jueves. 25.04.2024
NUEVATRIBUNA.ES 18.11.2010

¿Quién dice que en política no todo vale? No será en Cataluña, donde primero hemos visto a una candidata del PP, Alicia Sánchez Camacho, haciendo su papel de ‘Alicia Croft’ en un videojuego donde subida a la gaviota popular va a la caza y captura de los inmigrantes “ilegales”. Claro que, nos quedamos con las ganas de saber si su particular cacería le ha provocado tanto placer como a la ex diputada de su partido, Montserrat Nebrera, que pese a lo reducido de su presupuesto y a las pocas expectativas que tiene de conseguir un escaño en el Parlament según los sondeos, se lo pasa de lo lindo con sus juegos sexuales.

Los vídeos porno han irrumpido en la campaña catalana. Votar bien vale un orgasmo. Los primeros es demostrarlo han sido las Juventudes socialistas del PSC que han decidido tirar por el sexo como reclamo electoral. Bajo el eslogan Votar es un placer, el corto electoral muestra a una joven que sólo por el hecho de acudir a su colegio electoral, coger una papeleta del PSC, meterla en el sobre correspondiente e introducirla después en la ranura de la urna se lleva una buena alegría para el cuerpo. Y todo, ante la mirada atónita de los interventores que no saben discernir si se trata de una loca, sin más, o una electora a la que le ha dado un calentón por votar a Montilla (habrá que encontrarle el ‘sex-appeal’ por algún lado), lo que sin duda debería ser objeto de estudio de psicólogos y sociólogos.

Más de lo mismo se ve en el vídeo de la siempre sorpresiva Nebrera. Una cámara va recorriendo una estancia donde se ven tiradas sobre la alfombra las supuestas prendas íntimas de la candidata, sujetador negro y zapatos de tacón; una botella de champán descorchado y copas vacías; una cama con las sábanas revueltas y una piscina con tumbonas. Por supuesto la imagen de la cama no se enseña con los protagonistas pero se oyen los gemidos de una mujer (¿será ella?) y uno ya se imagina el buen ‘polvo’ del que está disfrutando. Para finalizar, la que en su momento fuera apuesta clave de Josep Piqué, se la ve enfundada en una toalla: “Si quisiéramos montar un escándalo para salir en los medios, me habría quitado la toalla. Pero en política no todo vale”, dice. Pues casi.

En fin, no sabemos si los catalanes se sentirán aludidos y si se creerán de verdad que votar es un placer. Una cosa sí hay que destacar, las protagonistas de ambos vídeos son mujeres, así que no estaría mal que hicieran una replica con un buen hombretón que por lo visto escasean.






Votar en Cataluña bien vale un orgasmo