Decíamos ayer, y anteayer, y lamentablemente lo diremos mañana y pasado mañana, que España hiede; hiede institucionalmente. Desde muchos rincones del país brota la…
España hiede. La fetidez llega a Bruselas, a Berlín y más lejos, pero parece que el hedor todavía no molesta ni al Partido Popular ni al Gobierno; debe ser que nuestros…