viernes. 19.04.2024
s1

Hay un gran desconocimiento de los pueblos que existían en la Europa oriental y en las llanuras siberianas de Asia. Me propongo que tengan una idea más específica de estos pueblos, que nos enseñaron en historia que eran los pueblos bárbaros sin especificar nada más.

Escita era el nombre dado en la antigüedad a los miembros de un grupo de pueblos de origen iranio, caracterizados por una cultura basada en el pastoreo nómada y la cría de caballos de monta.

El etnómino [1] escita también ha sido usado para referirse a otros pueblos de costumbres similares o que ocuparon las regiones de Rusia, Ucrania y Asia central, conocidas durante largo tiempo como Escitia. Se considera escita a los nómadas euroasiáticos probablemente la mayoría hablantes de idiomas iranios orientales. Sería el antecesor del moderno idioma osetio.


La sexualidad en el mundo azteca


Fueron mencionados por los pueblos más culturizados que quedaban al sur de la zona donde habitaban. Eran amplias zonas de la estepa euroasiática occidental y central, desde alrededor del siglo IX a. C. hasta el siglo IV, ya de nuestra era.

Los escitas clásicos conocidos por los antiguos historiadores eran principalmente de origen iranio y se encontraban en el norte del mar Negro y la región del Cáucaso septentrional.

f1Mapa geográfico de la influencia irania en el primer siglo a. C | Área de dominación por los pueblos escitas. Imperio parto

Las relaciones entre estos pueblos, que vivían en zonas tan amplias, y muy separadas, sigue sin estar clara, y el término se usa tanto en sentido amplio como estricto. El término escita se usa en un contexto arqueológico para hallazgos que se cree que muestran atributos de una cultura amplia “siberiano-escita”, sin implicar usualmente una connotación étnica o lingüística.

f2El término escítico puede usarse también de forma parecida, “para describir una fase especial que siguió a la amplia difusión del nomadismo a caballo, caracterizado por la presencia de armas especiales, arreos de caballo, y arte animalístico en forma de placas de metal”.

Los territorios más al oeste durante la Edad del Hierro fueron conocidos en las fuentes clásicas griegas como Escitia. La palabra escita en un sentido restringido, queda restringida a estas zonas, donde se hablaban lenguas excito-sármatas. Este uso de diferentes definiciones de escita lleva a cierta confusión.

Los escitas estuvieron entre los primeros pueblos en dominar la guerra a caballo. Mantenían manadas de caballos, ganado vacuno y ovejas, vivían en carretas cubiertas y luchaban con arcos y flechas a caballo.

Desarrollaron una rica cultura caracterizada por tumbas opulentas, fina metalistería y un estilo artístico brillante. Se expandieron hacia el oeste y conquistaron a los cimerios de la estepa póntica.

Los escitas dominaron toda la estepa en su época de mayor poder, extendiéndose desde la cordillera de los Cárpatos en el oeste, al centro de China y el sur de Siberia en el este, creando lo que se ha llamado el primer imperio nómada de Asia central, aunque hay poco que pueda llamarse estado organizado.

Los escitas occidentales eran gobernados por una clase rica conocida como los Escitas Reales o Regios. Los escitas establecieron y controlaron la ruta de la seda, contribuyendo quizás al florecimiento contemporáneo de aquellas civilizaciones.


Los mongoles de Mongolia


Los trabajadores del metal sedentarios confeccionaban objetos decorativos para los escitas. Estos objetos sobreviven principalmente en metal, formando un arte muy distintivo.

Los escitas cruzaron el Cáucaso en el siglo VII a.C. y frecuentemente saquearon el Oriente Medio junto con los cimerios, jugando un papel vital en los desarrollos políticos de la región. La arqueología ha descubierto testimonios de la cultura escita en los montículos funerarios de Ucrania y el sur de Rusia.

Se sabe que tuvieron sus antecedentes desde el año 2000 a. C., pero su primera aparición en la historia es una alianza con los asirios en el siglo VII a. C. Siglos después colaboraron con los medos para desmembrar al imperio asirio.

f3

Los escitas dominaron brevemente a los medos de la meseta iraní occidental, alrededor de los años 650 y 630 a. C, extendiendo su poder a las fronteras de Egipto. Después de perder el control sobre Media, los escitas continuaron interviniendo en los asuntos de Oriente Medio, con un papel destacado en la destrucción del Imperio asirio y en el saqueo de Nínive en el año 612 a. C.

Los escitas se implicaron en frecuentes conflictos con el imperio aqueménida. Los escitas occidentales sufrieron una gran derrota contra Macedonia en el siglo IV a. C. Fueron sometidos por los sármatas en la antigüedad tardía, un pueblo culturalmente afín que procedía del Asia central que terminó sustituyéndolos como amos de las estepas.

Los escitas orientales de la estepa euroasiática fueron atacados en el siglo II a. C por los yuezhi, wusum y xiongnu, impulsando a muchos de ellos a emigrar hacia el sur de Asia, donde pasaron a ser conocidos como indo-escitas.


Botsuana, el reino de los elefantes


Alrededor del siglo III de nuestra era, después de la desaparición de la dinastía Han y el Xiongnu, los escitas orientales cruzaron las montañas del Pamir y se asentaron en la cuenca del Tarim occidental.

La mayor parte, de lo que se conoce sobre los escitas, procede de fuentes extranjeras, concretamente griegas y latinas. Las principales de ellas son el libro IV de la “Historia de Herodoto” del año 440 a. C., “la Geografía d Estrabón” y el poema de Ovidio, “Epístola desde el Ponto”, que describe principalmente la Escitia Menor.

SUS ORÍGENES

Los escitas aparecen mencionados por primera vez en la documentación histórica en el siglo VIII a.C. Heródoto narra tres versiones contradictorias respecto a los orígenes de los escitas, y señala cuál es la que él, personalmente, considera más creíble.

f4

Los escitas eran unos nómadas que habitaban en Asia y se vieron en dificultades, en el curso de una guerra, por la acción de los maságetas, así que cruzaron el río Araxes y se dirigieron hacia Cimería [2] y lo ocuparon y se quedaron en él.

Los relatos de Heródoto sobre los orígenes escitas han sido desdeñados recientemente; aunque sus relatos de las actividades de saqueo contemporáneas a sus escritos han sido considerados más fiables.

El Nuevo Testamento incluye una sola referencia a los escitas en la Epístola a los colosenses 3:11.

La interpretación moderna de la evidencia histórica, arqueológica y antropológica ha propuesto dos amplias hipótesis:

  1. La primera, defendida por los investigadores soviéticos, luego rusos, que más o menos siguen el tercer relato de Heródoto, sosteniendo que los escitas eran un grupo iranio oriental que llegaron desde Asia interior, esto es, de la zona de Turkestán y Siberia occidental.
  2. La segunda, defendida por Ghirshman y otros, dice que el complejo cultural escita emergió de grupos locales de la cultura de la tumba de madera en la costa del mar Negro, aunque esta se asocia también a los cimerios.

Según Dolujánov, la evidencia arqueológica apoyaría esta propuesta, pues ha encontrado que los cráneos escitas son similares a los hallazgos precedentes de la cultura de tumba de madera, y se diferencia de los Sacae de Asia central.

Para otros, el término escita era muy ampliamente usado tanto por los estudiosos antiguos como los modernos para describir a toda una serie de pueblos que por otro lado no estaban relacionados entre sí y sólo compartían ciertas similitudes en la forma de vida nómada, prácticas culturales y el idioma.

f5

El I milenio a. C. dio lugar a un período de conectividad económica y cultural sin precedentes entre comunidades diferentes y de amplio espectro.

Una forma de vida móvil habría facilitado el contacto entre grupos étnicos dispares a lo largo de la extensa estepa euroasiática desde el río Danubio hasta Manchuria llevando a muchos parecidos culturales. Desde el punto de vista de los antiguos observadores, griegos y persas, todos se agrupaban juntos bajo la categoría étnica escitas.

Heródoto califica a los cimerios como una tribu diferente autóctona, expulsada por los escitas de la costa del mar Negro septentrional. Éste afirma que los escitas estaban formados por los autacas, catíaros, traspis y parálatas, cuatro tribus que, sin embargo, no cita ningún otro autor antiguo.

El rey de los persas, Dario I, en el año 514 a. C., intentó conquistar este reino, al mando de 700.000 hombres cruzando el ríos Danubio hacia las estepas al norte del mar Negro, sin lograr derrotar a los escitas. Estos aterrorizaron a los persas mediante lluvias de flechas que desorganizaron sus filas, y atacándolos ferozmente a caballo.

Heródoto dice que los escitas nómadas frustraron al ejército persa permitiendo marchar por todo el país sin producirse una sola batalla. Según Heródoto, Darío de esta manera llegó hasta el río Volga.

f6

Los escitas prosperaron en los siglos V a III a. C. Cuando Herodoto escribió sus Historias en el siglo V a. C., los griegos distinguían:

  1. Escitia Menor, en lo que hoy es Rumania y Bulgaria.
  2. La Gran Escitia se extendía hacia desde el río Danubio, cruzando las estepas de lo que hoy es el Este de Ucrania a la cuenca baja del rio Don.

El río Don había servido como una gran ruta comercial desde entonces. Los escitas aparentemente obtenían su riqueza del control sobre el comercio de esclavos desde el norte hacia Grecia a través de los puertos coloniales griegos del mar Negro. También cultivaron grano, y embarcaban trigo, rebaños y queso hacia Grecia.


Madagascar, gente y paisaje


Durante el siglo IV a. C., los escitas llegaron a su mayor desarrollo político, cultural y económico. Muchos componentes de la comunidad escita se convirtieron en agricultores sedentarios, en la zona norte del mar de Azov, llegando inclusive a la zona de Altái. Allí formaron su reino con capital en la ciudad que los griegos llamaron Panticapee y que hoy es la ciudad de Kámenskoe Gorodishche.

Estrabón narra que el rey Ateas unificó bajo su poder a las tribus escitas que vivían entre el Palus Maeotis y el río Danubio. Ateas habría nacido hacia el año 430 a. C. Empezó una serie de campañas que lo llevaron a unificar a muchas de las tribus escitas extendiendo su poder desde el río Don hasta la región de Tracia.

Su expansión hacía los Balcanes lo llevó a entrar en conflicto con Filipo II de Macedonia a mediados del siglo IV a. C. Tras fracasar varios intentos de alianza entre ambos. Filipo II emprendió la acción militar contra los escitas en el año 339 a. C. Ateas murió a la edad de noventa años durante una batalla contra Filipo de Macedonia en las llanuras de la actual Dobruja, en el año 339 a. C., y su imperio se desintegró.

f7

Los celtas parece ser que desplazaron a los escitas en los Balcanes posteriormente. Mientras tanto, en el sur de Rusia, una tribu cercana, los sármatas, gradualmente los fueron superando. Alejandro Magno entró en conflicto con los escitas en la batalla de Jaxartes en el año 329 a.C.

Un ejército escita buscaba vengarse de los macedonios por la muerte de Ateas, de esta forma empujaron las fronteras de su imperio hacia el norte y el este. Sin embargo, el ejército escita fue derrotado por Alejandro en la batalla de Jaxartes.

Alejandro no pretendía someter a los nómadas, quería ir al sur, donde una crisis mucho más seria exigía su atención. Podía hacerlo ahora sin perder su dignidad; y para que el resultado fuera aceptable para los Saccae, liberó a los prisioneros escitas de la guerra sin rescate para conseguir un acuerdo de paz.

Esta política tuvo éxito, y los escitas ya no amenazaron al imperio de Alejandro. Para la época del relato de Estrabón, los escitas de Crimea habían creado un nuevo reino que se extendía desde el bajo Dniéper hasta Crimea.

Los eruditos modernos usualmente usan el término saka [3] para referirse a las tribus de habla irania que habitaban la estepa oriental y la cuenca del Tarim. Las inscripciones persas antiguas también usaban saka para referirse a los escitas occidentales al norte del mar Negro “los Saka más allá del mar”.

f8Detalle del pectoral de Tolstaya, con un joven que acaba de ordeñar una oveja

La antigua ciudad de Persépolis presenta unas inscripciones en persa antiguo de la época aqueménida que datan del reinado de Dario I entre los años 522–486 a. C., y dice que los sakas habían vivido justo más allá de las fronteras de Sogdiana.

El término “Saka más allá de Sugda, Sogdiana” se empleó por Darío para describir al pueblo que formó los límites de su imperio en el extremo opuesto a Kush [4] (los etíopes) en el oeste, esto es, en el borde oriental de su imperio. Una inscripción que data del reinado de Jerjes I entre los años 486–465 a. C. los tiene emparejados con el pueblo Dahae de Asia central.

Dos tribus saka aparecen nombradas en la inscripción de Behistún:

  1. Los Saka con gorros/sombreros apuntados.
  2. Los sakas bebedores de haoma [5] que deben situarse al este del mar Caspio.

Ciro el Grande del imperio persa aqueménida combatió contra los saka, cuyas mujeres se decía que luchaban junto con sus hombres. Según Heródoto, Ciro el Grande también se enfrentó a los masagetas [6], un pueblo que se creía que estaba relacionado con los saka, mientras hacía campaña al este del mar Caspio y resultó muerto en la batalla en el año 530 a. C.

f9

Los territorios de los saka fueron absorbidos dentro del imperio aqueménida como parte de Corasmía que incluía gran parte del río Amu Daria y el río Sir Daria y los sakas entonces proporcionaron al ejército persa con un gran número de arqueros a caballo en las guerras aqueménidas.

El Libro Han chino habla de los valles del río Ili y el Chu que se llamaron “la tierra de los sai”, esto es, los saka. La fecha exacta de su llegada en esta región de Asia central no queda claro, quizá fue justo antes del reinado de Dario I. Alrededor de treinta tumbas saka en forma de kurgans [7] se han encontrado también en la zona del Tian Shan datadas entre los años 550–250 a. C.

La presencia saka también se han encontrado en la región de la cuenca del río Tarim, ya en el siglo VII a. C. Algunos estudiosos modernos creyeron que el saqueo de Haojing, que era la capital de la dinastía Zhou Occidental, en el año 770 a. C., pudo estar relacionada con un ataque escita desde los montes Altai antes de su expansión hacia el oeste.


Mauritania, desierto y miseria


Sin embargo, como consecuencia de la lucha por la supremacía entre los xiongnu y otros grupos, los saka fueron expulsados hacia Bactriana, y más tarde hacia el sur al noroeste de la India y hacia el este a las ciudades-estado oasis de la cuenca del río Tarim occidental, región de Xinjiang en la China delo noroeste.

f10Ubicar en un mapa a los escitas es complicado, pero este sería una aproximación a la realidad. Se observan incluso algunas de sus rutas de saqueos en el creciente fértil, o Egipto

Los yuezhi fueron responsables de atacar y castigar a los sai (los saka) empujándolos al suroeste hacia Sogdiana [8], donde a mediados del siglo II a. C. los últimos cruzaron el río Sir Daria hacia el reino grecobactriano helenístico, pero también al valle de Fergana donde se asentaron en Dayuan.

El antiguo geógrafo grecorromano Estrabón sostuvo que las cuatro tribus de los asii, que derrotaron a los bactrianos en el relato griego y romano, procedían de tierras al norte del Sir Daria donde se encuentran los valles del Ili y el Chu.

Los saka entonces emigraron hacia la zona noroeste del subcontinente indio donde pasaron a ser conocidos como indo-escitas, así como hacia el este a los asentamientos de la cuenca del río Tarim en lo que hoy en día es China, como Jotán y Tumshuke.

f11Pectoral de Tolstaya Maguila

Jotán y los reinos de la cuenca del Tarim

Los saka migraron desde Bactriana donde con el tiempo asentaron en algunos de las ciudades estados oasis de la cuenca del Tarim, cayeron bajo la influencia de la dinastía Han china entre los años202 a. C. – 220.

Indo-escitas

Después de que los saka migrasen a la zona noroeste del subcontinente indio, la región pasó a ser conocida como “la tierra de los saka” que serían el actual Pakistán y Afganistán.

Esto queda atestiguado en una inscripción karoski contemporánea sobre el capitel del león Mathura perteneciendo al reino saka de los indoescitas entre los años 200 a. C. al 400 d. C. en el norte de la India, en líneas generales la misma época en que los chinos documentan que los saka habían invadido y se habían asentado en el país de Jibin.

Antigüedad tardía

La noción de una etnicidad sármata se hizo más vaga en la antigüedad tardía y los extranjeros podrían llamar así a cualquier pueblo que habitara en la estepa póntica como escitas, sin tomar en consideración su lengua.

Prisco que era un emisario bizantino ante Atila, repetidamente se refirió a los seguidores de este último como escitas. Los godos habían desplazado a los sármatas en el siglo II de la mayor parte de las zonas fronterizas con el imperio romano.

A principios de la época medieval, los eslavos marginalizaron a los dialectos iranios orientales en Europa oriental a medida en que fueron asimilando y absorbiendo a los grupos étnicos iranios en la región. La migración túrquica asimiló lingüísticamente a los saka en Asia central.

f12Peine de Soloja

Los escitas clásicos pueden haber desaparecido en gran medida para el siglo I a. C. Los romanos orientales siguieron hablando de los escitas para designar a las confederaciones y tribus germánicas o bárbaros nómadas euroasiáticas. Los bizantinos distinguieron a los escitas de los godos y lo hunos que también seguían a Atila.

Los sármatas que incluían a los alanos y también los osetios contaban como escitas en el sentido más amplio de la palabra y están considerados en su mayor parte de ascendencia irania.

LA ARQUEOLOGÍA ESCITA

Los restos arqueológicos de los escitas incluyen tumbas kurgán, que van desde ejemplares sencillos a elaborados kurgán reales conteniendo la tríada escita que consiste en armas, arreos de caballo y arte animalístico salvaje al estilo escita, oro, seda, y sacrificios animales, en lugares donde se sospecha que también se produjeron sacrificios humanos.

Las técnicas de momificación y el permafrost han ayudado a la conservación relativa de algunos restos. La arqueología escita también examina los restos de las fortificaciones y ciudades escitas del norte del Ponto.

f13Zona arqueológica de los kurganes

Los espectaculares hallazgos escitas en las tumbas de Arzhan, y otros en Tuva han sido cifrados de alrededor del año 900 a. C. en adelante. Una tumba en el bajo Volga dio una fecha similar, y una de las tumbas de Steblev del extremo de Europa del este de la región escita fue datada de finales del siglo VIII a. C.

Los arqueólogos pueden distinguir tres períodos de restos arqueológicos escitas:

  1. 1er período – época pre-escita y escita inicial: desde el siglo IX hasta mediados del siglo VII a. C.
  2. 2º período – época escita temprana: siglos VII y VI a. C.
  3. 3er período – época escita clásica: siglos V y IV a. C.

Desde el siglo VIII al II a. C., la arqueología documenta una separación entre dos zonas de asentamientos bien distintas:

  1. La antigua en la zona de Sayan-Altái en Asia central.
  2. La más joven en la zona póntica septentrional de Europa oriental.

Un esquema alternativo, relacionando la definición estricta en el extremo occidental de la estepa y adentrándose en Europa, es:

  1. Escita temprano, desde mediados del siglo VIII a finales del siglo VII a. C. hasta alrededor del año 500 a. C.
  2. Escita clásico o escita medio, desde alrededor del 500 a. C. a alrededor del 300 a. C.
  3. Escita tardío, desde alrededor del año 200 a. C. hasta principios del siglo II, ya de nuestra era, en Crimea y el bajo Dniéper, época en la que la población estaba asentada.

Los Kurganes

Estos grandes enterramientos en montículo, algunos de ellos alcanzan hasta veinte metros de alto, proporcionan los restos arqueológicos más valiosos asociados con los escitas.

Aparecen a lo largo del cinturón de la estepa euroasiática, desde Mongolia hasta los Balcanes, a través de las estepas de Ucrania y el sur de Rusia, extendiéndose en grandes cadenas durante muchos kilómetros a lo largo de cresterías y cuencas fluviales.

f14Carcaj de un guerrero hallado en una necrópolis ucraniana

Los arqueólogos han aprendido mucho de la vida y el arte escitas. Algunas tumbas escitas revelan trazas de artesanía griega, china e india, sugiriendo un proceso de helenización, sinización [9], y otras influencias locales entre los escitas.

El término ucraniano para semejantes montículos de enterramiento, kurhán así como el término ruso kurgán, derivan de la palabra túrquica “castillo”.

Algunas culturas escito-sármatas puede que dieran lugar al surgimiento de las historias griegas sobre las amazonas. Se han encontrado tumbas con mujeres armadas en el sur de Ucrania y en Rusia.

El arqueólogo David Anthony dice que, “alrededor del veinte por ciento de las tumbas de guerreros escito-sármatas en el bajo Don y el bajo Volga contenían mujeres vestidas para la batalla como si fueran hombres, un estilo que puede haber inspirado los cuentos griegos sobre las amazonas”.

Las excavaciones en el kurgán Sengileevskoe-2 se encontraron boles de oro con capas que indicaban una fuerte bebida de opio usada mientras que el cannabis ardía cerca. Los boles de oro representan escenas mostrando ropas y armas.

Cultura Pazyryk

Los enterramientos escitas orientales documentados por los arqueólogos modernos incluyen los kurganes en Pazvryk de la República de Altái, al sur de Novosibirsk en los montes Altái en la Siberia meridional cerca de Mongolia.

f15

Los arqueólogos han deducido la cultura Pazvryk a partir de estos hallazgos de cinco grandes enterramientos y otros varios de menor tamaño entre los años 1925 y 1949. Uno de estos grandes enterramientos abierto, en el año 1947, por el arqueólogo ruso Sergei Rudenko. Los montículos de enterramiento ocultaban cámaras de grandes troncos cubiertos con amplio túmulos de peñascos y piedras.

La cultura Pazyryk floreció entre los siglos VII y III a. C. en la zona asociada con los Sacae. Normalmente, las tumbas Pazyryk contienen sólo utensilios cotidianos, pero en una, entre otros tesoros, los arqueólogos encontraron la famosa alfombra Pazvryk, la alfombra oriental hecha en lana más antigua que se conserva.

Otro hallazgo sorprendente, un carro funerario de cuatro ruedas y tres metros de alto, sobrevivió bien conservado desde el siglo V o IV a. C.

Las Excavaciones en Bilsk

Las excavaciones realizadas en Bilsk cerca de Poltava en Ucrania han sacado a la luz una gran ciudad, con una superficie mayor que la de cualquier otra ciudad de la época. Se ha identificado por un equipo de arqueólogos liderados por Boris Shamko como el yacimiento de Gelono era la supuesta capital de Escitia.

Las impresionantes murallas de la ciudad y vasta superficie de cuarenta kilómetros cuadrados, su ubicación en el borde septentrional de la estepa ucraniana, habría permitido un control estratégico de la ruta comercial norte-sur. A juzgar por los hallazgos, que datan de los siglos V y IV a. C., y abundaban los talleres de artesanía y de cerámica griega.

El Tesoro de Tillia Tepe

Se encontró en Tillia Tepe la denominada “colina dorada” en el norte de Afganistán lo que era la antigua Bactriana cerca de Sibargan, en el año 1968, un yacimiento formado por las tumbas de cinco mujeres y un hombre con unas joyas extremadamente ricas, datadas de alrededor del siglo I a. C., relacionadas con la de las tribus escitas que habitualmente vivían un poco más al norte.

f16

Las tumbas han proporcionado varios miles de piezas de fina joyería, usualmente realizada a partir de una combinación de oro, turquesa y lapislázuli.

Las influencias artísticas y culturales helenísticas aparecen en muchas de las formas y representaciones humanas, desde amorcillos a anillos con la representación de la diosa Atenea y su nombre inscrito en griego, atribuible a la existencia del imperio seléucida y del reino grecobactriano en la misma región hasta alrededor del año 140 a. C.

La existencia continuada del reino indogriego en el noroeste del subcontinente indio hasta el comienzo de nuestra época. Esto atestigua la riqueza de las influencias culturales en la zona de Bactriana en aquella época.

Divisiones tribales en el mundo escita

Los escitas vivieron en tribus confederadas, una forma política de asociación voluntaria que regulaba los pastos y organizaban una defensa común contra los vecinos invasores de tribus de pastores, principalmente, ganaderos de caballos.

La productividad de los animales domesticados superaba a la de las sociedades agrícolas. La economía pastoral también necesitaba productos agrícolas suplementarios, y las confederaciones nómadas estables desarrollaron alianzas simbióticas o forzadas con pueblos sedentarios a cambio de productos animales y protección militar.

f17

Heródoto refiere que las tres principales tribus de los escitas descendían de tres hermanos, Lipoxais, Arpoxais, y Colaxais.

  1. Lipoxais descienden los escitas que, en razón de la tribu que forman, reciben el nombre de aucatas.
  2. Arpoxais, los que reciben el nombre de catíaros y traspis.
  3. Colaxis reciben el nombre de parálatas.

Ahora bien, todos ellos son denominados genéricamente escólotos, en virtud del nombre de su monarca, y han sido los griegos quienes les han impuesto el nombre de escitas. Herodoto también menciona una tribu o clan real, una élite que en gran medida dominó a los otros escitas.

Al otro lado del Gerro se encuentran ya las regiones que reciben el nombre de reales y los escitas más valientes y numerosos, que consideran a los demás escitas como súbditos suyos.

Los ricos enterramientos de los reyes escitas en túmulos evidencia la existencia de una élite poderosa. Mientras un clan de élite es citado en algunas fuentes clásicas como los Dahae regios que son generalmente considerados como un pueblo indo-europeo extinto, que ocupó lo que es hoy Turkmenistán, y fueron diferentes de los escitas.

Una de las historias que cuenta Heródoto sobre el origen de los escitas es de carácter mítico, sobre determinados objetos mágicos caídos del cielo.

f18

Durante el reinado de los tres hermanos se precipitaron de lo alto del cielo unos objetos de oro que cayeron en Escitia. El hermano mayor, que fue el primero en verlos, se acercó con el propósito de apoderarse de ellos, al aproximarse, el oro se puso al rojo.

Cuando el mayor se alejó, se dirigió a ellos el segundo, pero el oro volvió a hacer lo mismo. El oro, al ponerse al rojo, rechazó a los dos primeros; sin embargo, cuando en tercer lugar se aproximó el pequeño de los tres hermanos se extinguió la incandescencia y el muchacho se lo llevó a su casa. Ante estos prodigios, los hermanos mayores convinieron en entregarle al menor la totalidad del reino.

Georges Dumézil interpretó los regalos divinos como símbolos de ocupaciones sociales, ilustrando su triple-funcionalidad en las sociedades tempranas indoeuropas:

  1. El arado y el yugo simbolizan a los granjeros.
  2.  La sagaris a los guerreros.
  3. El bol a los sacerdotes.

Según Dumézil: “los infructuosos intentos de Arpoxais y Lipoxais, en contraste con el éxito de Colaxais, puede explicar por qué las capas más altas no era la de los granjeros o los magos, sino más bien la de los guerreros”.


[1] Un etnónimo es el nombre de un grupo étnico. Se habla de un exónimo cuando el nombre ha sido atribuido por otro grupo, o de un autónimo si ha sido autoasignado.
[2] Es un país descrito por Homero como la región de la noche eterna situada en los confines del Océano y que oficia de antesala del Hades. En la recopilación de fragmentos de Hecateo se describe en el Océano, antes de comenzar a describirse a la Península Ibérica. De hecho, para la mayoría de los expertos clasicistas que han reconstruido mapas del mundo de Homero, se hallaba en el Océano, frente a las costas de Europa.
[3] Fueron una tribu o grupo de tribus escitas o bien un grupo de tribus de origen iranio. Eran ganaderos trashumantes y eventualmente guerreros nómadas de idioma indoeuropeo que vagaban por las estepas de los actuales Kazajistán, Uzbekistán, Tayikistán, Sinkiang, casi toda la llanura del Turán, Ucrania y zonas del extremo sur de Rusia.
[4] Forma una parte importante de la historia de Nubia en la época de las antiguas civilizaciones de Egipto, Roma y Grecia.
[5] Es el nombre de una planta, la bebida hecha con ella o una divinidad, en la doctrina zoroástrica y en la posterior cultura y mitología persa. En persa medio es hōm, que sigue siendo el nombre en persa moderno, pastún y otras lenguas vivas iranias.
[6] Fue una confederación de pueblos nómades iranios que vivió en las estepas de Asia Central entre el mar de Aral y el mar Caspio durante la antigüedad.
[7] Es un montículo de tierra y piedra levantado artificialmente sobre una tumba o tumbas. La palabra Kurgán es de origen turco que significa, en su origen, "fortificación" y luego, por su uso en la arqueología rusa, pasó al idioma ruso, túmulo.
[8] Los sogdianos fueron un pueblo de lengua irania que vivieron en una zona que ocupa parte de los actuales Tayikistán y Uzbekistán y que englobaba las ciudades de Samarcanda y Bujará.
[9] Se refiere al fenómeno, en el cual, las culturas vecinas de China se han visto influidas por la cultura y lenguaje de este país sin haberse asimilado.

Los Escitas, un pueblo sorprendente (I parte)