jueves. 18.04.2024
pedro sanchez congreso 550

En los últimos días los presidentes de Francia y Portugal han ejecutado importantes remodelaciones de gobierno. Por causas y objetivos diferentes  Antonio Costa y Emmanuel  Macron han anunciado cambios en los ministros al frente de carteras muy relevantes.

FRANCIA: NUEVO IMPULSO PARA EL GOBIERNO MACRON

El ejecutivo quiere dar un "nuevo aliento" al quinquenio mediante una revisión más amplia

Emmanuel Macron ha cambiado a los titulares de cuatro ministerios, entre ellos el siempre decisivo Ministerio de Interior, que pasará a manos de Christophe Castaner, hasta ahora al frente de Relaciones con el Parlamento.

Castaner, antiguo socialista, sustituirá a Gérard Collomb, uno de los principales apoyos de Macron desde que en 2016 se lanzó a la carrera presidencial, pero que con su dimisión el pasado día 2 generó la mayor crisis del actual gobierno en los 17 meses que lleva en ejercicio. Su cartera es decisiva debido a la amenaza terrorista, la gestión de la inmigración y las relaciones con los diversos cultos religiosos. Ha sido alcalde de Forcalquier y vicepresidente del consejo regional de Provenza-Alpes-Costa Azul.

Macron de acuerdo con su primer ministro, Édouard Philippe, ha sustituido a otros ministros cuya gestión se consideraba insatisfactoria o que mostraban cansancio. Didier Gillaume reemplaza a Stéphane Travert en Agricultura, un ministerio muy relevante y conflictivo en Francia. De la Cohesión Territorial se va Jacques Mézard, y toma el relevo Jacqueline Gourault en un nuevo superministerio de los Territorios. También abandona el Ejecutivo Françoise Nyssen (Cultura). Ocupa su puesto Franck Riester. Marc Fesneau, por último, sustituye la vacante de Castaner en la cartera de Relaciones con el Parlamento.

Un mes después de la partida de otro ministro de estado, Nicolas Hulot, el ejecutivo quiere dar un "nuevo aliento" al quinquenio mediante una revisión más amplia, en palabras de Richard Ferrand, presidente de la Asamblea Nacional. La búsqueda de un nuevo impulso indica bien a las claras que el actual gobierno había perdido fuelle, capacidad de gestión e imagen pública.

PORTUGAL: CAMBIOS CARA A LOS COMICIOS DE 2019

Costa ha cambiado a cuatro ministros, casi la mitad del Ejecutivo 

En Portugal, António Costa ha cambiado los ministros de Defensa, Salud, Economía y Cultura con la vista puesta en los comicios ya cercanos del otoño de 2019.

Horas después de que el gobierno aprobara el último presupuesto de la legislatura portuguesa, Costa ha cambiado a cuatro ministros, casi la mitad del Ejecutivo. Si la oposición le exigía desde hace tiempo el cese de los ministros de Defensa y Salud, el primer ministro ha decidido ir más allá para encarar el año preelectoral sin lastres. 

Durante la medianoche del sábado al domingo, en un Consejo de Ministros de 12 horas, el Ejecutivo aprobaba el último presupuesto de la 'jerigonza' -Gobierno socialista en minoría, con apoyo parlamentario del PC y Bloco de Esquerda-, el más social de todos. Un presupuesto con apenas un 6,3% de desempleo, 0,2% de déficit, un 2,2% de crecimiento, bajadas del 5% en el recibo de la luz, en las jubilaciones anticipadas y en el IVA cultural, un salario mínimo por encima de los 600 euros y otras medidas que contaban con el beneplácito de PC y Bloco.

Las encuestas le siguen dando al Gobierno socialista una intención de voto del 39%, muy por encima de los socialdemócratas de lPSD.

En ese escenario favorable, Costa ha dado un golpe de timón de su Gobierno: ha acabado con los ministros polémicos. Entre los primeros, el ministro de Defensa, José Azeredo, que ha sido sustituido por Joao Gomes Cravinho. Este era un cambio obligado después del  robo de armas del polvorín de Tancos y posterior sospechosa recuperación de más armas de las robadas; al final, en toda la trama, y su ocultación, están presuntamente implicados mandos militares y hasta del Ministerio.

El Ministro de Salud, Adalberto Campos, ha sido sustituido por Marta Temido. Los servicios públicos de salud y educación han sido los grandes paganos de la crisis. El aumento de inversión en los años de Costa no han sido suficientes para paliar las críticas a las deficiencias de los hospitales médicos. El ministro es víctima también de la reducción de la jornada laboral de médicos y enfermeros de 40 a 35 horas semanales sin que se aumentara el personal.

Los otros dos ceses son por otros motivos: falta de protagonismo. El ministro de Economía, Manuel José Caldeira, sustituido por Pedro Siza Vieira, nunca ha sido santo de devoción del ministro de Finanzas, el hombre fuerte del Gobierno, Mário Centeno -presidente del Eurogrupo-. Pese a que la economía del país marcha bien, el éxito se lo ha cobrado todo Centeno, con un Caldeira siempre en la sombra.

El ministro de Cultura, el poeta Filipe Castro Mendes, ha sido sustituido por Graça Fonseca. Castro ha ocupado tres años el cargo sin resolver nada. Creó un lío con las compañías teatrales, ha sido incapaz de cerrar la ley de las subvenciones al cine y tiene a las televisiones generalistas en pie de guerra por su falta de reacción ante la llegada de los canales de las plataformas telefónicas, ajenos al cumplimiento de las leyes locales. 

Con estos cuatro cambios, Costa quiere cohesionar a su equipo ante el año preelectoral. El presupuesto parece encarrilado y ahora trata de reeditar el éxito de las municipales, en las próximas europeas y, sobre todo, en las generales de octubre de 2019, donde puede acercarse a la mayoría absoluta.

¿QUÉ HARÁ SÁNCHEZ A LAS PUERTAS DEL AÑO ELECTORAL?

Pedro Sánchez, tendrá las manos libres, igual que las han tenido Antonio Costa y Emmanuel Macron, para plantearse con serenidad con qué gobierno quiere acometer las próximas elecciones

La negociación de los presupuestos en España, después del acuerdo suscrito entre PSOE y Podemos, parece abrirse camino por las declaraciones de los dirigentes del PNV y lo manifestado por el portavoz del grupo parlamentario del PDCAT.

Indudablemente el tema de Cataluña enrarece la conclusión de las negociaciones, pero en caso de salir adelante, y después del goteo de acusaciones contra algunos ministros que ha terminado con el cese de algunos de ellos, Pedro Sánchez, tendrá las manos libres, igual que las han tenido Antonio Costa y Emmanuel Macron, para plantearse con serenidad con qué gobierno quiere acometer las próximas elecciones municipales, autonómicas y europeas, camino de las generales que o bien pueden coincidir aproximadamente con las elecciones portuguesas o alejarlas al horizonte de 2020.

Sin duda el previsible nuevo triunfo del PSOE en Andalucía, según todas las encuestas, creará un espacio más favorable al gobierno central para acometer las tareas previstas en un año de marcado carácter electoral.

REMODELACIÓN PARA MEJORAR EXPECTATIVAS

Macron para recuperar su credibilidad, muy deteriorada en los últimos meses, Costa para afianzar los buenos resultados que esperan recibir los socialistas lusos han adoptado la misma medida. Una profunda remodelación de gobierno para mejorar sus expectativas.

En el caso de España sectores de Podemos también están valorando la posibilidad de plantear al PSOE una vez pasadas las elecciones andaluzas y aprobados los presupuestos, cambios de gobierno. En declaraciones realizadas por Pablo Iglesias ha manifestado:

"Vamos a seguir trabajando y vamos a hablar con ERC, PDeCAT y PNV. Sabemos que habrá cosas en las que no nos podamos entender pero creo que sigue siendo una necesidad construir una alternativa de Gobierno al PP. Esto implica que nos pongamos de acuerdo los que pensamos diferente".

¿Hará Pedro Sánchez como sus colegas francés y portugués?