Se entiende por enfermedad mental crónica un conjunto de trastornos en los cuales los pacientes presentan un trastorno mental grave y de larga duración (TMGL). Entre estos trastornos se incluyen las psicosis, en especial la esquizofrenia y el trastorno afectivo bipolar, depresiones graves recurrentes, trastornos graves de la personalidad y demencia, entre otros.
Estos pacientes, en especial las psicosis, pueden tener sintomatología activa o residual, que afecta a su funcionamiento en la vida diaria (autocuidado, autocontrol, manejo de emociones, interacciones sociales). Por otro lado, son personas más vulnerables al estrés y tienen peores recursos de afrontamiento ante las demandas del ambiente, como puede ser esta pandemia. Por tanto, son personas claramente dependientes. Así, podemos decir sin temor a equivocarnos que las personas con trastorno mental grave y crónico pueden estar en uno de los grupos más afectados por esta pandemia.
Los pacientes con TMGL se asocian con mayor mortalidad relacionada con la Covid 19, según ha publicado la revista JAMA Psychiatry, siendo el riesgo más alto para la esquizofrenia y el trastorno bipolar. Podría explicarse este hallazgo por un lado por la medicación psicotrópica que consumen, así como por las barreras que tienen muchos de ellos para acceder a los servicios sociosanitarios, en especial en los países y poblaciones con menos recursos económicos.
La organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió a mediados de mayo de 2020 que la crisis del coronavirus y sus consecuencias afectarían a la salud mental de muchas personas
Hay unos claros factores de riesgo por padecer estos pacientes enfermedades asociadas a su TMGL, enfermedades como la diabetes, muchas veces causadas o agravadas por los fármacos antipsicóticos que tienen prescritos, otras veces por la alta tasa de tabaquismo en esta población, que les acaba provocando una enfermedad respiratoria obstructiva crónica.
En un estudio reciente de la Universidad Aix-Marseille (Francia), sobre una revisión sistemática de mortalidad por Covid 19, incluidos los pacientes con TMGL, concluye que la mortalidad se asoció más con TMGL, refiriendo como ya se ha comentado por la revista JAMA Psychiatry, que la mayor asociación se da entre esquizofrenia y trastorno bipolar.
Las personas con esquizofrenia, en especial su forma paranoide, pueden en la pandemia, pensar que existe un riesgo más alto de lo que es real, e incluso incluir la pandemia en su sistema delirante. En el trastorno bipolar, en especial en su fase maníaca, se puede llegar una mayor tendencia a correr riesgos que faciliten el contagio.
Debemos apuntar que una asociación no implica una relación de causa/efecto, lo que lleva a sugerir que los TMGL, son un factor de riesgo en sí, y aun siendo esto así, es muy probable que haya un conjunto de factores que también influyan.
Los sujetos que tienen un diagnóstico previo de enfermedad mental grave tienen un mayor impacto psicológico después de una experiencia de una pandemia o de realizar una cuarentena. En un estudio del Hospital 12 de Octubre, realizado mediante una encuesta nacional online sobre 1839 encuestados, de la que 201 presentaban diagnóstico previo de trastorno mental, de estas últimas el 3,5% fue positivo en la infección por Covid 19, frente al 0,4% de la población sin patología psiquiátrica. Los resultados describen que los pacientes con diagnóstico previo de trastorno mental presentaban un aumento de los síntomas de ansiedad, depresión y estrés agudo durante el pico de la pandemia.
En otro estudio realizado en España por el Grupo 5 en 669 pacientes con TMGL, un 22% de los pacientes usuarios habituales de recursos sociales han estado en la pandemia durante 2020 sin compañía ni apoyo social, y alrededor de un 20% de personas usuarias de centros ambulatorios o residenciales tuvo que incrementar la dosis de fármacos para mitigar el malestar psicológico.
La organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió a mediados de mayo de 2020 que la crisis del coronavirus y sus consecuencias afectarían a la salud mental de muchas personas. La OMS predijo que se podrían registra un aumento de los suicidios y de los trastornos en la salud mental, requiriendo a los gobiernos que no se olvidaran de la atención psicológica en esta pandemia.
Por último, esta reflexión de Marguerite Yourcenar: “El amor y la locura son los motores que hacen andar la vida”
