jueves. 28.03.2024
mercedes Foto Paco Lavado
Mercedes González. (Foto: Paco Lavado)

Mercedes González acusa a Cedrún de "traicionar" el acuerdo de cohesión alcanzado hace cuatro años

El Auditorio Marcelino Camacho vio este viernes superado su aforo en el acto de presentación de Mercedes González como candidata a dirigir CCOO de Madrid. La convocatoria de la puesta en escena de la candidatura ‘Más Unión, más sindicato’, que ella encabeza, superó todas las previsiones iniciales, más de 1.000 personas acudieron a la cita, decenas de ellos tuvieron que quedarse a las puertas mientras otros tantos permanecieron de pie en una asamblea con una puesta en escena de claro perfil ganador.

Luciendo orgullosa su “chaleco de obrera”, el de la empresa a la que pertenece, ArcelorMittal, Mercedes González subió al escenario arropada por una cohorte de representantes sindicales, la mayoría de ellos exponentes de muchos de los conflictos laborales que se están viviendo en la Comunidad de Madrid en los últimos años. Los ‘8 de Airbus’, las espartanas de ‘Coca Cola en lucha’, miembros del Comité de empresa de Telemadrid, de Ferrovial, del sector de ayuda a domicilio, de la ‘marea verde’, de Vodafone… que al unísono reivindicaron la lucha de la clase trabajadora y el orgullo del sindicalismo de clase.

González, hasta ahora secretaria general de la emblemática Federación de Industria, enarboló un discurso en la más pura tradición de la clase trabajadora situándose como adalid de la “renovación” del sindicato -“que ha de ser hoy, que tiene que ser ahora”, dijo-, capaz de “abrir esta casa” para que entre aire fresco, con más mujeres y más jóvenes que “impulsen el cambio” en la organización.

"Entendemos que CCOO tiene que dar un salto para estar en la calle, organizarse con toda la sociedad civil y hacer un sindicato de proximidad. Tenemos que desplazarnos a los territorios, abrir la participación a la gente, democratizar las instituciones y construir un proyecto de abajo a arriba", subrayó en medio de aplausos y de consignas de “¡vivan las Comisiones Obreras!”, “¡viva la lucha de la clase obrera!”.

La candidatura de Mercedes González, que se lleva gestando desde hace meses, promete dar la batalla cara al Congreso que el sindicato celebrará en abril y en el que el actual secretario general Jaime Cedrún optará a la reelección. Aunque reconoció lo “arriesgado” de este “paso al frente” y el haberse “tirado sin red” se mostró confiada en la victoria final: “Vamos a ganar”, sentenció.

Duras fueron sus palabras al referirse a la actual dirección de CCOO de Madrid y al acuerdo que hace cuatro años se alcanzó en el seno del sindicato para la sustitución de Javier López por Cedrún, un “acuerdo político y de cohesión que fue traicionado”, afirmó. Mercedes González quiso, en este punto, significar la figura de Paloma López, actual eurodiputada de IU, presente también en el acto, que aceptó “dar un paso atrás” en su intención de presentarse a la secretaría general de CCOO de Madrid en virtud de ese acuerdo de integración: “No vamos a dar ni un paso atrás, ni una mujer más va a dar un paso atrás”, señaló entre aplausos la dirigente sindical.

Y duras fueron también sus palabras al denunciar los “ataques personales” y a su candidatura que ha venido sufriendo en las últimas semanas a través de las redes sociales, con cuentas de ‘trolls’ en Twitter “encubiertos” y cuyos protagonistas pertenecen, según denunció, a la propia dirección de CCOO de Madrid y algún miembro de la dirección confederal. “Que se vayan de la organización, este no es su sindicato, no vamos a permitir que se lo apropien”, arengó con firmeza.

La candidatura de Mercedes González apuesta por un proyecto sindical del siglo XXI, reforzando el tejido organizativo; priorizando el sindicalismo de proximidad; apostando por más acción sociopolítica e institucional, pasando “del sindicalismo de hitos al sindicalismo de procesos”; con más renovación, más feminismo, más juventud; y una mayor participación y transparencia en las filas de CCOO de Madrid para ganar afiliación. La candidata se comprometió a “pisar barro” para ir a la raíz de los problemas de la clase trabajadora. “Tenemos que girar a la izquierda, tenemos que ser más radicales”, aseguró ante todos los presentes.

El auditorio en pie guardó dos minutos de silencio por las mujeres asesinadas por la violencia machista en lo que va de año con una concentración posterior de protesta en la calle. Los asistentes dieron por finalizado el acto con el habitual canto de La Internacional.  

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