nuevatribuna.es
7 de junio de 2009, 20:49
NUEVATRIBUNA.ES - 07-06-2009
“Podía haber sido peor”. Esa fue la frase más repetida pasadas las diez de la noche y con los resultados en la mano. “A las duras y a las maduras”, decía uno de los militantes, “yo no lo veo tan mal” contestaba su compañero.
Resignación y hasta una cierta alegría era el ambiente que se respiraba en Ferraz tras conocer la esperada noticia. Mariano Rajoy había ganado las elecciones, pero el PSOE se postulaba como la primera fuerza socialista europea y esa fue la baza a la que se abrazó la ejecutiva del partido.
Una derrota agridulce, en la que la crisis económica fue la justificación socialista ante el veredicto de las urnas: “Estas elecciones se han celebrado en un contexto de crisis muy aguda, mucha gente lo está pasando mal y eso se ha visto en los resultados de toda Europa, por eso consideramos que el Partido Socialista ha quedado en muy buen lugar”, decía Leire Pajín en la rueda de prensa tras conocer la noticia. Gran parte de la ejecutiva no se quiso perder el discurso de la Secretaria de Organización del PSOE, y Bibiana Aído, Magdalena Álvarez, Ángel Gabilondo, Tomás Gómez y Maru Menéndezse colaron entre las cámaras y los redactores para escuchar las palabras de Leire como unos periodistas más. “¿No vamos a dejarla sola?” decía Magdalena Álvarez cuando el director de prensa del PSOE indicaba a la ejecutiva que no podían estar allí, tenían que ir bajando para esperar al esperado Juan Fernando López Aguilar.
La tensión y la inquietud que se mascaba en la cuarta planta de Ferraz (desde allí la ejecutiva se iba informando de los resultados) según decía uno de los futuros eurodiputados, parecía haberse desvanecido. Y es que a lo largo de la tarde-noche los ánimos cambiaron bastante.
El ‘chill out’ que se había montado para que medios y militantes esperaran los resultados se fue llenando poco a poco. Cigarros que se encendían y se apagaban constantemente y un ambiente más que pesimista. Frases del tipo “mejor me voy no quiero conocer la tragedia que nos espera” o “yo con tal de que no nos saquen más de diez puntos me quedo contento” describían bien los ánimos de la primera hora y media.
A partir de las nueve y media y ya con el ‘chill out’ abarrotado las sonrisas y las bromas cambiaban el paisaje. Las porras sobre los resultados eran el tema de conversación, unos a otros se preguntaban qué sabían, y la ausencia de noticias era la respuesta generalizada. Sin embargo 20 minutos antes de saber el veredicto llegaba un run runque se pasó con velocidad: “Dicen que los populares sólo nos van a ganar por un escaño, 23-22”, los más optimistas aventuraban que los socialistas todavía tenían la oportunidad de ganar. De las caras tristes de los ocho de la tarde, las risas y el entusiasmo se veían ya entrada la noche.
El run run no dio en el clavo, pero los resultados casi por unanimidad se leyeron como buenas noticias. Ahora tocaba esperar las palabras de Juan Fernando, la terraza improvisada se quedaba vacía y todo el mundo bajaba al salón para escuchar al protagonista de la noche.
Se hizo esperar unos minutos, mientras los militantes bastante discretos y tranquilos hacían su lectura positiva de la derrota. Los cachorros socialistas pusieron el entusiasmo: “Venga vamos a sacar las banderas, que el ánimo no decaiga”, decía una jovencita a la que rápidamente siguieron sus compañeros. Juan Fernando López Aguilarhacía su aparición, y la misma chica entusiasta era la primera en atreverse a aplaudir, los más mayores la acompañaron y bajo el grito de “Juan Fernando” y aplausos un poco tímidos, comenzaba su discurso el candidato socialista. “Nos hemos dejado la piel en esta campaña y quiero agradecer el voto que hemos recibido de los casi seis millones de ciudadanos”, decía para abrir boca. Aguilar felicitó la victoria de Mayor Oreja y aseguró que le había dicho al vencedor que el PSOE iba a “trabajar duramente” para construir una Europa mejor: “Somos el referente del socialismo en Europa y vamos a tener un papel determinante en todo lo que suceda en el parlamento europeo, porque los valores de la izquierda son la respuesta para esta crisis”.
Visiblemente emocionado Aguilar insistió en agradecer el apoyo recibido por sus compañeros: “Cada día me siento más orgulloso de ser socialista, porque no somos un partido en blanco y negro, del pasado, somos el color rojo, como el corazón que bombea nuestra sangre”. Las juventudes del PSOE se enloquecían y volvían a provocar los aplausos, Juan Fernando se crecía y concluía: “Sin ustedes nosotros no somos absolutamente nada, gracias”.
Una vez terminado el discurso, los militantes hacían cola por acercarse a López Aguilar, él con su permanente sonrisa se hacía fotos con todos ellos. Josep Borrell era el primero en salir de Ferraz, en 20 minutos la ejecutiva se había marchado. Mañana toca analizar resultados, pero “podía haber sido peor”.
“Podía haber sido peor”. Esa fue la frase más repetida pasadas las diez de la noche y con los resultados en la mano. “A las duras y a las maduras”, decía uno de los militantes, “yo no lo veo tan mal” contestaba su compañero.
Resignación y hasta una cierta alegría era el ambiente que se respiraba en Ferraz tras conocer la esperada noticia. Mariano Rajoy había ganado las elecciones, pero el PSOE se postulaba como la primera fuerza socialista europea y esa fue la baza a la que se abrazó la ejecutiva del partido.
Una derrota agridulce, en la que la crisis económica fue la justificación socialista ante el veredicto de las urnas: “Estas elecciones se han celebrado en un contexto de crisis muy aguda, mucha gente lo está pasando mal y eso se ha visto en los resultados de toda Europa, por eso consideramos que el Partido Socialista ha quedado en muy buen lugar”, decía Leire Pajín en la rueda de prensa tras conocer la noticia. Gran parte de la ejecutiva no se quiso perder el discurso de la Secretaria de Organización del PSOE, y Bibiana Aído, Magdalena Álvarez, Ángel Gabilondo, Tomás Gómez y Maru Menéndezse colaron entre las cámaras y los redactores para escuchar las palabras de Leire como unos periodistas más. “¿No vamos a dejarla sola?” decía Magdalena Álvarez cuando el director de prensa del PSOE indicaba a la ejecutiva que no podían estar allí, tenían que ir bajando para esperar al esperado Juan Fernando López Aguilar.
La tensión y la inquietud que se mascaba en la cuarta planta de Ferraz (desde allí la ejecutiva se iba informando de los resultados) según decía uno de los futuros eurodiputados, parecía haberse desvanecido. Y es que a lo largo de la tarde-noche los ánimos cambiaron bastante.
El ‘chill out’ que se había montado para que medios y militantes esperaran los resultados se fue llenando poco a poco. Cigarros que se encendían y se apagaban constantemente y un ambiente más que pesimista. Frases del tipo “mejor me voy no quiero conocer la tragedia que nos espera” o “yo con tal de que no nos saquen más de diez puntos me quedo contento” describían bien los ánimos de la primera hora y media.
A partir de las nueve y media y ya con el ‘chill out’ abarrotado las sonrisas y las bromas cambiaban el paisaje. Las porras sobre los resultados eran el tema de conversación, unos a otros se preguntaban qué sabían, y la ausencia de noticias era la respuesta generalizada. Sin embargo 20 minutos antes de saber el veredicto llegaba un run runque se pasó con velocidad: “Dicen que los populares sólo nos van a ganar por un escaño, 23-22”, los más optimistas aventuraban que los socialistas todavía tenían la oportunidad de ganar. De las caras tristes de los ocho de la tarde, las risas y el entusiasmo se veían ya entrada la noche.
El run run no dio en el clavo, pero los resultados casi por unanimidad se leyeron como buenas noticias. Ahora tocaba esperar las palabras de Juan Fernando, la terraza improvisada se quedaba vacía y todo el mundo bajaba al salón para escuchar al protagonista de la noche.
Se hizo esperar unos minutos, mientras los militantes bastante discretos y tranquilos hacían su lectura positiva de la derrota. Los cachorros socialistas pusieron el entusiasmo: “Venga vamos a sacar las banderas, que el ánimo no decaiga”, decía una jovencita a la que rápidamente siguieron sus compañeros. Juan Fernando López Aguilarhacía su aparición, y la misma chica entusiasta era la primera en atreverse a aplaudir, los más mayores la acompañaron y bajo el grito de “Juan Fernando” y aplausos un poco tímidos, comenzaba su discurso el candidato socialista. “Nos hemos dejado la piel en esta campaña y quiero agradecer el voto que hemos recibido de los casi seis millones de ciudadanos”, decía para abrir boca. Aguilar felicitó la victoria de Mayor Oreja y aseguró que le había dicho al vencedor que el PSOE iba a “trabajar duramente” para construir una Europa mejor: “Somos el referente del socialismo en Europa y vamos a tener un papel determinante en todo lo que suceda en el parlamento europeo, porque los valores de la izquierda son la respuesta para esta crisis”.
Visiblemente emocionado Aguilar insistió en agradecer el apoyo recibido por sus compañeros: “Cada día me siento más orgulloso de ser socialista, porque no somos un partido en blanco y negro, del pasado, somos el color rojo, como el corazón que bombea nuestra sangre”. Las juventudes del PSOE se enloquecían y volvían a provocar los aplausos, Juan Fernando se crecía y concluía: “Sin ustedes nosotros no somos absolutamente nada, gracias”.
Una vez terminado el discurso, los militantes hacían cola por acercarse a López Aguilar, él con su permanente sonrisa se hacía fotos con todos ellos. Josep Borrell era el primero en salir de Ferraz, en 20 minutos la ejecutiva se había marchado. Mañana toca analizar resultados, pero “podía haber sido peor”.
