Por Francisco Díaz-Tendero | Lo primero, que nos viene a la mente es que "no" se está intentando contrarrestar la propaganda de la "derecha". Cierto que tiene un poder mediático apabullante. Pero es bastante burda.
Ellos mismos dan unas ocasiones en las "tertulias televisivas". En ellas, como en todos los otros medios "de persuasión", los representantes de los partidos "de izquierdas", no suelen contradecir las afirmaciones gratuitas, y mal intencionadas de "los otros". Ni siquiera, en los casos más sencillos, por ejemplo, cuando el PP, se define a sí mismo como "centro-derecha".
Sería muy fácil mencionar que, en muchas encuestas, se ha pedido a la población, que "ponga nota" a todos los partidos, por lo menos a los grandes. Sistemáticamente, en ellas, (hemos visto, al menos tres en los últimos dos años); todo el mundo califica, más o menos correctamente al PSOE, entre 4 y 5, lo que puede considerarse bastante aproximado.
Aunque en algunas épocas, (para nosotros), ha estado, (o esta) "un poco más alto"... Lo que sería casi superponerse con actitudes de "Centro-Derecha". En esto hay que mencionar el acuerdo de "Sánchez-Rivera"; que fue una claudicación evidente.
Como inciso, habría que decir, que: en España, en realidad, no es fácil que haya un partido de "Centro-Derecha"; que estaría entre 5, y 7. Y, ello, por una razón bastante sencilla: No hay población para mantenerlo. Esta, sería una "clase media", entre "media-media", y "media-alta"; que, a penas, ha sido incipiente durante algún tiempo. Y, ahora, ha desaparecido prácticamente con la crisis.
Esto explica los fracasos de todos los partidos que han intentado ocupar ese "hueco en el espectro parlamentario": UCD, CDS... incluso los que han hecho cosas verdaderamente positivas para la democracia. Como se le reconoce a UPyD.
Otro asunto, (todavía no claro), es lo que pretende parecer C's; cuyo origen, y actuaciones "de facto", recuerdan mas a una "franquicia" del PP clásico, que a otra cosa. Lo veremos en su comportamiento al intentar formar un gobierno del PP.
La conclusión más evidente, es que no es la Política la que está dividida, es la Sociedad. Los partidos solo representan, (o dicen representar), los intereses de los distintos grupos sociales. Y, aquí, la clase media, (que se considera el "colchón" de la democracia), ha sido siempre débil; cuando la ha habido.
A IU, o Podemos, se les da una nota más baja; aunque no menor de 3. Lo cual ya significa que no se consideran de "extrema izquierda", como suele acusar "la derecha".
En cuanto al PP, (que es por lo que empezamos este apartado), la nota mas baja que hemos visto era de 7'6; después subió a 8'2, y la ultima era de 8'6. Con estas "notas", y esta evolución, no se puede presumir de "Centro-Derecha". Esto es derecha "de notable alto", por lo menos; con ribetes de "extrema". Se dice que en España, no hay un partido de esta calificación, (como en casi todos los países europeos), precisamente por eso, porque la gente de ideología extrema está incluida en el PP.
No descubrimos nada con esto. No son "ideas nuestras". Pero nadie les desmiente cuando se auto asignan una calificación mucho más centrada de la que revelan sus actos. La cuestión es "¿Por qué...?"
Para nosotros, (el razonamiento vuelve al principio): Ignorancia de unos, deseo de engañar de otros, y "pasividad irresponsable" de los que deberían tomar cartas en el asunto. Estos últimos, quizá, por pensar que estas "propagandas" no pueden hacer mella de puro "burdas". A ellos seguro que no, (y a nosotros tampoco), pero a la generalidad de la población que les vota está claro que sí.
Según unas cifras publicadas recientemente, un 60% de los votos del PP en las ultimas elecciones vienen de "clase baja". Más de la mitad de los votos que les encumbran; para mal de los propios votantes, y de los demás. Si esto no es tirar piedras contra el propio tejado, dígannos que es…
Otro tema del mismo estilo, es de signo contrario: Acusaciones gratuitas, contra Podemos, (e IU), de ser extremistas de izquierdas, y de querer implantar un estado dictatorial estilo soviético. Evidentemente están invocando entre sus bases menos preparadas los miedos de los años 30; ampliamente utilizados por el régimen de Franco.
Para los que nos preocupamos, "un poco", de pensar estas cosas: este asunto, no tiene pies ni cabeza.
En primer lugar los regímenes totalitarios, tanto Fascistas como Soviéticos, en Europa, han chocado con la mentalidad eminentemente individualista de la población "occidental".
En España fue una imposición de los "predecesores" de los que ahora acusan; que siempre se mantuvo por la fuerza y por las conveniencias de la geoestrategia internacional de la guerra fría. Franco, si no hubiera sido por las conveniencias de los EEUU, que les llevaron a los acuerdos del 53, no hubiera durado tanto. En el 56, ya tuvo disturbios importantes en las universidades, principalmente Madrid. Y, se dice que, los mismos EEUU, habían pensado en derrocarlo, (incluso asesinándolo); lo que no hicieron por que les convenía como punto de apoyo contra la URRS.
La única área donde han sido bienvenidos los regímenes totalitarios ha sido la Europa del Este; considerando "Este", desde la línea Rin-Danubio, que divide al continente en diagonal, principalmente Alemania que, incluso, ahora intenta hacer algo parecido desde el punto de vista económico, ya que no pudo desde el militar.
En esta misma tribuna, hay un artículo de Cándido Marquesán, recomendando un libro que trata sobre el tema; nosotros mismos hemos hecho algún comentario en escritos anteriores.
En todo caso, estos partidos (Podemos e IU), no iban a estar solos en el gobierno, sino en alguna forma de colaboración con PSOE; nada sospechoso.
Otras acusaciones, sobre la financiación de Podemos por parte de Venezuela y Persia, han demostrado que eran pura difamación; por eso han desaparecido, (como se ha hecho notar en los medios), cuando las elecciones las han hecho innecesarias.
De todas maneras, nunca explicaron que interés podían tener estos dos países en invertir dinero para alterar la política de un país insignificante y lejano, (para ellos). Y, mediante un partido naciente, que ni siquiera se sabía si llegaría nunca a presentarse a unas elecciones; mucho menos a tener un buen resultado en ellas.
Se puede seguir muchísimo más; casi cualquier punto que se toque de la "propaganda de la derecha", es un puro dislate; que no puede convencer más que a los que ya vengan convencidos, o no tengan ni idea de "qué es qué", y "quién es quién", como dijimos desde el principio.
Seguiremos en otra ocasión.