nuevatribuna.es
19 de marzo de 2009, 18:17
NUEVATRIBUNA.ES - 19.03.2009
“El optimismo de zapatero es una falsa ilusión, un truco de magia (�) Zapatero no tiene credibilidad en estos momentos (�) Krugman está más cerca del acierto que Zapatero”. El Gobierno y el PSOE son blanco de las críticas del nuevo líder de Izquierda Unida. Después de tres meses de su elección para suceder a Gaspar Llamazares, Cayo Lara no se plantea ser candidato en las próximas elecciones generales. Lo importante ahora �dice- es “coser las heridas” en su formación.
nuevatribuna.es. Anticapitalista, antineoliberal, republicano y postulando a la izquierda marxista. Hay quien tacha su discurso de antiguo.
Cayo Lara. Estamos en una crisis de civilización. Una crisis financiera, medioambiental, una crisis económica, de valores humanos, una crisis alimentaria�; y esto lo ha generado el sistema capitalista de producción y especialmente el neoliberalismo. A partir de ahí lo que viene no es refundar el capitalismo, sino desarrollar el modelo de socialismo. No me parece un discurso trasnochado. La propia Constitución Española permite desde la banca pública, a la planificación democrática de la economía, la intervención publica del Estado, el rescate de las empresas privatizadas y una política fiscal progresiva.
ZAPATERO, UN NEOLIBERAL
N.T. Y el Partido Socialista ¿no hace políticas socialistas?
C.Y. El PSOE ha hecho gestos y políticas positivas en determinadas libertades, pero en política económica es casi tan neoliberal como el PP. Con el Gobierno del PSOE se siguen privatizando a una velocidad de vértigo servicios públicos esenciales. Ha renunciado a una intervención pública del Estado y se ha dejado llevar por la ola de neoliberalismo que invade el mundo.
N.T. Entonces usted, ¿está más cerca del pesimismo de Krugman que del optimismo de Zapatero?
C.Y. El optimismo de Zapatero es una falsa ilusión, un truco de magia. La ilusión es una droga dura, de las más duras que se le puede colocar a la gente y Zapatero tiene mucha facilidad para colocar la ilusión, pero al final la ilusión cuando no tiene base se convierte en humo. Zapatero no tiene credibilidad en estos momentos con los planteamientos que está haciendo a la sociedad, y Krugman viene y dice que esto se hunde, que no hay salida. Creo que Krugman está más cerca de acertar, aunque no sea de una manera tan rotunda.
SÍ A LA HUELGA GENERAL
N.T. Seguimos con el constante run run de la reforma laboral.
C.Y. Después de la conversación de Krugman con Zapatero... toquemos madera, porque ha planteado que la salida de este país empiece por bajar los salarios, lo ha dicho. Este run run se está planteando desde la propia CEOE. El liberalismo plantea que el despido tiene que ser absolutamente libre y las relaciones contractuales entre empresa y trabajador como eran en el siglo pasado.
N.T. ¿Y qué dice de la respuesta que están dando los sindicatos a todo esto?
C.Y. Los sindicatos no lo van a permitir. El despido ya es prácticamente libre, la media que se está pagando al año es 19 días. Si se plantea como tal provocaría una reacción de dureza. Pero ahora, los sindicatos no ven la huelga general porque todavía no se ha producido una agresión a los derechos de los trabajadores.
N.T. Y desde IU, ¿cómo se ve la huelga general?
C.Y. Si vamos igual que estamos no va haber más remedio. Pero no hablamos de una huelga general clásica, no es una huelga de obreros contra patronos sino una huelga contra todo un poder económico y un Gobierno que ha estado mirando, aplaudiendo, apoyando y fomentando ese modelo de Estado.
DESINTEGRACIÓN SOCIAL
N.T. Recientemente se vio usted con Fernández Toxo. ¿Cree que se ha producido un cambio en CCOO?
C.Y. Creo que hay un cambio y un discurso distinto. Coincidimos en el análisis de la situación que vive el país. Una de las cosas que les hemos trasladado es la preocupación de que puede producirse una desintegración social y que se vuelva a los viejos discursos. Puede aflorar una movilización desde sectores más reaccionarios levantando la bandera de la xenofobia y el racismo. La calle la tiene que ocupar el discurso de la izquierda política y social y que seamos capaces de trasladar a la gente que los males de esta sociedad están viniendo por un modelo de desarrollo cuyos autores han sido el neoliberalismo encabezado por el PP y acompañado por el PSOE.
N.T. Con la que está cayendo y con el PSOE debilitado por la crisis, IU tiene más posibilidades de sacar rédito ya que se disputan el mismo espacio electoral.
C.Y. En los 13-14 millones de personas que pueda haber en el electorado de izquierdas entendida también por todos los que votan a partidos nacionalistas de izquierda�, claro que ahí nos estamos disputando el electorado. Pero en este país se hizo una apuesta clarísima por el bipartidismo cuando se decidió hace 30 años que la fuerza que tenía el PCE en la calle -que era mucha, porque realmente era un partido que había levantado la bandera más alta, más fuerte y más masiva contra la dictadura- no debía llevarse al Parlamento.
REFORMA ELECTORAL
N.T. IU propugna una reforma electoral. La propuesta del Consejo de Estado se acerca mucho a las tesis que defiende su formación.
C.Y. No conocemos el informe, solo sabemos lo que se ha publicado. Parece que apunta en la dirección de los 400 diputados (en el Congreso, en lugar de 350) y de cambiar incluso la Ley d’Hont. IU seguirá defendiendo que cada voto y cada persona tiene que tener el mismo valor a efectos de la representatividad. Si un partido político necesita 70.000 votos para tener un diputado quien tenga 70.000 votos tiene que tener un diputado.
N.T. IU tiene un millón de votos y sólo un diputado.
C.Y. Al PP y al PSOE les cuesta 7 veces menos votos el diputado que a nosotros. Pero los grandes beneficiados son los partidos nacionalistas que con menos votos que IU tienen la sartén del mango en este país.
LA IGLESIA, RETRÓGRADA
N.T. ¿Y cómo ve al PP?
C.Y. El PP no tiene alternativa de modelo de Estado, lo único que hace es más de lo mismo, con la vieja cantinela de bajar los impuestos y luego intentando tapar sus vergüenzas, que tiene muchas. Las ‘cajas B’ tenían que desaparecer de los partidos políticos. Y así tendríamos una democracia de más calidad porque ese es precisamente el problema que tiene el PP, que está intentando lavarse la cara en asuntos donde hay una trama que cada vez avanza más.
N.T. ¿Qué le ha parecido la campaña antiabortista de la Iglesia?
C.Y. Si no recibieran el dinero que reciben del Estado a lo mejor tenían menos recursos para lanzar campañas contra los derechos de las mujeres. Hemos dado a la Iglesia 61.000 millones de euros, un dinero que podrían haberlo dedicado a otras cosas. La iglesia sigue metiéndose en los mismos charcos de siempre y lo último es escuchar al Papa decir que el preservativo produce más SIDA. La jerarquía religiosa se está situando en una posición absolutamente retrógrada y que va contra el mundo. Siempre he dicho y lo mantengo que en África se está muriendo mucha gente precisamente por la intransigencia que tiene la iglesia con temas como el preservativo. Entonces son responsables directos de la muerte de mucha gente y esto hay que decirlo con todas las palabras.
N.T. El plan Bolonia está siendo otro de los asuntos más polémicos de la actualidad. Ustedes se han sumado a las protestas.
C.Y. Entendemos que se va a una educación elitista. No se han conformado con entrar en las universidades privadas para formar de manera privada en sus ideologías a los jóvenes de las clases altas de la sociedad europea y ahora han pretendido meter la mano en la pública. No se puede mercantilizar la educación y creemos que se quiere caminar por esa dirección.
COHESIONAR IU
N.T. ¿Se ve algún día subido a la tribuna del Congreso?
C.Y. Pues no lo sé, no me lo he planteado nunca, como no me planteaba estar en la coordinación, la organización lo tendrá que ver, lo tendrá que decidir cuando llegue la hora de presentar candidaturas y candidatos. El trabajo apasionante de este tiempo es que esta organización cosa heridas y se están cosiendo. Una organización dividida como la que hemos tenido era un desastre y el papel que quiero jugar es cohesionar y que intentemos confluir con distintos sectores sociales que nos permitan generar esa alternativa necesaria.
N.T. Pero, ¿aceptaría ser candidato?
C.Y. Está muy lejos. Es un planteamiento que no me he hecho ni me quiero hacer. Estos son proyectos colectivos que para mí es lo más apasionante. Los liderazgos no forman parte de mi forma de ser; estoy en contra del personalismo y el forjar líderes. Soy partidario de los colectivos, del trabajo en común, de la gente pensante. Los que se suben y se pavonean en las altas tribunas me parece que están muy lejos de la gente y yo no formo parte de esa clase política.
“El optimismo de zapatero es una falsa ilusión, un truco de magia (�) Zapatero no tiene credibilidad en estos momentos (�) Krugman está más cerca del acierto que Zapatero”. El Gobierno y el PSOE son blanco de las críticas del nuevo líder de Izquierda Unida. Después de tres meses de su elección para suceder a Gaspar Llamazares, Cayo Lara no se plantea ser candidato en las próximas elecciones generales. Lo importante ahora �dice- es “coser las heridas” en su formación.
nuevatribuna.es. Anticapitalista, antineoliberal, republicano y postulando a la izquierda marxista. Hay quien tacha su discurso de antiguo.
Cayo Lara. Estamos en una crisis de civilización. Una crisis financiera, medioambiental, una crisis económica, de valores humanos, una crisis alimentaria�; y esto lo ha generado el sistema capitalista de producción y especialmente el neoliberalismo. A partir de ahí lo que viene no es refundar el capitalismo, sino desarrollar el modelo de socialismo. No me parece un discurso trasnochado. La propia Constitución Española permite desde la banca pública, a la planificación democrática de la economía, la intervención publica del Estado, el rescate de las empresas privatizadas y una política fiscal progresiva.
ZAPATERO, UN NEOLIBERAL
N.T. Y el Partido Socialista ¿no hace políticas socialistas?
C.Y. El PSOE ha hecho gestos y políticas positivas en determinadas libertades, pero en política económica es casi tan neoliberal como el PP. Con el Gobierno del PSOE se siguen privatizando a una velocidad de vértigo servicios públicos esenciales. Ha renunciado a una intervención pública del Estado y se ha dejado llevar por la ola de neoliberalismo que invade el mundo.
N.T. Entonces usted, ¿está más cerca del pesimismo de Krugman que del optimismo de Zapatero?
C.Y. El optimismo de Zapatero es una falsa ilusión, un truco de magia. La ilusión es una droga dura, de las más duras que se le puede colocar a la gente y Zapatero tiene mucha facilidad para colocar la ilusión, pero al final la ilusión cuando no tiene base se convierte en humo. Zapatero no tiene credibilidad en estos momentos con los planteamientos que está haciendo a la sociedad, y Krugman viene y dice que esto se hunde, que no hay salida. Creo que Krugman está más cerca de acertar, aunque no sea de una manera tan rotunda.
SÍ A LA HUELGA GENERAL
N.T. Seguimos con el constante run run de la reforma laboral.
C.Y. Después de la conversación de Krugman con Zapatero... toquemos madera, porque ha planteado que la salida de este país empiece por bajar los salarios, lo ha dicho. Este run run se está planteando desde la propia CEOE. El liberalismo plantea que el despido tiene que ser absolutamente libre y las relaciones contractuales entre empresa y trabajador como eran en el siglo pasado.
N.T. ¿Y qué dice de la respuesta que están dando los sindicatos a todo esto?
C.Y. Los sindicatos no lo van a permitir. El despido ya es prácticamente libre, la media que se está pagando al año es 19 días. Si se plantea como tal provocaría una reacción de dureza. Pero ahora, los sindicatos no ven la huelga general porque todavía no se ha producido una agresión a los derechos de los trabajadores.
N.T. Y desde IU, ¿cómo se ve la huelga general?
C.Y. Si vamos igual que estamos no va haber más remedio. Pero no hablamos de una huelga general clásica, no es una huelga de obreros contra patronos sino una huelga contra todo un poder económico y un Gobierno que ha estado mirando, aplaudiendo, apoyando y fomentando ese modelo de Estado.
DESINTEGRACIÓN SOCIAL
N.T. Recientemente se vio usted con Fernández Toxo. ¿Cree que se ha producido un cambio en CCOO?
C.Y. Creo que hay un cambio y un discurso distinto. Coincidimos en el análisis de la situación que vive el país. Una de las cosas que les hemos trasladado es la preocupación de que puede producirse una desintegración social y que se vuelva a los viejos discursos. Puede aflorar una movilización desde sectores más reaccionarios levantando la bandera de la xenofobia y el racismo. La calle la tiene que ocupar el discurso de la izquierda política y social y que seamos capaces de trasladar a la gente que los males de esta sociedad están viniendo por un modelo de desarrollo cuyos autores han sido el neoliberalismo encabezado por el PP y acompañado por el PSOE.
N.T. Con la que está cayendo y con el PSOE debilitado por la crisis, IU tiene más posibilidades de sacar rédito ya que se disputan el mismo espacio electoral.
C.Y. En los 13-14 millones de personas que pueda haber en el electorado de izquierdas entendida también por todos los que votan a partidos nacionalistas de izquierda�, claro que ahí nos estamos disputando el electorado. Pero en este país se hizo una apuesta clarísima por el bipartidismo cuando se decidió hace 30 años que la fuerza que tenía el PCE en la calle -que era mucha, porque realmente era un partido que había levantado la bandera más alta, más fuerte y más masiva contra la dictadura- no debía llevarse al Parlamento.
REFORMA ELECTORAL
N.T. IU propugna una reforma electoral. La propuesta del Consejo de Estado se acerca mucho a las tesis que defiende su formación.
C.Y. No conocemos el informe, solo sabemos lo que se ha publicado. Parece que apunta en la dirección de los 400 diputados (en el Congreso, en lugar de 350) y de cambiar incluso la Ley d’Hont. IU seguirá defendiendo que cada voto y cada persona tiene que tener el mismo valor a efectos de la representatividad. Si un partido político necesita 70.000 votos para tener un diputado quien tenga 70.000 votos tiene que tener un diputado.
N.T. IU tiene un millón de votos y sólo un diputado.
C.Y. Al PP y al PSOE les cuesta 7 veces menos votos el diputado que a nosotros. Pero los grandes beneficiados son los partidos nacionalistas que con menos votos que IU tienen la sartén del mango en este país.
LA IGLESIA, RETRÓGRADA
N.T. ¿Y cómo ve al PP?
C.Y. El PP no tiene alternativa de modelo de Estado, lo único que hace es más de lo mismo, con la vieja cantinela de bajar los impuestos y luego intentando tapar sus vergüenzas, que tiene muchas. Las ‘cajas B’ tenían que desaparecer de los partidos políticos. Y así tendríamos una democracia de más calidad porque ese es precisamente el problema que tiene el PP, que está intentando lavarse la cara en asuntos donde hay una trama que cada vez avanza más.
N.T. ¿Qué le ha parecido la campaña antiabortista de la Iglesia?
C.Y. Si no recibieran el dinero que reciben del Estado a lo mejor tenían menos recursos para lanzar campañas contra los derechos de las mujeres. Hemos dado a la Iglesia 61.000 millones de euros, un dinero que podrían haberlo dedicado a otras cosas. La iglesia sigue metiéndose en los mismos charcos de siempre y lo último es escuchar al Papa decir que el preservativo produce más SIDA. La jerarquía religiosa se está situando en una posición absolutamente retrógrada y que va contra el mundo. Siempre he dicho y lo mantengo que en África se está muriendo mucha gente precisamente por la intransigencia que tiene la iglesia con temas como el preservativo. Entonces son responsables directos de la muerte de mucha gente y esto hay que decirlo con todas las palabras.
N.T. El plan Bolonia está siendo otro de los asuntos más polémicos de la actualidad. Ustedes se han sumado a las protestas.
C.Y. Entendemos que se va a una educación elitista. No se han conformado con entrar en las universidades privadas para formar de manera privada en sus ideologías a los jóvenes de las clases altas de la sociedad europea y ahora han pretendido meter la mano en la pública. No se puede mercantilizar la educación y creemos que se quiere caminar por esa dirección.
COHESIONAR IU
N.T. ¿Se ve algún día subido a la tribuna del Congreso?
C.Y. Pues no lo sé, no me lo he planteado nunca, como no me planteaba estar en la coordinación, la organización lo tendrá que ver, lo tendrá que decidir cuando llegue la hora de presentar candidaturas y candidatos. El trabajo apasionante de este tiempo es que esta organización cosa heridas y se están cosiendo. Una organización dividida como la que hemos tenido era un desastre y el papel que quiero jugar es cohesionar y que intentemos confluir con distintos sectores sociales que nos permitan generar esa alternativa necesaria.
N.T. Pero, ¿aceptaría ser candidato?
C.Y. Está muy lejos. Es un planteamiento que no me he hecho ni me quiero hacer. Estos son proyectos colectivos que para mí es lo más apasionante. Los liderazgos no forman parte de mi forma de ser; estoy en contra del personalismo y el forjar líderes. Soy partidario de los colectivos, del trabajo en común, de la gente pensante. Los que se suben y se pavonean en las altas tribunas me parece que están muy lejos de la gente y yo no formo parte de esa clase política.
