lunes. 07.10.2024
dolores del campo 1
Dolores del Campo, nueva miembro del Comité Internacional de Pesas y Medidas.

Metrología, no meteorología. Dolores del Campo, no ‘pain of field’.

El cachondeo generado esta semana en redes sociales por la mala pasada del traductor de la web del Ministerio de Industria que convirtió su nombre propio en ‘it is pain of field’ (‘es un dolor de campo’, traducción literal del castellano al inglés) ha dado protagonismo a esta alta funcionaria que acaba de ser nombrada miembro del Comité Internacional de Pesas y Medidas (CIPM).

Precisamente ese nombramiento era lo que quería anunciar el gabinete de la ministra Reyes Maroto en el comunicado emitido el martes cuya versión en inglés contenía este error garrafal del que se dio cuenta la periodista de Reuters Sonya Dowsett. Pero, claro, con este gazapo, Dolores del Campo, se convirtió en trending topic por una “gracieta” de la que, confiesa, haberse “reído muchísimo”.

ministerio

El error de traducción de la web del Ministerio de Industria

Hacía 40 años que no había ningún español en el Comité Internacional de Pesas y Medidas

Que se lo ha tomado con humor no hay duda. Nos cuenta, en conversación con este periódico, que ella misma se ha ocupado de difundir la anécdota entre conocidos, amigos, miembros de su familia, para “reírnos todos juntos, tiene su gracia”, dice. Se enteró por un colega porque “no es muy de redes sociales” y este mismo jueves ha sabido que el mismísimo Buenafuente hizo mención del tema en su arranque de programa. Si esto sirve para visibilizar su trabajo y el de su equipo, bienvenido sea y a “explotarlo todo lo que sea posible”, afirma divertida.

Física de profesión y “vocación”, experta en mediciones, Dolores del Campo es jefa de área de Termodinámica y Medioambiente del CEM (Centro Español de Metrología) y desde hace unos días miembro de CIPM (Comité Internacional de Pesas y Medidas).

“Hacía 40 años que no había ningún español en ese comité”, resalta, y eso que “España fue uno de los primeros 17 firmantes de la Convención del Metro” que se rubricó en París en 1875 y “fue un español, el general Ibáñez de Ibero, el primero en presidir el CIPM”. Como miembro de la Convención, España forma parte de la Conferencia General de Pesas y Medidas integrada por 60 países que es la que nombra dicho Comité del que forman parte 18 expertos, con solo dos mujeres, una de ellas nuestra protagonista.

“España tuvo mucha influencia y mucha importancia en esa primera Convención de Metro, en la formación del CIPM, en el Buró Internacional donde está guardado ese kilogramo de platino e iridio. Una influencia que hemos perdido a lo largo del tiempo y sobre todo en estos últimos cuarenta años, una pena, algo en lo que habíamos sido líderes en ciencia”, lamenta.

30 AÑOS DEDICADA A LA METROLOGÍA

dolores campo 2

Hace 30 años que Dolores del Campo aterrizó como becaria en el CEM (organismo dependiente del Ministerio de Industria) tras cursar su carrera en la Complutense y la Politécnica de Madrid. Poco a poco fue ascendiendo: de técnica de laboratorio a jefa de laboratorio y a responsable de área que es hoy. “La verdad es que es un placer y un privilegio poder trabajar aquí. Sobre todo para alguien de mi formación (yo soy física vocacional), poder trabajar en un laboratorio tan relacionado con la física más básica que son las unidades de medida es, desde luego, un privilegio y un honor y estoy encantada de realizar mi trabajo aquí”, nos cuenta.

En su día a día analiza y vigila el mantenimiento de los patrones nacionales de temperatura y mezclas de gas, un asunto muy relacionado con el medio ambiente. “En el CEM trabajamos con las unidades de medida relacionados con temperatura, con longitud, con electricidad y con masa; es decir: el kilogramo, el kelvin, el amperio y el metro”. Con los recortes derivados de la crisis económica, el Centro ha perdido un 30% de personal “lo que ha llevado a limitar muchas de nuestras actividades”, lamenta, al igual que el hecho de que su profesión sea tan desconocida y “poco reconocida a nivel institucional”.

“Tengo un compañero que dice que un buen metrólogo tiene que ser como un buen árbitro en un partido, que debe hacer una labor tan buena que nadie debe enterarse de que existe, porque si nuestra labor no fuera buena, todo el mundo estaría quejándose, con lo que marcan los radares, con los kilómetros, con el kilo de manzanas que compramos, con la fiebre que tenemos y que no es la que marca el termómetro”, nos explica.

“Desde que nos levantamos por la mañana estamos sometidos a las medidas”

Y es que la metrología, esa gran desconocida, “está en la vida diaria de todos, porque desde que nos levantamos por la mañana estamos sometidos a las medidas”, subraya. “Desde que encendemos la luz y el contador de la luz empieza a funcionar; abrimos el grifo de agua y empieza a correr el agua; miramos el reloj y queremos que el tiempo sea lo más exacto posible… Cuando nos pilla un radar y nos pone una multa, cuando nos hacen una prueba de alcoholemia, nos interesa que eso esté verificado por alguien, que alguien haya comprobado que esas medidas sean lo más exactas posible”, y ese alguien son los expertos en metrología “los que estamos al final de toda esa cadena de medidas”, afirma Dolores del Campo que también pone de relieve el “soporte” que organismos como el CEM dan a la industria.

El CIPM, del que Dolores del Campo es ya miembro, es el comité que vela por la armonización de las unidades a nivel internacional. El hecho de que España vuelva a formar parte del mismo es una noticia de suma relevancia. Como resalta esta experta, es importante “estar al tanto y poder influir en los cambios que se están produciendo o que se puedan producir a futuro” y añade que “si la globalización es un hecho es gracias a la metrología y a la armonización de las unidades de medida y del sistema internacional”.

Conocedores ahora de todo esto, lo de ‘pain of field’ no deja de ser una anécdota que, según nos informan desde el Ministerio de Industria, están trabajando para que no vuelva a ocurrir. Esperemos. No vaya a ser que siguiendo en el error de las traducciones automáticas acabemos llamando a la ministra ‘Kings Maroto’ en lugar de Reyes Maroto.

Descubrimos a la verdadera ‘pain of field’