Comisiones Obreras considera imprescindible impulsar la negociación colectiva y mejorar la protección social de la población; garantizar el poder adquisitivo de las pensiones; incrementar los salarios más bajos mediante una mejorar sostenida del SMI; promover un Plan de Choque por el empleo e implantar una Renta Mínima Garantizada para personas sin recursos. Medidas que pueden financiarse con una reforma fiscal progresista y unos Presupuestos que apuesten por la inversión pública y el gasto en protección social.
Para el sindicato, los datos de la Encuesta de Población Activa del primer trimestre de 2017 son malos porque:
- Se sigue encogiendo nuestro mercado de trabajo. Desciende la población activa (52.600 personas en el trimestre, 127.700 en el último año) al tiempo que aumenta la población inactiva. El paro no aumenta más en el trimestre porque miles de personas se han retirado del mercado de trabajo.
- Disminuye el empleo: En el primer trimestre de 2017 cae la ocupación en 69.800 personas (-0,4% trimestral) hasta un total de 18.438.300 ocupados.
- Aumenta el paro: El paro sube en 17.200 personas en el primer trimestre (+0,4%) y se sitúa en 4.255.000 personas y la tasa de paro repunta hasta el 18,75%.
- El número de hogares donde todos sus miembros activos están en paro aumenta este trimestre en 6.900, hasta un total de 1.394.700.
- Sube la jornada parcial, involuntaria en la mayoría de los casos: en el primer trimestre se ha destruido empleo a tiempo completo (-111.100) y todo el que se ha creado ha sido a tiempo parcial (+41.300) elevando hasta el 15,6% de los ocupados el peso de la jornada parcial (2.874.300).
- Baja la temporalidad: Este dato, en principio positivo, se explica por la destrucción de empleo temporal (-122.600) unido al aumento de los asalariados indefinidos (78.000). Aun así, la tasa de temporalidad se sitúa en el 25,7%, por encima del 25% que registraba hace un año, debido a que en los últimos doce meses el empleo temporal (210.100, +5,6%) ha crecido más que el indefinido (195.600, +1,7%).
- La evolución del mercado de trabajo sigue sin consolidar un cambio del modelo productivo hacia actividades de valor añadido, aunque se está diversificando la aportación de las diferentes ramas a la creación de empleo. Comercio (+88.000) encabeza el aumento interanual del empleo, seguido por la industria manufacturera (+84.000), la construcción (+60.000), los servicios sociales (+46.000) y la agricultura y ganadería (+44.000).
El sindicato señala que el aumento del empleo sigue concentrado de manera principal, aunque no exclusiva, en sectores de bajo valor añadido (hostelería, comercio, construcción) que generan empleos inestables y donde se pagan salarios bajos. No se observa un cambio en el modelo productivo de calado, si bien es cierto que la industria y los sectores de alto contenido tecnológico también están creando empleo, pero su impacto total sigue siendo reducido por su escasa dimensión.
El empleo que se crea es precario y temporal. Esto, sumado a la devaluación salarial fomentada por la reforma laboral, hace que encontrar un trabajo sea cada vez menos una garantía para poder llevar una vida independiente o salir de la pobreza, como evidencia la Encuesta de Condiciones de Vida de 2016. Es necesario mejorar el poder de compra de los salarios para impulsar la demanda interna, un aumento vigoroso del empleo y una rebaja rápida del paro.
Para ello, CCOO considera imprescindible impulsar la negociación colectiva y mejorar la protección social de la población; garantizar el poder adquisitivo de las pensiones; incrementar los salarios más bajos mediante una mejorar sostenida del SMI; promover un Plan de Choque por el empleo e implantar una Renta Mínima Garantizada para personas sin recursos. Estas medidas pueden ser financiadas mediante una reforma fiscal progresista y unos Presupuestos que apuesten por la inversión pública y el gasto en protección social.
