viernes. 19.04.2024

Golpe a Venezuela. La injerencia de Trump

guaido

La nueva estrategia que impulsa EEUU para derribar al gobierno legítimo de Nicolás Maduro pasa por la creación de un Estado paralelo apoyado por el Grupo de Lima

En una nueva muestra de atropello a las instituciones democráticas, Donald Trump reconoció “oficialmente” a Juan Guaidó -presidente del Parlamento de Venezuela de mayoría opositora- como presidente interino de ese país.

La imposición de presidentes y dictaduras de ultraderecha por parte de los Estados Unidos ha sido, en la región, una constante a lo largo de la historia. La nueva estrategia que impulsa EEUU para derribar al gobierno legítimo de Nicolás Maduro pasa por la creación de un Estado paralelo apoyado por el Grupo de Lima, reconociendo a Juan Guaidó como presidente para allanar el camino de medidas desestabilizadoras.

Una organización de venezolanos autoexiliados en Miami, y orquestada por el teniente coronel José Antonio Colina (involucrado en atentados terroristas en Caracas en 2003), pidió el pasado 15 de enero al presidente de la Asamblea Nacional que, como “presidente” de Venezuela designe una junta directiva de Citgo, filial de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), en EEUU. Esta empresa es una de las principales fuentes de divisas de Venezuela. De conseguir su objetivo, que depende necesariamente de la aprobación de Washington, sería un avance importante en la asfixia económica del gobierno de Maduro.

Desde la Casa Blanca, Trump sostuvo que “En su papel de única rama legítima del gobierno debidamente elegida por el pueblo venezolano, la Asamblea Nacional invocó la Constitución del país para declarar a Nicolás Maduro ilegítimo y, por lo tanto, la oficina de la presidencia quedó vacante”.

Juan Guaidó asumió su primer cargo político en 2011 cuando ocupó un escaño de la Asamblea Nacional por Voluntad Popular. En el 2016 fue reelegido como diputado de la Asamblea Nacional, que posteriormente fue declarada en desacato por el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela.

La presión contra Venezuela venía incrementándose de manera notable. La Plataforma Ciudadana en Defensa de la Constitución, integrada por críticos del chavismo que en otros momentos se posicionó contra algunas decisiones de Maduro, libró un documento en el que denuncia que EEUU y sus aliados como el Grupo de Lima y el secretario general de la OEA, Luis Almagro, pretendan "imponer la tesis del Estado Fallido al demostrarse, según ellos, la “ilegitimidad de origen” del presidente, para luego justificar su intervención en Venezuela, siguiendo la ruta de la creación de un “Estado paralelo”, como lo hicieron en Libia".

​El secretario general de la OEA, el vocero más reputado de Trump, participó directamente en la campaña electoral llamando a no votar en las pasadas elecciones con el fin de desconocer su mandato y proclamar el vacío de poder a fin de darle legitimidad a un gobierno paralelo impuesto por EEUU.

Golpe a Venezuela. La injerencia de Trump