jueves. 25.04.2024
NUEVATRIBUNA.ES - 18.3.2009

A la menor oportunidad, los máximos dirigentes "populares" corren a arropar a su icono de la resistencia contra la persecución del malvado Juez Garzón.

Hace unos días, se lo trajeron a Madrid con el fin de achucharle ante las cámaras. Este miércoles y con motivo de la mascletá o, lo que es lo mismo, el pistoletazo de salida de las Fallas, el líder, Mariano Rajoy, se ha desplazado a Valencia para acompañar a Camps en el balcón desde el que han asistido al ensordecedor espectáculo de pirotecnia. Con ellos ha estado también la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá.

Rajoy ha comentado que le divierte mucho visitar esta ciudad que, por otra parte, le recuerda sus años de mili. Ni él, ni Camps, ni Barberá, ni por supuesto las falleras han dicho una sola palabra de las famosas facturas, esas que serivirían para demostrar que el dirigente valenciano se pagó sus trajes y que zanjarían de una vez por todas las sospechas de que renovó su vestuario con cargo al bolsillo de Francisco Correa, el cerebro de la trama de corrupción, que a cambio de estos y otros "regalos" hacía pingües negocios con las administraciones gobernadas por el PP.

Camps, el más deseado