viernes. 26.04.2024
Mehan Karimi Nasseri falleció en el aeropuerto Charles de Gaulle de Paris, después de 18 años de inquilino forzoso en dicho aeropuerto
Mehan Karimi Nasseri falleció en el aeropuerto Charles de Gaulle de Paris, después de 18 años de inquilino forzoso en dicho aeropuerto

Unos días antes de la conmemoración del Día Internacional de los Derechos Humanos (10 de diciembre), falleció en el aeropuerto Charles de Gaulle de Paris el iraní Mehan Karimi Nasseri. Inquilino forzoso de dicho aeropuerto durante más de 18 años por culpa de unas leyes de inmigración obsoletas y de unas pasmosas chapuzas burocráticas que le han dejado en el limbo legal y vital hasta que falleció como un despojo apestado, delante de las narices de los que se jactan de la defensa de los valores universales y de la dignidad humana. 

Sólo buscaba protección y consuelo en la capital francesa. Capital de las luces. El Jomeini, sí encontró en ella cobijo y apoyo para dirigir su “revolución chiita” en contra del Shah de Irán. Una revolución,  se suponía, para la construcción de un nuevo y moderno Estado. Sin embrago, lo primero que hizo Jomeini, fue aniquilar a todo aquel que tenía vínculo con el progreso y la vanguardia, para instaurar una autocracia de la edad media en pleno siglo XX. Esa tiranía inquisidora de los mullah sigue engullendo a su propio pueblo. Por ahora, ya van ahorcados en público dos ciudadanos iraníes por haber participado en las recientes manifestaciones por la libertad y la democracia. Ese despotismo se propaga ahora en forma de complicidad en una guerra criminal que amenaza a toda Europa.

El iraní Mehan Karimi Nasseri falleció en el aeropuerto Charles de Gaulle de Paris, Inquilino forzoso de dicho aeropuerto durante más de 18 años, por culpa de unas leyes de inmigración obsoletas

Unos días después de la conmemoración del Día de los Derechos Humanos, y a pocos días de la celebración del Día Internacional de los Migrantes (18 de diciembre), sigo sin entender cómo en España, una justicia que reconoce su grave e incomprensible error en el caso de los dos marroquíes, Tammouhi y Mounib que fueron condenados a penas de 51 años cada uno por una violación que no cometieron (las pruebas del ADN demostraron que el autor fue Antonio García Carbonell, un ciudadano español que, por lo visto, guardaba un parecido con uno de los marroquíes), no han encontrado la manera de enmendar tal atropello por más que nos parezca increíble e inverosímil. 

Tammouhi salió de la cárcel después de muchos años por un indulto que no quiso pero le obligaron a aceptar, mientras Mounib falleció en su celda sin beneficiarse ni siquiera de ese aguinaldo. 

Y hablando de aguinaldos, la presidenta de la comunidad de Madrid, aprovechó su sermón navideño para proponernos “un pacto por navidad para recuperar la cultura religiosa”. Obviamente, por cultura religiosa se refiere a la cristiana católica de la élite social, política y eclesiástica. Nada tiene que ver con las parroquias de los barrios marginados y el formidable papel que juegan los curas obreros para paliar las penurias de sus parroquianos, sean de donde sean y de las creencias que sean, como ocurre en la Cañada Real o en Entrevías. 

Los marroquíes Tammouhi y Mounib fueron condenados a penas de 51 años cada uno por una violación que no cometieron y no encontraron la manera de enmendar tal atropello

El mismo día de su sermón, la mayoría de los medios locales y nacionales publicaron el rostro africanizado de San Isidro labrador. El santo más venerado de Madrid junto a la Almudena. 

Seguramente, esa información no le ha hecho ninguna gracia. Tampoco, los datos relativos a la recreación informática de la cara del santo hecha por la facultad de medicina de la Universidad Complutense, bajo la supervisión del arzobispado de Madrid. 

Menos gracia aún le ha supuesto el hecho de que San Isidro era un labrador mozárabe, nació en Mayrit (Madrid musulmán). Primer laico casado llevado a los altares tras un proceso de canonización instruido por la congregación de ritos. 

Esto no es un intento de golpe de estado confesional. Esto está divulgado en Wikipedia, donde indica también, que su designación como santo patrón de los agricultores fue a mediados del siglo pasado, en 1960 concretamente. Además, agrega que su milagro relativo a los bueyes que araban solos mientras rezaba o echaba la siesta “contiene significativos paralelos con las hagiografías islámicas”. 

Por sus rasgos, antecedentes y orígenes, San Isidro sería el Santo idóneo de las temporeras de la fresa de Huelva, de los currantes de los invernaderos de El Ejido, del campo de Murcia y del Maresme catalán

Santo de rostro africanizado, origen mozárabe, nacido en el Madrid musulmán, laico, casado, hagiografías islámicas. Pienso que estás concomitancias y analogías no le quitan valor a nuestro santo, o no deberían. Al revés, se deben aprovechar para que sea también el santo de los nuevos ciudadanos de esta ciudad, sobre todo de los que profesan otras confesiones, y en particular, de los que sólo profesamos el culto a la diversidad y a la convivencia mutua. 

Personalmente, siempre que he podido he celebrado dicha fiesta en la pradera y en los barrios castizos de Madrid. Entre otras, porque en Marruecos muchos santos son venerados por judíos y musulmanes, en lugares donde la coexistencia entre culturas y religiones siempre han encontrado espacios de convivencia a pesar de los aduladores del pensamiento único y totalitario, el mismo que pregona la señora Ayuso y sus acólitos políticos y religiosos. 

Para ello, se requiere otro talante político del que hoy en día carecen los que dirigen la Comunidad y el ayuntamiento de Madrid. Por lo tanto, esta tarea corresponde a las fuerzas vivas de la región. Es hora de que se den cuenta de lo que está en juego. 

Mientras tanto, por sus rasgos, antecedentes y orígenes, San Isidro sería el Santo idóneo de las temporeras de la fresa de Huelva, de los currantes de los invernaderos de El Ejido, del campo de Murcia y del Maresme catalán. Gracias a todas ellas y ellos, han convertido tierras áridas que expulsaba a mansalva a sus poblaciones, en vergeles con la renta per cápita más alta de toda Europa. 

¡Derechos Humanos y San Isidro Labrador!