jueves. 25.04.2024
Foto de archivo

Un ataque de cuernos convertido en canción es para algunos un acto de justicia, para otros de empoderamiento, y para otros una pataleta ridícula y fuera de lugar. 

Me sorprende que a estas alturas se entienda que alguien a quien han engañado ha sido humillado, lo humillante debería ser engañar. 

Me sorprende la falta de madurez emocional, de educación emocional de una mujer de 45 años.

Shakira y Piqué me importan poco o nada, dos millonarios con mucho ego y pocas luces

Recordemos que cuando se conocieron Piqué andaría en los 23 y Shakira en los 33, vamos que no es un hombre aprovechándose de una niña inmadura, o indefensa, Shakira ya era una estrella millonaria de la canción.

Dicho esto personalmente Shakira y Piqué me importan poco o nada, dos millonarios con mucho ego y pocas luces que ponen por delante su bienestar personal, incluso por delante del bienestar de sus propios hijos, o eso demuestran sus acciones y actitudes. 

Lo que más me molesta de la letra de la canción es la parte en que Shakira menosprecia a la nueva pareja de Piqué, haciendo además un alarde de clasismo y excesivo egocentrismo al compararse ella misma con un Rolex y un Ferrari, mientras menosprecia a los que usamos un Casio o conducimos un Twingo.

Un despropósito aplaudido por muchos, algo incomprensible y muy propio de esta época que vivimos. 

Ni Shakira, ni Piqué... educación emocional es lo que falta