lanzamiento de su mayor disco

Cuatro años de vida intima al descubierto. El cantante y rapero C. Tangana, en un ejercicio de solidaridad y cariño a los fans, muestra la cara B de lo que fue el lanzamiento de su mayor disco, y la gira que lo ensalzo y derrumbo personalmente. Todo desde la supuesta realidad absoluta… 

Porque si tiene alguna pega Esta ambición desmedida, es que no sabes hasta qué punto te están contando la realidad de lo que realmente pasó. Hay puntos en los que el documental dramatiza exageradamente, y patina. Haciendo que uno se replantee que es verdad o que es mentira. Perfectamente, podrían salir dentro de unos años sus creadores y protagonista y decir que todo era un montaje. 

En otras palabras, si a la hora de grabar una entrevista o conversación se busca dar a entender que todo lo que sucede no es un montaje, o bien se muestra toda la conversación –cosa que no puedes hacer por la extensión del metraje–, o bien dejas claro –con la cámara o desde el punto de vista– que los que están hablando desconocen de la existencia de la cámara. Porque si sabes que te están grabando, da igual que lo intentes, el ser humano –que no es un actor profesional– delante de una cámara no actúa igual que sin ella. 

Un documental, que demuestra y reafirma el gran interés del cantante por crecer y proliferar en el arte audiovisual

Aun así, esta pequeña falta de credibilidad no lastra el gran trabajo que consigue el documental a través de otras vertientes. La forma en la que está rodada, la construcción de un montaje libre y juguetón, la banda sonora… Una amalgama perfecta, que al final, acaba captando la personalidad del cantante. 

Esta ambición desmedida no solo viene mostrar lo que no conocíamos de C. Tangana, y ver en carne y hueso como es Antón Álvarez Alfaro (Pucho), sino a posicionar a sus directores noveles. Tres creadores que, de manera ingeniosa, saben captar, resumir y jugar, con las diferentes habilidades adquiridas a través de los videoclips, lo que sucedió en la mayor gira del cantante.

Un documental, que demuestra y reafirma el gran interés del cantante por crecer y proliferar en el arte audiovisual. Al fin y al cabo, sorprendió a todo el mundo con ese pequeño papel en Un año, una noche de Isaki Lacuesta. Así que, nunca se sabe, quién nos dice que de aquí unos años no lo veremos triunfar en el mundo de la interpretación.

Esta ambición desmedida: el retrato realista y romántico de C. Tangana