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NUEVATRIBUNA.ES - 9.3.2009

La remodelación tiene un candidato claro para el relevo: el vicepresidente segundo del Ejecutivo, Pedro Solbes, que ha confesado en recientes declaraciones su deseo de abandonar el cargo. Aunque siempre lo ha comentado en tono de broma, como cuando dijo que envidiaba a Mariano Fernández Bermejo tras su cese por haber conseguido el status de EX ministro, hace tiempo que el vicepresidente segundo considera plenamente satisfechas sus aspiraciones políticas y que no oculta el cansancio que le produce estar en primera línea de fuego.

El empeoramiento de la crisis económica y de las previsiones que se barajan para lo que nos queda de año, tras la adopción de sucesivos paquetes de paliativos, aconsejan aires nuevos en el área económica del Gobierno.

En cuanto al candidato para sustituirle, algunos medios dan por descartados los nombres que se han venido barajando estos meses: el de Miguel Sebastián, actual ministro de Industria y hombre de confianza del presidente, y David Vegara, secretario de Estado de Economía, a quien estos medios achacan “escaso recorrido político” y un perfil "demasiado técnico".

El caso es que al pesimismo que rodea a los indicadores económicos hay que sumar la mala salud del diálogo social y la estrategia del PP que pasa por volcar todo el peso de su labor de oposición en la economía con el fin, entre otras cosas, de distraer la atención de los escándalos de corrupción que le salpican. María Dolores de Cospedal lo ha dejado claro este lunes al valorar el año de Gobierno como decididamente “malo”.

Poco antes, el secretario general de UGT, Cándido Méndez, hablaba en una comparecencia ante la prensa de la descoordinación entre algunos ministerios económicos, sugiriendo que resolver este problema es un asunto prioritario para el presidente Zapatero.

El PSOE, por su parte, no se moja. La secretaria de Organización, Leire Pajín, ha dicho que “esa decisión sólo le corresponde a una persona” que es el propio presidente. Una decisión que, de todas formas, no se espera para antes del 1 de abril. Ese día se reunirá el G-20 en Londres y sólo después Zapatero estaría dispuesto a abordar los cambios de su equipo.

Y uno de los protagonistas de la eventual remodelación, Pedro Solbes, al ser preguntado sobre si la había discutido con el presidente antes de participar en la reunión de ministros de Economía de la eurozona, ha contestado simplemente: "Ni se me ocurriría".

El Gobierno cumple un año en medio de rumores sobre su remodelación