sábado. 20.04.2024

"Ha llegado el punto en que Catalunya muestra síntomas de fatiga"

Es la advertencia que el presidente de la Generalitat catalana ha lanzado desde la tribuna del Parlament en el debate extraordinario sobre el Estatut. A las dos expira el plazo para que los partidos catalanes registren una resolución conjunta en el Congreso de los Diputados, iniciativa que hasta ahora ha sido imposible tras el fracaso estrepitoso de la reunión que celebraron este jueves.
NUEVATRIBUNA.ES / AGENCIAS - 16.7.2010

José Montilla ha empezado su intervención convocando a sus socios de Gobierno en el tripartito y a CiU a establecer "una hoja de ruta compartida" donde se defina la estrategia catalana para "aplicar el Estatut" y "cómo recuperar los aspectos enmendados" por el Tribunal Constitucional. El president ha invitado a estos partidos a "encontrar un terreno compartido" respecto al Estatut "en un tiempo no demasiado largo". A su juicio, existe "margen suficiente" para hallar un denominador de intereses común, ya que "tiempo habrá" de que cada partido contraste su horizonte de futuro en las elecciones catalanas. "No podemos rebajar nuestras aspiraciones a ser reconocidos como nación", ha añadido.

Pero Montilla ha dedicado también bastante espacio a hablar sobre la "desafección social y política" que ha generado la sentencia del Constitucional y que, según ha dicho, "debería preocupar seriamente a los responsables institucionales de España". Desafección, hostilidad, animadversión son los términos que más ha repetido el president de la Generalitat para describir esta situación. Montilla ha mostrado su sorpresa tanto por la "hostilidad y animadversión de una minoría estrepitosa" como por la "indiferencia de una mayoría", reacciones ambas que considera "las peores" en el marco actual. "Habrá quien crea que el problema no existe -ha dicho- que es metafísico".

El jefe del Govern ha lamentado que los catalanes estén condenados por la sentencia del Estatut a vivir "en un malestar crónico, y viviendo en el marco del Estado en una situación de inferioridad". En su opinión, la situación no es más que una manera "de asumir que el problema no es de España". En tono solemne, Montilla ha asegurado que Catalunya y su clase política están ante una "hora exigente" después de la sentencia sobre el Estatut. Y ha subrayado que el Estatut no fue una "concesión de España" y que las Cortes deberían dar una "respuesta adecuada" ante una sentencia que él no comparte pero que ha prometido "acatar". En alusión al PP, ha deplorado a aquellos que han "faltado el respeto" a los catalanes presentado un recurso contra el Estatut ante el TC.

Y, entre sus propuestas, ha anunciado que instará al Gobierno a modificar "determinadas leyes estatales" para recuperar la integridad del Estatut y las disposiciones que el Tribunal Constitucional (TC) anuló e interpretó en su sentencia.

La apelación de Montilla a "encontrar un terreno compartido" respecto al Estatut llega después del fracaso de la reunión entre el PSC, CiU, ERC e ICV-EUiA para pactar una resolución sobre el tema. Lo que pretendía ser una muestra de unidad acabó como la imagen de un fracaso. La cita duró poco más de una hora y no se llegó a poner encima de la mesa ninguna propuesta. Una vez más, el tacticismo electoral se impuso. El líder de CiU, Artur Mas, llegó a levantarse de la mesa después de reprochar a los partidos de izquierda que le reclamen unidad mientras en el Parlament está en marcha una comisión para investigar la presunta financiación irregular de Convergència. Pero es que, además, los nacionalistas catalanes se debaten entre la necesidad de contentar a su electorado más sobreranista sin molestar a sus votantes conservadores.

Por otra parte, el PSC tiene el problema de sacar adelante un texto de mínimos que pueda ser votado por sus compañeros de partido en Madrid. Si no fuera así y el PSOE no pudiera asumir lo que se apruebe en Barcelona, los 25 diputados del PSC tendrían que votar de forma distinta a la del resto de su grupo parlamentario.

Esta mañana, y de forma paralela al pleno monográfico, se han reanudado los contactos en el Parlament. El plazo para llegar a un acuerdo expira a las dos de la tarde, porque la intención es que si se acuerda un texto pueda presentarse en el Congreso y esa hora es el límite fijado para registrar en la Cámara baja las propuestas de resolución del debate sobre el estado de la nación. En caso de que no se pacte una resolución conjunta, los partidos tienen previsto presentar, cada uno por su cuenta, sus propias propuestas. El PSC, al no disponer de grupo propio, registraría la suya a través del PSOE.

"Ha llegado el punto en que Catalunya muestra síntomas de fatiga"