sábado. 20.04.2024
José Antonio Martín Pallín en una foto de archivo.
José Antonio Martín Pallín en una foto de archivo.

El magistrado del Tribunal Supremo (TS) José Antonio Martín Pallín ha recordado este martes que Muamar Gadafi cometió un delito de lesa humanidad al ordenar el atentado terrorista de Lockerbie (Escocia), que acabó con la vida de 259 personas que viajaban en un avión de la compañía Pan Am.

Por dicho crimen el mandatario libio no puede ser juzgado debido que en aquel momento no existía el Tribunal Penal Internacional. Por ello, Pallín ha subrayado la necesidad de que en estos momentos se juzgue la "masacre" que está cometiendo contra su pueblo. "Parece que ahora han encargado una orden de imputación internacional que tiene que encargar el Consejo de Seguridad de la ONU y a ver si el fiscal y la Fiscalía del Tribunal Penal Internacional hacen algo", ha comentado el magistrado en una entrevista en Telecinco.

No obstante, ha precisado, en el momento en el que se produzca el juicio, Gadafi tiene que tener "todas las garantías de defensa". Pallín ha asegurado que desde el punto de vista humanitario, es "legítimo" la intervención militar de la ONU en Libia y ha recordado que no se va a matar a Gadafi gracias al Estatuto de Roma del Tribunal Penal que abolió la pena de muerte. "Eso de licencia para matar está bien para las películas pero un jurista no puede admitirlo de ninguna de las maneras", ha destacado el magistrado del TS.

ATENTADO TERRORISTA DE LOCKERBIE

El 21 de diciembre de 1988 un Boeing de la compañía Pan American explotó en pleno vuelo (desde Londres a Nueva York) cayendo sus restos en la ciudad escocesa de Lockerbie. Murieron 259 personas (y otras 11 más que estaban en tierra) de las cuales 189 eran civiles norteamericanos.

La investigación, llevada a cabo por la policía británica, en colaboración con la CIA y el FBI desembocó en dos acusaciones por asesinato contra Abdelbaset Ali Mohmed Al Megrahi, un agente de la inteligencia libia y jefe de seguridad de las Aerolíneas Árabes Libias (LAA), y Al Amin Khalifa Fhimah, el director de la estación de las LAA en el aeropuerto de Luqa, Malta.

Libia se negó a entregar a los sospechosos -ambos ciudadanos libios- lo que hizo que la ONU estableciera sanciones contra el país. Tras unas largas negociaciones con Gadafi, éste cedió y entregó a los acusados en abril de 1999 a la policía escocesa. El 31 de enero de 2001, Megrahi fue condenado por asesinato por un tribunal formado por tres jueces escoceses y sentenciado a 27 años de prisión. Fhimah fue absuelto.

En octubre de 2002, el gobierno de Libia ofreció una compensación de unos 10 millones de dólares estadounidenses por víctima y el 15 de agosto de 2003 aceptó formalmente la responsabilidad por el atentado. El 12 de septiembre de 2003, las Naciones Unidas levantaron las sanciones contra Libia que habían durado 15 años.

Durante las protestas contra el régimen libio que se iniciaron el pasado 23 de febrero, el ex ministro de Justicia, Mustafa Abdel Jalil, aseguró que Gadafi fue el que ordenó el atentado terrorista de Lockerbie.

Por su parte, la secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, dijo en el Congreso que su país adoptará "cualquier acción legal" si el Departamento de Justicia comprueba que el líder libio ordenó el atentado de Lockerbie en 1988.

Martín Pallín recuerda que Gadafi ya cometió un delito de lesa humanidad por el...