jueves. 28.03.2024

Desde hace tiempo CiU ha dejado de ser aquel partido nacionalista con tintes interclasistas y sociales de los tiempos del primer Jordi Pujol. Hoy es una Federación de partidos de derecha pura y lo está demostrando en todos los ámbitos. Lo demuestra Más, desde el Govern de la Generalitat, y lo hace Duran-Lleida como portavoz de la formación en el Congreso en Madrid.

CiU durante toda esta legislatura en el Congreso, ha sido la formación que de una forma mayor se ha alineado con las posiciones patronales y de los “lobbies” empresariales en todos los temas socio-económicos. Ya fuera en la reforma laboral, en la reforma de la Negociación Colectiva o reciente oponiéndose a la tímida actuación de la Ministra Salgado para hacer que las empresas adelanten parte del Impuesto de Sociedades. Duran-Lleida, es sin duda mejor portavoz patronal que el propia Joan Rosell, presidente de CEOE.

En el ámbito de Catalunya, el Govern de CiU, se sacó la mascará desde el primer momento. Reduciendo los impuestos de los más ricos, como el Impuesto de Sucesiones, que favorecía únicamente a las 500 familias más ricas de Catalunya, al tiempo que iniciaba una carrera, aún no concluida de recorte de los servicios públicos esenciales del “estado del bienestar” como son la sanidad y la educación públicas, y los servicios sociales.

Pero estos días de agosto se ha superado y ha actuado directamente contra los sectores más débiles de la sociedad, contra los perceptores del PIRMI, es decir de la Renta Mínima de Inserción, que es aquella que reciben aquellas personas que no tienes más recursos y están en riesgo de exclusión.

La actuación del Govern de la Generalitat debería avergonzarnos a los ciudadanos de Catalunya si tuviéramos un mínimo de conciencia.

Los hechos son como siguen, El conseller de Empresa y Empleo, señor Mena, y el de Bienestar Social y Familia, señor Cleries, se han ido de vacaciones pero han dejado un “regalito” para los perceptores del PIRMI, es decir los que perciben poco más de 400 euros por no tener más fuentes de ingresos.

El “regalito” ha consistido en cambiar, sin previo aviso, el sistema de cobro. Así cuando el 1 de agosto la gente ha ido a ver el abono en su cuenta bancaria no ha encontrado nada. Los honorables consellers han decidido hacer un pequeño “juego de magia” en agosto y han decidido enviar un cheque al domicilio de lo perceptores, que deben cobrarlo en quince días, bajo pena de perder la percepción. Todo esto sin aviso y con la más absoluta “nocturnidad y alevosía”.

Pero lo más grave es la percepción que los señores consellers y el propio Artur Más tienen de esta parte más debil de la ciudadanía. Sólo debemos leeer las declaracions de Secretario general de Empleo de la Conselleria de la Empresa y Empleo, señor (por decir algo) Enric Colet "escogimos la fecha adrede, sabíamos que había gente que podía sufrir ... además esta gente no tiene vacaciones

El malestar y el desconcierto ha sido notable entre los afectados, vuelvo a decir, el sector mes débil de la sociedad que no tiene la mas mínima capacidad de respuesta. Y la actuación de la Generalitat se ha hecho en agosto porque la mayoría de la ciudadanía está de vacaciones y la repercusión social y política es menor.

Después de 10 días muchos de los afectados aún no han recibido el cheque y los que han cambiado de domicilio, como reconocía satisfecho Colet, “han cometido una falta y por tanto el retardo que tengan en cobrar el cheque será un pequeño castigo”. A la vez a más de 10.000 perceptores se les pide que en cinco días confirmen sus datos, pero cuando llaman a las oficinas de Bienestar no reciben contestación ya que “todas las líneas están ocupadas, y los cinco días pasan rápido y pueden perder la ayuda. Además al ser mes de agosto la administración está bajo mínimos. Y si los afectados acuden a las oficinas municipales, nadie puede darles respuesta ya que las autoridades municipales tampoco han sido previamente advertidas.

La actuación de los consellers y del Govern demuestra su comportamiento: prepotencia y menosprecio hacia los débiles. Y mientras el “mentiroso” de Duran Lleida pretende presentarse como una alternativa de centro frente a la derecha del PP y la izquierda (?) del PSOE. ¡Pero señores si ustedes, los de CiU son tan de derechas como Margaret Tatcher!

La cosa ya venía de lejos. Desde el inicio de su mandato el Govern de CiU endureció las condiciones para el cobro de esta renta mínima, justo ahora cuando, la problemática de paro prolongado, lleva a cada vez más gente parada y que ha acabado con la posibilidad de cobrar cualquier otra prestación se ve abocada a intentar percibir como última alternativa la Renta Mínima de Inserción.

Pero como ha denunciado CCOO de Catalunya en un comunicado el objetivo único del Govern es reducir el gasto y por tanto quiere que la Renta Mínima la perciban menos personas, por menos tiempo y en menor cuantía. Esta actuación ha llevado a la portavoz e ICV-EuiA, Dolors Camats ha calificarla de “indecente”.

No deja ser sintomático que el Govern, con la mayor “cara dura”, base en la lucha contra el fraude la actuación de las Conselleries. Es paradójico que dicha lucha la centren en exclusiva en las personas más necesitadas. Y que persigan el fraude en la gente que cobra 400 euros de ayuda, aquellos que están vinculados a hechos, por citar solo un ejemplo, como el del “caso Palau” que intentan demorar y ocultar.

Los consellers Mena y Cleries si tuviesen la más mínima dignidad, cosa que dudo, dimitirían. Y Artur Más si no fuera un demagogo y un fariseo los cesaría.

Sería bueno y oportuno que la oposición, ante un hecho tan grave como este monte un escándalo en el Parlament, aunque estemos en el mes de agosto.

Tres últimas consideraciones: 1) Que no se preocupe el PP en su deseo de conseguir la mayoría absoluta, sino lo consiguen Duran-Lleida i CiU estarán encantados de dársela, ya que únicamente les separa una cuestión lingüística, i es fácil hablar catalán en la intimidad de la derecha peninsular.

2) Sería bueno que el centro izquierda social-liberal que representa el PSOE, como las fuerzas a su izquierda, y mejor si se construye una alternativa sólida y plural roji-verde, miren de conseguir una mayoría conjunta en las Cortes en las elecciones del 20N, sino tendremos tatcherismo a la española (y catalana en su caso).

3) Si así continúan las cosas en este país, que nadie se extrañe que el modelo social tatcheriano que se pretende imponer pueda con el tiempo traer como consecuencias sucesos como los de Londres durante estos días, Y eso sería más grave y más serio que los actuales movimientos de los indignados de clase media.

No se equivoquen: CiU es pura derecha tatcheriana