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NUEVATRIBUNA.ES - 14.7.2010

José Luis Rodríguez Zapatero se ha referido a aquellos aspectos que han sido declarados inconstitucionales pero no por razones de fondo y que la propia sentencia prevé que puedan ser desarrollados mediante una normativa específica. Es el caso del Consejo de Justicia de Cataluña al que la sentencia califica como "órgano de gobierno del poder judicial en Cataluña" y del que dice que es una "impropiedad constitucional", lo que no significa que el Consejo catalán propuesto sea inconstitucional.

El presidente ha dicho que el Estatut debió de ser un instrumento de convivencia y que "muchos hubiéramos preferido que no se hubiera visto envuelto en una impugnación". "Con el Estatut no se rompía España ni consagraba discriminaciones entre los españoles", ha asegurado y ha culpado al PP y su recurso de la "incertidumbre" vivida durante cuatro años, aunque ha estimado que la sentencia del alto tribunal es "un respaldo al proceso general de renovación estatutaria" en toda España.

Según ha dicho, ahora es su "obligación" contribuir al "desarrollo y aplicación del Estatut y para ello analizará con la Generalitat "la posibilidad de que algunos de los aspectos que han sido declarados inconstitucionales no por razones de fondo, sino del tipo de norma" puedan ser abordados "como indica el propio Tribunal, por el cauce constitucionalmente procedente". Zapatero ha dejado claro que actuará así no sólo por obligación, sino como muestra de que su Ejecutivo "no recela del autogobierno, sino que lo reconoce, y que no teme la fuerte identidad política de Cataluña, sino que la respeta".

La economía ocupa un lugar importante en este debate en el que el presidente ha recordado que el último año ha sido "duro y difícil", más allá de la "alegría colectiva" proporcionada por el Campeonato del Mundo conquistado por la selección española de fútbol. Según Zapatero, los indicadores de actividad de los últimos meses apuntan a que la economía española "previsiblemente" creció en el segundo trimestre del año, al tiempo que ha adelantado crecimientos intertrimestrales "positivos y neutros" en lo que queda de año y una tendencia apreciable a mejorar a partir del último trimestre, también para el empleo.

Zapatero por otra parte ha hecho una defensa de las últimas medidas puestas en marcha por el Gobierno y de las que aún están por venir. "La reforma laboral y del sistema de pensiones son necesarias e imprescindibles para apoyar el crecimiento económico de España en bases fuertes", ha asegurado. Al referirse a las pensiones, ha hecho una mención expresa al retraso de la edad de jubilación y a las posibilidad de introducir otras reformas como la ampliación del número de años para el cálculo de la cantidad a percibir.

El presidente ha querido dejar claro que la reforma de las pensiones no responde a la crisis económica sino al "ciclo demográfico". En 2050 habrá 1,7 trabajadores por jubilado, ha dicho y ha añadido que esto "es insostenible, haga lo que haga la economía". También es consciente de que "el Gobierno se la va a jugar con esta reforma, la más impopular posible".

Zapatero ha abierto la puerta a la adopción de nuevas medidas para corregir cualquier desviación que se produzca respecto de los objetivos de consolidación fiscal fijados "en cuanto el riesgo sea detectado". Una de las máximas prioridades del Ejecutivo sigue siendo reducir el saldo negativo de las cuentas públicas.



Zapatero promete desarrollar aspectos 'recortados' del Estatut