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11 de noviembre de 2009, 6:07
NUEVATRIBUNA.ES / AGENCIAS - 11.11.2009
Luis Fernández ha convocado un consejo de administración de RTVE para este viernes para oficializar su salida de la corporación. Fernández tenía tomada la decisión hace tiempo, pero se había mantenido en el cargo mientras el PSOE y el PP acordaban un candidato de consenso que impida que la Corporación vuelva a convertirse en la cadena institucional del Gobierno de turno. Algunas informaciones apuntan que su deseo de abandonar la casa se debe a desavenencias con la nueva ley de financiación que establecerá la eliminación de la publicidad en la cadena pública a partir del 1 de enero de 2010, un extremo desmentido por él mismo.
El grupo parlamentario socialista y el popular han acordado proponer en las próximas horas a Alberto Oliart para que ocupe el cargo, después de que el presidente del Gobierno y el líder de la oposición hayan cerrado el pacto. Según establece el Reglamento de la Corporación, la propuesta deberá someterse a votación en el Congreso de los Diputados y requerirá una mayoría de dos tercios de la Cámara. Tras el acuerdo de PSOE y PP, el apoyo parlamentario está garantizado.
Socialista y populares han destacado la garantía de pluralismo que supone el nombre de Oliart. El portavoz parlamentario del PSOE, José Antonio Alonso, ha subrayado su "prudencia e inteligencia" y el hecho de que sea un "hombre de consenso". La portavoz del PP, Soraya Sáenz de Santamaría ha recordado su "máxima experiencia en la gestión pública".
Oliart ocupó varias carteras ministeriales en varios Gobiernos de Unión de Centro Democrático (UCD). Licenciado en Derecho por la Universidad de Barcelona, obtuvo la plaza de abogado del Estado en 1953. Durante el régimen franquista desempeñó, entre otros cargos, el de secretario general de Renfe. Se afilió a UCD a finales de 1978, y a principios de la década de 1980 tuvo un gran peso político. Sus vinculaciones empresariales fueron muy nutridas: consejero director general del Banco Hispano Americano, consejero del Banco Urquijo y, hasta julio de 2001, consejero de Cortefiel. En el primer Gobierno democrático fue ministro de Industria y Energía. Luego fue ministro de Sanidad y Seguridad Social (1980-1981) y ministro de Defensa (1981-1982). Tras el desastre electoral en octubre de 1982 y la extinción de UCD, dejó la política activa y se dedicó, entre otras ocupaciones, a la abogacía.
Luis Fernández ha convocado un consejo de administración de RTVE para este viernes para oficializar su salida de la corporación. Fernández tenía tomada la decisión hace tiempo, pero se había mantenido en el cargo mientras el PSOE y el PP acordaban un candidato de consenso que impida que la Corporación vuelva a convertirse en la cadena institucional del Gobierno de turno. Algunas informaciones apuntan que su deseo de abandonar la casa se debe a desavenencias con la nueva ley de financiación que establecerá la eliminación de la publicidad en la cadena pública a partir del 1 de enero de 2010, un extremo desmentido por él mismo.
El grupo parlamentario socialista y el popular han acordado proponer en las próximas horas a Alberto Oliart para que ocupe el cargo, después de que el presidente del Gobierno y el líder de la oposición hayan cerrado el pacto. Según establece el Reglamento de la Corporación, la propuesta deberá someterse a votación en el Congreso de los Diputados y requerirá una mayoría de dos tercios de la Cámara. Tras el acuerdo de PSOE y PP, el apoyo parlamentario está garantizado.
Socialista y populares han destacado la garantía de pluralismo que supone el nombre de Oliart. El portavoz parlamentario del PSOE, José Antonio Alonso, ha subrayado su "prudencia e inteligencia" y el hecho de que sea un "hombre de consenso". La portavoz del PP, Soraya Sáenz de Santamaría ha recordado su "máxima experiencia en la gestión pública".
Oliart ocupó varias carteras ministeriales en varios Gobiernos de Unión de Centro Democrático (UCD). Licenciado en Derecho por la Universidad de Barcelona, obtuvo la plaza de abogado del Estado en 1953. Durante el régimen franquista desempeñó, entre otros cargos, el de secretario general de Renfe. Se afilió a UCD a finales de 1978, y a principios de la década de 1980 tuvo un gran peso político. Sus vinculaciones empresariales fueron muy nutridas: consejero director general del Banco Hispano Americano, consejero del Banco Urquijo y, hasta julio de 2001, consejero de Cortefiel. En el primer Gobierno democrático fue ministro de Industria y Energía. Luego fue ministro de Sanidad y Seguridad Social (1980-1981) y ministro de Defensa (1981-1982). Tras el desastre electoral en octubre de 1982 y la extinción de UCD, dejó la política activa y se dedicó, entre otras ocupaciones, a la abogacía.
