sábado. 27.04.2024

'¿A quién prefiere: a Rubalcaba, a Lissavetzky o a Gabilondo?'

Ferraz quiere hilar fino en las candidaturas por Madrid, paso previo a las generales de 2012. Tomás Gómez sigue pendiente de que le designen, algo que no se producirá antes de que finalice la presidencia española de la UE, el próximo mes de junio. Pero la prueba de que no las tiene todas consigo son las encuestas que realiza el PSOE midiéndole con otros pesos pesados del partido.
NUEVATRIBUNA.ES 05.03.2010

Madrid es una de las piedras en el zapato de Zapatero. Aunque no la única. A dos años vista de las próximas elecciones generales la maquinaria electoral del PSOE ha empezado a engrasarse en previsión del tiempo que se avecina. En Madrid, el temporal no amaina y políticamente hablando también caen chuzos de punta para el electorado de izquierdas. Pero Madrid es asunto de Estado para el PSOE y eso le da un plus a la hora de repartir esfuerzos. No sólo resulta una obligación moral desalojar al PP del poder por aquello de la alternancia democrática, sino que la región puede ser determinante a la hora de revalidar a Zapatero en La Moncloa. Cualquier apoyo es bienvenido cuando además se anuncian nubarrones en históricos feudos como Castilla-La Mancha.

En las generales de 2008, el PSOE obtuvo un apoyo en Madrid del 39,45%. Un año antes, en las autonómicas se saldó con el 33,46%. Y en las Europeas de 2009, el 35,43%. Para Ferraz el techo ideal se sitúa en el 40% y de ahí el nerviosismo ante unos sondeos internos que dejan al partido muy por debajo de ese umbral; es más, por debajo del 30%, lo que supondría la debacle electoral del socialismo madrileño y una de las trincheras perdidas para mantener el poder en 2012, con un PP crecido por la crisis económica y el paro.

Las cosas por tanto no están fáciles y en Madrid los sondeos quinielísticos e internos del PSOE indagan sobre los candidatos ideales, aquellos capaces de derrocar a Esperanza Aguirre y, ¿por qué no?, también al imbatible Alberto Ruiz-Gallardón.

Pues bien, según ha podido saber nuevatribuna.es, Ferraz ha encargado un sondeo en Madrid donde se pregunta al entrevistado qué valoración le merece Alfredo Pérez Rubalcaba, Jaime Lissavetzky y Ángel Gabilondo. Los tres han sonado como posibles candidatos pero también la actual ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez; y todo ello con la virtual candidatura a la presidencia de la Comunidad de Madrid de Tomás Gómez, secretario general del PSM y, en su momento, firme y decidida apuesta de Zapatero.

Pero Gómez “no cuaja, no despunta, no termina de… despegar”, manifiestan algunos, mientras otros lanzan opiniones más gruesas como que “se le ha acabado el tiempo”. De ello, alguna valoración sacará Ferraz que ha incluido en el sondeo al ex alcalde de Parla y al portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, David Lucas, para conocer la valoración que hacen los madrileños de su gestión política.

El tema Rubalcaba es paradigmático del revulsivo que necesita el PSOE en Madrid. “Si hay alguien capaz de ganar al PP es él”. La frase se repite por los círculos socialistas. De momento su nombre se ha barajado para la alcaldía de la capital si bien él lo ha desmentido en más de una ocasión. No obstante, Rubalcaba sigue siendo uno de los más firmes apoyos de Zapatero y fiel aliado. Los que le conocen bien dicen que es hombre de partido y que siempre “estará a disposición del partido”. También es conocida entre sus más cercanos la persistencia del presidente del Gobierno para lograr aquello que desea, algo que tampoco se le escapa a Rubalcaba.

Sorprende el hecho de que Rubalcaba haya sido incluido en el citado sondeo pese a que ha desmentido públicamente que vaya a ser candidato en Madrid, a no ser que se le quiera tomar como referencia en el listón de notoriedad con el resto de nombres.

El secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky y el ministro de Educación, Ángel Gabilondo, se perfilan también como pesos pesados capaces de salvar al PSOE en Madrid. Y de ambos se dice que estarían dispuestos a dar la batalla desde la oposición en caso de derrota, lo que no es poco viendo los antecedentes.

Por otro lado, la posibilidad de optar por un proceso de primarias sigue sobre la mesa. Tomás Gómez ya ha manifestado su disposición a participar en unas elecciones internas para elegir candidato a la Comunidad, siempre y cuando haya un candidato alternativo. Y no es difícil que pueda haberlo.

Pero la cuestión radica más en la decisión que tome la dirección federal del PSOE, con el poder de determinar si se celebran o no primarias y, lo que es más importante, con la última palabra sobre quiénes serán los aspirantes a ocupar la Puerta del Sol y la Plaza de Cibeles.

La situación, como verán, está muy abierta.

'¿A quién prefiere: a Rubalcaba, a Lissavetzky o a Gabilondo?'