A diferencia de la gestión de la Gran Recesión de 2008, basada en recortes, austeridad y devaluación salarial, la gestión de la actual crisis se está haciendo desde unos parámetros completamente…
Las divergencias políticas persisten y las soluciones a los dos grandes problemas políticos que están encima de la mesa, la inmigración y el Brexit, siguen estando muy lejos.