nuevatribuna.es
26 de mayo de 2009, 18:45
NUEVATRIBUNA.ES / I.G.C. 26.05.2009
Esta vez no fue una caricatura de las que tan hábilmente dibuja Juan Fernando López Aguilar sino el retrato fiel de lo que representa Jaime Mayor Oreja. Ese era el principal objetivo a conseguir del PSOE en el primer debate televisado de la campaña electoral. "La estrategia estaba muy medida, se trataba de retratar al candidato del PP frente al socialista con dos visiones muy distintas de ver la política", señalan fuentes de Ferraz. Quizá por ello, el PSOE no sacó a relucir la operación Gürtel, "no era necesario" �dicen- ya que durante las horas previas Leire Pajín se ocupó de arremeter contra el PP por la trama de corrupción que salpica a este partido.
Con la resaca del día después, el Grupo socialista se ha reunido este martes en el Congreso para hacer balance del debate y prospección de una campaña que para los socialistas "acaba de empezar". La principal tarea que tiene el PSOE es movilizar a su electorado. Eso fue lo que puso de manifiesto López Aguilar que pidió a los diputados y senadores de su partido que hagan un esfuerzo de movilización ya que su "principal adversario" es la "abstención".
Recibido con aplausos, el candidato del PSOE a las elecciones europeas criticó el despliegue de "ideas reaccionarias y retrógradas" que hizo Mayor Oreja, "invocando con avaricia y fruición a los parados" y manipulando el debate en torno a la reforma del aborto, cuando el aborto ya "está reconocido por ley".
Con los mismos argumentos se expresó la secretaria de Organización socialista y responsable de campaña que hizo un llamamiento a su Grupo para "hacer pedagogía" y así conseguir la victoria el 7 de junio frente a una derecha "miope" que "falta a la verdad" y que esgrime una "doble moral".
El PSOE ha diseñado una campaña sumamente movilizadora con el objetivo de que la participación no se quede por debajo del umbral de anteriores citas electorales. En los últimos comicios al Parlamento Europeo, la participación en España fue del 45,14%, cifra que el PSOE confía que vuelva a repetirse para garantizarles la victoria. Los últimos sondeos que manejan en Ferraz les sitúan un punto por encima pero el empate técnico que arrojan otras encuestas como el CIS ponen de manifiesto la dificultad del PSOE para ganar al principal partido de la oposición. "No es fácil, pero nos estamos movilizando mucho y confiamos obtener buenos resultados el 7 de junio", señalan las mismas fuentes.
Para algunos dirigentes socialistas, el debate no sirvió para "mover" significativamente el actual mapa electoral que arrojan los sondeos. Si bien es cierto �afirman algunos- que en España "hay una mayoría sociológica de izquierdas", una alta abstención puede perjudicar y mucho al PSOE. Por lo pronto, los estrategas de Ferraz junto con el candidato López Aguilar han conseguido "retratar" a Mayor Oreja, al que califican de "carca", "tristón", "retrógrado" e incluso "franquista", afirman en alusión al comentario hecho en el debate por el candidato del PP sobre que el Gobierno tenía que haber convocado un Consejo de Ministros por la pitada al himno nacional durante la final de la Copa del Rey. "¿Qué pide? ¿Un estado de excepción?", dice con asombro otro diputado socialista.
Esta vez no fue una caricatura de las que tan hábilmente dibuja Juan Fernando López Aguilar sino el retrato fiel de lo que representa Jaime Mayor Oreja. Ese era el principal objetivo a conseguir del PSOE en el primer debate televisado de la campaña electoral. "La estrategia estaba muy medida, se trataba de retratar al candidato del PP frente al socialista con dos visiones muy distintas de ver la política", señalan fuentes de Ferraz. Quizá por ello, el PSOE no sacó a relucir la operación Gürtel, "no era necesario" �dicen- ya que durante las horas previas Leire Pajín se ocupó de arremeter contra el PP por la trama de corrupción que salpica a este partido.
Con la resaca del día después, el Grupo socialista se ha reunido este martes en el Congreso para hacer balance del debate y prospección de una campaña que para los socialistas "acaba de empezar". La principal tarea que tiene el PSOE es movilizar a su electorado. Eso fue lo que puso de manifiesto López Aguilar que pidió a los diputados y senadores de su partido que hagan un esfuerzo de movilización ya que su "principal adversario" es la "abstención".
Recibido con aplausos, el candidato del PSOE a las elecciones europeas criticó el despliegue de "ideas reaccionarias y retrógradas" que hizo Mayor Oreja, "invocando con avaricia y fruición a los parados" y manipulando el debate en torno a la reforma del aborto, cuando el aborto ya "está reconocido por ley".
Con los mismos argumentos se expresó la secretaria de Organización socialista y responsable de campaña que hizo un llamamiento a su Grupo para "hacer pedagogía" y así conseguir la victoria el 7 de junio frente a una derecha "miope" que "falta a la verdad" y que esgrime una "doble moral".
El PSOE ha diseñado una campaña sumamente movilizadora con el objetivo de que la participación no se quede por debajo del umbral de anteriores citas electorales. En los últimos comicios al Parlamento Europeo, la participación en España fue del 45,14%, cifra que el PSOE confía que vuelva a repetirse para garantizarles la victoria. Los últimos sondeos que manejan en Ferraz les sitúan un punto por encima pero el empate técnico que arrojan otras encuestas como el CIS ponen de manifiesto la dificultad del PSOE para ganar al principal partido de la oposición. "No es fácil, pero nos estamos movilizando mucho y confiamos obtener buenos resultados el 7 de junio", señalan las mismas fuentes.
Para algunos dirigentes socialistas, el debate no sirvió para "mover" significativamente el actual mapa electoral que arrojan los sondeos. Si bien es cierto �afirman algunos- que en España "hay una mayoría sociológica de izquierdas", una alta abstención puede perjudicar y mucho al PSOE. Por lo pronto, los estrategas de Ferraz junto con el candidato López Aguilar han conseguido "retratar" a Mayor Oreja, al que califican de "carca", "tristón", "retrógrado" e incluso "franquista", afirman en alusión al comentario hecho en el debate por el candidato del PP sobre que el Gobierno tenía que haber convocado un Consejo de Ministros por la pitada al himno nacional durante la final de la Copa del Rey. "¿Qué pide? ¿Un estado de excepción?", dice con asombro otro diputado socialista.
