jueves. 28.03.2024
ipc
Foto: T. López Cánovas

El consumo interno no se recupera porque no desaparece la insostenible tasa de paro, no se crea el empleo de calidad, salarios y pensiones acumulan una pérdida de poder adquisitivo, por la falta de fluidez del crédito hacia familias y Pymes, en definitiva, porque las familias y los trabajadores españoles siguen en crisis

Los datos del IPC ponen de manifiesto que los precios en España encadenan nueve meses en negativo, consecuencia clara de la debilidad de una recuperación de la economía española, que está muy lejos de llegar a las familias y los trabajadores de nuestro país

UGT considera que la salida de la crisis pasa por una reactivación del consumo de las familias y para ello defiende un nuevo acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva que contemple un crecimiento real de los salarios, un verdadero aumento del empleo de calidad, vinculado a un nuevo modelo productivo necesario y urgente, y el mantenimiento de la ultraactividad de los convenios. 

El sindicato destaca que su propuesta es razonable, ajustada y que es de justicia social que los trabajadores recuperen el poder adquisitivo perdido y aboga por desarrollar una política salarial que frene la devaluación, que sólo conduce a la desigualdad y a la injusticia. 

Según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la evolución anual del IPC encadena su noveno mes en negativo, a pesar de que aumenta ligeramente respecto al mes anterior, y se sitúa en el -0,7%. Por su parte, la tasa mensual de la variación de los precios se sitúa en 0,6%, esto es, cuatro décimas por encima de la tasa mensual del mes de febrero.

La inflación subyacente, que mide la variación general de precios descontando los alimentos no elaborados y los productos energéticos, se mantiene en el 0,2%,  misma tasa que los dos meses anteriores, es decir, nueve décimas por encima del IPC general.

En el mes de marzo la tasa de variación anual del IPCA sigue en negativo por noveno mes consecutivo y se sitúa en el –0,8%, cuatro décimas por encima de la registrada el mes anterior. De este modo, el IPCA de España se sitúa siete décimas por debajo de la tasa media de la eurozona, también en negativo, -0,1%, dos décimas por encima que el mes anterior.

Valoración


El consumo interno no se recupera porque no desaparece la insostenible tasa de paro, porque no se crea el empleo de calidad, porque salarios y pensiones acumulan una pérdida de poder adquisitivo de tal que no se compensa con esta debilidad de los precios, por la falta de fluidez del crédito hacia familias y Pymes, en definitiva, porque las familias y los trabajadores españoles siguen en crisis. 

Y además, porque sigue sin aparecer en escena el necesario, y ya urgente, cambio de modelo productivo, lo que requiere aumentar el capital físico, el capital humano y el capital tecnológico. Porque ahí es donde está el futuro del empleo en nuestro país. La salida de la crisis pasa por una reactivación del consumo de las familias, que solo será posible si además de un crecimiento real de los salarios de los trabajadores se produce un verdadero aumento del empleo, pero del empleo de calidad, vinculado a ese nuevo modelo productivo. 

No se trata de acabar con el paro a través de la precarización del empleo, porque tal y como reflejan todas las estadísticas, el empleo que se está creando en nuestro país es más precario, de peor calidad, con más temporalidad, mayor temporalidad involuntaria y salarios más bajos. Para la Unión General de Trabajadores, se trata de crear empleo sostenible y de calidad, vinculado a la mejora de los salarios y a la ultraactividad de los convenios.

Por ello, la mejora salarial debe estar en el centro del contenido de un nuevo Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC). Y en este sentido el AENC debe garantizar el crecimiento real de los salarios porque la negociación colectiva tiene que apostar por el crecimiento de los salarios reales para consolidar la reactivación y reducir las situaciones de pobreza laboral que se han generado durante la crisis. 

En este sentido, la voluntad de UGT es firmar acuerdo en la negociación colectiva pero siempre y cuando éste pase por mejorar los salarios, crear empleo de calidad y mantener la ultraactividad de los convenios. 

Un acuerdo en esta línea sería positivo para los intereses generales del país, para las empresas y para los trabajadores, porque recogería los intereses de todos, y desde el punto de vista del interés general, la mejora de los salarios permitiría la mejora del consumo y de la inversión, y con ello la estabilidad de precios en nuestro país.

Para el sindicato es de justicia social que los trabajadores recuperen el poder adquisitivo perdido durante estos años y deben participar de la nueva etapa de crecimiento con más empleo, de más calidad y con mejores sueldos. 

Por eso no es posible firmar un nuevo AENC si no se recogen criterios salariales coherentes con la situación: si la economía mejora y la productividad aumenta, el crecimiento real de los salarios debe estar garantizado. 

Y para poder garantizar la recuperación real del poder adquisitivo de los salarios, la propuesta salarial del acuerdo debe incorporar un elemento esencial como es la cláusula de garantía, y más en los tiempos actuales, y ante la poca certidumbre en relación a la  variación de los precios en el futuro próximo. 

En este sentido, los últimos resultados disponibles de la negociación colectiva en el pasado mes de marzo señalan en los dos primeros meses del año se han registrado 654 convenios (un 14,5% más que en el mismo periodo del año anterior) para 2.027.300 trabajadores (un 25,2% menos que en el mismo periodo del año anterior), con una subida salarial media de 0,69%. 

El 91,7% de los convenios registrados, 600 convenios, iniciaron sus efectos económicos antes de 2015, mientras que sólo 54 convenios han sido firmados este año. Estos convenios nuevos recogen una subida salarial media del 0,39%, mientras que los convenios con efectos económicos anteriores a 2015 contemplan un alza salarial del 0,69%. 

El incremento salarial medio pactada en los convenios de empresa se situó en el 0,57%, inferior a la de un año antes (0,82%), en tanto que el incremento salarial de los convenios de otro ámbito alcanzó el 0,69%, superior a la de los tres primeros meses de 2014 (0,54%).

UGT advierte de que se recoge cláusula de garantía salarial solo en 71 convenios, es decir, el 15,7% de los convenios registrados, y afecta al 20,5% de los trabajadores. 

En estos momentos, la cláusula está más presente en los convenios de empresa, 23,80%, que en los convenios sectoriales y de grupos de empresa, 19,9%, si bien en porcentaje de trabajadores cubiertos es similar, y se sitúa en el 15,7%.  

Para el sindicato la actual cobertura de la cláusula de revisión salarial resulta manifiestamente insuficiente por lo que señala que es preciso incorporar estas cláusulas en el mayor número posible de convenios colectivos para preservar la negociación salarial firmada de los incrementos de precios por encima de la previsión. 

En este contexto, la propuesta salarial de UGT para el nuevo AENC es razonable y ajustada, y los crecimientos salariales que se plantean son asumibles por las empresas de nuestro país. Ahora toca crecer más y de forma equilibrada, crear más y mejor empleo y potenciar un cambio de nuestro modelo de crecimiento de futuro. 

Y para ello, los salarios deben crecer en términos reales. En definitiva, se trata de apostar por una política salarial que frene la devaluación, que solo nos conduce a la desigualdad y la injusticia.

Porque con las políticas actuales nos encaminamos hacia un crecimiento tan desequilibrado e insostenible como en la pasada etapa expansiva, y hacia una sociedad más injusta y desigual.

La mejora salarial para el AENC es "perfectamente asumible para la patronal"