jueves. 18.04.2024
 

Antes se decía que la izquierda española sólo estaba unida en la cárcel y que aún así, había que matizar mucho. Parece que la tendencia es contagiosa y que, tras unas décadas en las que la moderna CEDADE de Fraga ha resistido firme contra el virus, la actual derecha española ha iniciado el camino del suicidio ceremonial.

Después de años de disfrutar del monopolio de la parte derecha del espectro (lo del centro nunca ha sido verdad, me parece) el PP está viendo crecer a VOX como el retoño de la raíz franquista que siempre ha permanecido dormida en el PP y que se desvela ahora bajo un nombre nuevo, pero manteniendo las esencias. Por si la división exterior no bastara para compartir las penas del espectro de la izquierda, siempre fragmentada por lo menos en dos partidos cuando no en muchos más, el PP está viendo cómo ese alma cainita puramente ibérica se manifiesta ahora en el interior de sus estructuras para generar …cualquier cosa. Ya decía Gabriel Celaya en su poema España en marcha que:

Somos barbaros, sencillos.

Somos a muerte lo ibero

que aún nunca logró mostrarse puro, entero y verdadero.

El poeta se refería a la izquierda en lucha, pero ese alma ibera trasciende partidos y se manifiesta allá donde tiene posibilidad de crecer, expandirse y dividir. 

No sé si este ruido mediático es la melodía del degüello, si anuncia tormenta y cambio o sólo es el preludio de un congreso muy movido que se anuncia para Julio y en el que ajusticiar a Casado en favor de….¿Feijoo? ¿Bonilla? o lo que, como dirían los de El Gato al Agua, se configura como la esperada parusía de Jose María Aznar (RAE, Parusía: Advenimiento glorioso de Jesucristo al fin de los tiempos.)

 

Sin que, hasta este momento haya pruebas de ningún delito, la dirección del PP ya ha destapado la caja de los truenos y, a modo de comentario jocoso, -el tal tiene la gracia en el mismo sitio que las avispas -Aznar desprecia la posible guerra en Ucrania en favor del “armamento nuclear” existente en los arsenales del PP. ¿Qué sabe y qué nos quería decir? ¿Nos anuncia un goteo de informaciones como pasó con Cifuentes? ¿Que tienen Miguel Angel Rodriguez  y “su niña” para que puedan plantear una confrontación tan decidida? Como decía la canción ¿de dónde saca “pa tanto” como destaca?

Me temo que los movimientos bélicos no han hecho más que empezar y que los distintos medios de comunicación van a jugar un papel fundamental. Lo que sí parece claro es que Ayuso ha ido jugando con fuego y que andar con tanta cerilla de Aval Madrid, hotel de Sarasola y hermanito aventajado en los negocios internacionales, puede acabar chamuscándole los dedos.

Concluyendo esta primera entrega de lo que promete ser un largo culebrón sangriento -no se hacen prisioneros y sólo puede quedar uno - lo peor de todos estos hechos impresentables, es que esto no es nada bueno para el conjunto de la vida política española ni para el país en general.

Cuando lo sensato sería recortar y eliminar la influencia de los extremos y que los dos grandes partidos se acomodaran a la lógica de respetar al más votado con un compromiso de abstención para respetar al más votado -algo que ya hizo el PSOE con Rajoy y a lo que siempre se ha negado el PP- los acontecimientos nos llevan a la consagración de la división y a la necesaria colaboración con unos partidos que nada aportan a la sensatez desde ambos lados del espectro.

Es posible que el beneficiado sea Pedro Sánchez - que es,de largo,el más listo de la clase - y el PSOE, pero a costa de la calidad general de nuestra dinámica política, ya muy tocada y cada vez más alejada de lo que muchos sectores sociales esperan. De ahí la explosión de un nuevo “cantonalismo” cartagenero y moreno que quiere hablarnos de Ávila, Soria, Teruel y de lo que te rondaré, morena.

Personalmente, y asumiendo el riesgo de equivocarme, hace tiempo que estoy convencido de que el futuro del PP pasa o por Feijoo o por Bonilla, siempre y cuando no tengan la tentación de proponer a Aznar como presidente de la III República Española, que todo está por ver.

Como decían en los grandes seriales: No se pierdan el próximo capítulo…

Alma cainita