La tecnología y la llegada de internet ha hecho que la educación sufra una gran revolución. El sistema educativo ha cambiado su metodología, ha introducido dispositivos y se han modificado los planes de estudios. En los últimos años se está imponiendo el Bachillerato Internacional como una solución frente a un mercado laboral cada vez más competitivo. Así, los centros educativos con Bachillerato Internacional comienzan a formar a los alumnos para que puedan adaptarse a las nuevas necesidades del mercado que van surgiendo.
Estudiar un Bachillerato Internacional en Madrid tiene grandes ventajas. Entre las más destacadas, se pueden señalar cuatro metodologías muy innovadoras que buscan e impulsan que los alumnos tengan mayor éxito:
La metodología inversa
Este tipo de metodología impulsa la autonomía del alumno, la capacidad de controlar el tiempo y ser responsable con el proceso de aprendizaje y de memorización de conceptos. En este modelo, durante las horas lectivas se plantean las actividades más complejas, se aplica el razonamiento de éstas y se trabajan en ellas.
El alumno con esta metodología consigue desarrollar habilidades como la crítica o análisis. La metodología inversa implica que el alumno sea responsable y cree una rutina de trabajo propia de la mano del profesor estableciendo un plan de ruta.
Metodología Design Thinking
Esta metodología se centra en generar ideas innovadoras para hacer frente a problemas de clientes. Así, aplicándolo al sistema educativo, los alumnos deberán hacer uso de los recursos disponibles para cubrir sus necesidades y alcanzar sus metas.
El objetivo principal es que los estudiantes desarrollen su creatividad y consigan llegar a ideas innovadoras. Se elaboran habilidades de emprendimiento y liderazgo. También se alcanza una habilidad muy importante como la colaboración, ya que sin colaboración, es difícil alcanzar el éxito a largo plazo.
La Gamificación
Introducción e implementación de sistemas educativos relacionados con juegos. Se genera un impacto muy positivo en los estudiantes, aumentando la motivación e impulsando el esfuerzo a través de juegos educativos.
Este tipo de actividades consiguen facilitar la interiorización de conceptos, convirtiéndose así, en una de las metodologías educativas más eficientes. La tecnología tiene un papel fundamental en este sentido, pudiendo hacer uso de aplicaciones o webs que permiten facilitar la aplicación de esta técnica de enseñanza. No obstante, siempre se tiene en cuenta que el objetivo principal es mejorar el resultado de cada alumno particular.
Tutorización y asesoramiento académico
Cada alumno cuenta con un tutor desde que comienza el curso. El objetivo es crear una relación de confianza y que cuenten con una persona directa que le sirva de referencia.
El alumno podrá hablar sobre problemas que surjan, preocupaciones o consultas generales. También, este sistema de tutorización, impulsa el progreso del alumno y lo motiva para que continúe con su formación seleccionando actividades extracurriculares.
Se fomenta el bienestar de cada alumno para evitar situaciones de estrés o ansiedad, interviniendo también en conflictos actuales habituales, como el de la presencia activa en las redes sociales.
El Bachillerato Internacional se ha convertido en una solución perfecta para que el alumno pueda adquirir las competencias necesarias para tener éxito en el mercado laboral. Sin lugar a duda, le ayudará a hacer frente a problemas reales y adquirir habilidades resolutivas que favorezcan el acceso a universidades tanto en España como en el extranjero.
