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NUEVATRIBUNA.ES / AGENCIAS - 16.12.2009

El motivo ha sido la moción de censura con la que el PP y los dos concejales que IU tiente en el ayuntamiento han desalojado a la alcaldesa socialista, en un pleno municipal que se desarrolló este martes en un ambiente muy tenso, con medio millar de personas gritano desde los asientos y pasillos del auditorio Mariana Pineda e interrumpiendo constantemente las intervenciones de los portavoces de los grupos.

La crispación alcanzó su momento culminante cuando (IU) acusó al PSM de intentar "comprar su voluntad" mencionando directamente al responsable de Política Municipal del Partido Socialista de Madrid, Jesús Dionisio. Montes respondía de esta manera a las acusaciones sobre los motivos que podrían estar detrás de que haya optado por alinearse con los 'populares': "Se incita a la violencia con mentiras cuando aquí, y lo digo públicamente y lo puedo demostrar y lo demostraré, los únicos que han intentado comprarme han sido desde el Partido Socialista de Madrid". El tumulto que se organizó en ese momento, con insultos del público al concejal, obligó a su compañera de Izquierda Unida, Juana Balas, a reclamar la intervención de la Policía Municipal para calmar los ánimos.

La alcaldesa saliente, la socialista Dolores Agudo, criticó a los promotores de la moción, los concejales del PP y los "cooperadores necesarios" de IU, que se han escudado en una supuesta malversación de fondos en la contratación del servicio de escuela municipal de tenis: "¿Una empresa de servicios nos ha engañado? Pues podría ser que sí, aunque nadie me lo ha demostrado, pero es muy fácil, se echa a la empresa de servicios, pero no se echa a la alcaldesa y al equipo de gobierno. Esto es un atajo y para echarnos hacían falta los cooperadores necesarios y los habéis encontrado".

A partir de ahora, el PP e IU gobernarán en coalición aunque ambas fuerzas políticas han insistido en que será "algo provisional hasta las próximas elecciones". Como alcalde de Velilla de San Antonio se queda el 'popular' Julio Sánchez Alarilla y en la primera tenencia de alcaldía la portavoz de Izquierda Unida, Juana Balas.

La dirección de IU ha decidido expedientar a sus dos ediles, pero la medida no ha satisfecho a los socialistas madrileños. Tomás Gómez respondió ayer al coordinador general, Cayo Lara, que "a buenas horas mangas verdes". En opinión del dirigentes socialista, "IU ha permitido que el PP pactase con ellos y no con dos tránsfugas. Es responsabilidad de (Gregorio) Gordo". Gómez reveló que "ha habido peticiones internas exigiendo a Gordo la expulsión inmediata de ambos ediles" y lamentó que no hayan sido escuchadas.

El responsable del Área de Política Institucional de IU-CM y diputado en la Asamblea de Madrid, Fausto Fernández, remitió el pasado 4 de diciembre una carta al coordinador general de la formación, Gregorio Gordo, en la que le solicitaba que apartara de la coalición a los concejales de Velilla de San Antonio con el fin de evitar la moción de censura que finalmente ha dado la Alcaldía al PP y la consecuente "erosión" del partido en la región.

En la misiva, Fernández da por hecho que Gordo conocía la intención de los ediles de presentar una moción de censura contra el PP y afirma que "durante meses" han intentado evitar que esto saliera adelante, "sin conseguirlo". Fernández recuerda que en otras Federaciones de IU "han tenido que hacer frente a situaciones similares con rapidez conjugando la defensa de derechos de los afiliados y el legítimo derecho de la organización, que no es otro que actuar a tiempo". "Por ello te solicito convoques de urgencia la Presidencia Regional para abordar este asunto", concluye el diputado en su carta.

Anoche, una vez consumada la moción de censura, los cinco miembros de la dirección de IU que perteneces a IU Abierta, la minoría que encabeza Inés Sabanés, decidieron abandonar la ejecutiva. Se trata del propio Fausto Fernández, María Espinosa (responsable de Áreas Transversales), la diputada regional Reyes Montiel (Movilidad), Juan Martínez (Empleo) e Inés Sabanés, que figura, con voz, pero sin voto, por ser portavoz de la Asamblea. Hace 10 días dejó la portavocía de la Presidencia Tania Sánchez, por discrepancia con la dirección. Los cinco lamentan la "deslealtad" con la que han sido tratados: "Mientras nosotros defendáimos una mayoría de izquierdas en Velilla, alguien de la dirección de IU estaba pactando con el PP", ha lamentado Fernández

Entretanto, Izquierda Unida ha anunciado que registrará en la Asamblea de Madrid una Proposición No de Ley (PNL) instando a los partidos firmantes del Pacto Antitransfugismo a que se convoque el mismo, con el fin de que se evalúe la posible disolución del Ayuntamiento de Velilla de San Antonio, al considerar que ha habido un incumplimiento del citado pacto. Lo que también ha desmentido IU de forma tajante que existiera un "pacto regional" entre su dirección y la del PP para presentar la moción de censura de Velilla, tal y como había asegurado el consejero de Presidencia, Francisco Granados.

LA BLOGOSFERA SE INCLINA POR NO CREER A LA DIRECCIÓN

El asunto Velilla está provocando un temporal en la Red. En general, la versión de la dirección de IU no convence y su anuncio de expediente disciplinario contra sus dos concejales de la localidad madrileña suena más a excusa tardía que a otra cosa. Lo dice, por ejemplo, Javier Mesonero: La Realidad es que estos dos concejales no son tránsfugas, porque para ser tránsfugas has de dejar tu partido y conservar el acta, o que te expulsen del partido y conservar tu acta de concejal. Ninguna de las dos cosas han sucedido, por lo que estas dos personas, a estas horas, siguen siendo militantes de IU-CM, con todas sus garantías, derechos y ¿deberes?. (...) La Realidad es que hoy, la apertura de un expediente disciplinario con amenaza de expulsión, suena a dilación, dejadez e incapacidad y a una ruptura de la confianza de consecuencias muy negativas para Izquierda Unida.

Nadie se explica cómo la dirección no actuó antes de que se sustanciara la moción de censura. Sergio García recuerda que Fausto Fernández lo avisó: Todo esto es malo, pero podría ser menos malo si desde la dirección de IU-CM, una vez conocida la propuesta de moción de censura, se hubiera expulsado a estos militantes de IU. Si hubiera pasado esto se habría aplicado el pacto anti-transfuguismo y el PP no hubiera podido gobernar Velilla. El secretario de politica institucional, Fausto Fernandez solicitó la expulsión oficialmente el 4 de diciembre. (...) Puede parecer que ha habido un descuido, que se ha traspapelado, que con la intensidad del trabajo de la dirección no han tenido tiempo, en un mes, para iniciar unos trámites de expulsión. Puede parecer hasta que, en la Ser, he escuchado a David Perez, portavoz del PP en la Asamblea de Madrid decirle a Inés Sabanés " hay un pacto de las direcciones de IU-CM y PP, el pacto existe, aunque tú no lo conozcas, existe". Inés no podía hacer otra cosa que negarlo, a ver, que va a decir.

Ricardo Royo-Villanova abunda en esta cuestión y se pregunta a cambio de qué se ha cerrado el pacto: Desde hace semanas que se sabía que esto iba a ocurrir, la dirección de IU-CM no ha hecho nada para evitarlo, salvo probablemente tranquilizar a los dos desleales, que en todo momento han manifestado que estaban convencidos de que no se les iba a expulsar, como finalmente ha ocurrido. (...) Muchos piensan -pensamos, porque yo lo pienso- que no se trata de algo que ha ocurrido así como así, sino que algunos dirigentes de IU-CM han estado estas últimas semanas negociando con el PP para entregarle -¿a cambio de qué?- la Alcaldía de Velilla.

Que el acuerdo PP-IU en Velilla no es algo casual sino fruto de una larga negociación es la tesis que defiende Soledad Alcaide de El País: Según las fuentes consultadas en el PP e IU, sí se produjeron "conversaciones" durante unos cinco meses entre el responsable del área territorial del PP, Borja Sarasola, y sus colaboradores, y el coordinador de Presidencia de IU, el diputado regional Antero Ruiz, sobre la salida de los socialistas del Ayuntamiento de Velilla. En ellas, Ruiz habría llegado a decir que la coalición no expulsaría a los concejales salvo que entraran al nuevo gobierno municipal. Sólo la dirección regional de IU niega esta versión. Los populares la ratificaron ayer.

Velilla, otra piedra en el azaroso camino de la izquierda madrileña