viernes. 29.03.2024

Por qué Podem Catalunya necesita un cambio profundo

encomupome

Es insultante e indignante ver el esfuerzo de otras voces, conocidas por su oportunismo y carrerismo, que están intentando judicializar lo que es un hecho político. Como también hace Rajoy

Creo que en este momento Podem se está jugando su existencia y su razón de ser. Y digo esto no porque haya peligro de que desaparezca sino porque continúe en una línea meramente testimonial, que reúne la gente que está hasta la coronilla con la sociedad en la que vive, sin la capacidad de incidir en ella para cambiarla profundamente. Podem Catalunya ha entrado en los últimos años en una línea constante de protesta pero su incidencia en la transformación de las instituciones representativas Catalanas ha sido relativamente menor. Y es ahí donde necesita un cambio profundo, para poder hacer cambios profundos en ellas.

Permitidme pues que como persona que ha estado en Podem y Podemos desde el principio, hable de mis experiencias en este movimiento, y como he llegado a esta conclusión. En realidad, algunos estuvimos en Podem y Podemos incluso antes de que comenzara a existir. Estuvimos en las entrañas del cuerpo que lo gestó y lo estableció. Me estoy refiriendo al 15-M, al movimiento de protesta y agitación que canalizó el enorme enfado frente a aquellos que se presentaron como los “representantes del pueblo catalán” a la vez que, desde las instituciones que llamaban representativas, aplicaban políticas públicas que estaban dañando la calidad de vida y bienestar de las clases populares de este país, políticas que respondían a los intereses de las élites financieras y económicas que lo gobiernan y no a los deseos de la gente común, que es la mayoría de la población.

Es más, aquellas políticas públicas, -reformas laborales reaccionarias y recortes de servicios del Estado del bienestar-, todas ellas medidas altamente impopulares, se presentaban como las únicas posibles lo cual era fácil de mostrar que ello no era cierto. Y me alegro enormemente que el libro que Juan Torres, Alberto Garzón y yo escribimos, HAY ALTERNATIVAS, en el que documentamos que sí que había alternativas (mostrando y documentando con datos que sí las había) se convirtió en un punto de referencia mayor de aquel movimiento. Si que las había. Y ello dio motivo a que al lado de la protesta hubo una petición de cambio señalando que sí que se podía hacer el cambio. El grito de “SI SE PUEDE” se transformó en nuestro grito de guerra. Era la exigencia de cambio frente a aquellos que “NO NOS REPRESENTAN”.

Y esta movilización, enormemente popular, movilizó a todo un país. Y fue a base de agitación y movilización que fuimos politizando a nuestra población, ilusionándola que sí que se podía y debía cambiar la sociedad. Recuerdo experiencias vivas y extraordinarias, impresionantes, como fue la de dar clases en la Plaza Catalunya llena de gente o frente al Parlament, rodeados de helicópteros y rodeados de los Mossos.

La aparición de Podemos y Podem Catalunya

Pero la protesta no se quedó allí: instrumentos políticos se establecieron. Podemos a nivel de España y Podem a nivel de Catalunya que, en un tiempo nunca antes conocido, pasaron a intervenir en las instituciones del Estado, iniciándose una estrategia de cambio dual, con un pie en la calle, y otro pie en las instituciones. El surgir de tales movimientos contestatarios creó una enorme hostilidad y represión por parte de los establishments políticos y mediáticos, hostilidad y represión que continúan.

A pesar de su falta de experiencia, Podemos tuvo rápidamente gran influencia no solo en la calle pero también en las instituciones llamadas representativas. Es cierto también, que signo de su escasa experiencia, tuvo también momentos de grandes tensiones. Pero, no hay que olvidar que los logros a nivel del Estado fueron considerables. Y aprendimos también de nuestros errores. Los que vivimos en Vistalegre II, recordaremos siempre la solidaridad, la empatía y la ilusión que se creó al ir abriendo nuevas vías.

Mi experiencia en Podemos en España

A nivel personal me sorprendió y me dio gran alegría que la labor de formación que yo modestamente hacía día tras día escribiendo mi blog, estaba siendo conocida y reconocida, siendo elegido el número cinco en Vistalegre II tras tres compañeros y una compañera a los que siempre tuve en gran estima: Pablo Iglesias, Pablo Echenique, Íñigo Errejón e Irene Montero. ¡Y qué grupo de compañeros y compañeras fueron elegidos en el que hoy es el Consejo de Ciudadanos al cual pertenezco! De mis muchos años de vida en España y en el exilio, ayudando a las fuerzas políticas comprometidas en el servicio de mejorar el bienestar de sus pueblos, esta era una de aquellas fuerzas políticas con las que yo me sentí más a gusto. Cierto que militar en Podemos, si es auténtica y sentida tu entrega, te crea también muchos problemas y dolores de cabeza, pues siempre cuando trabajas al servicio del oprimido generas hostilidad del opresor que tiene enormes redes de poder y puede hacerte la vida difícil. Y muchas veces hay incomprensión y pierdes algunos amigos. Pero ganas muchos otros: gente común desconocida que cuando te ven te sonríen y te animan a que continuemos batallando y escribiendo. Y así sigo. Y fue un honor de nuevo cuando Pablo Iglesias me pidió que le ayudara en el Gobierno en la Sombra.

Mi experiencia en Podem Catalunya

En Catalunya, sin embargo, mi relación con Podem fue muy difícil. Nunca me encontré cómodo del todo. Y una de las razones era las continuas luchas internas que no podían definirse de ninguna otra manera que luchas por el poder, luchas que me repugnan y que nos hacen muchísimo daño. Son generalmente luchas entre camarillas y aparatos que terminaban siempre con expulsiones de los perdedores por parte de los ganadores. Intenté, junto con otros amigos y compañeros, que Podem se aliara con otro producto del 15M, Barcelona En Comú. La experiencia de alianzas entre Barcelona En Comú y Podem dirigida por Xavi Domènech había sido muy exitosa, pues no sólo una sino dos veces en las elecciones españolas En Comú Podem las ganó. Esta alianza de las nuevas izquierdas, En Comú Podem, a la que se adhirieron también las izquierdas renovadas, ICV-EUiA, eran el eje de un nuevo espacio político, a la izquierda del PSC, un gran partido que, al seguir la dirección del PSOE, diluyó y disminuyó su vocación transformadora. 

Este intento de alianza de Podem con Comú no cristalizó a nivel de las instituciones llamadas representativas en Catalunya y en las elecciones catalanas no reprodujimos el éxito de las españolas. Las causas son múltiples. Pero una importante es que, mientras a nivel del Estado español las clases populares en general y la clase trabajadora en particular nos ven a En Comú Podem como el instrumento más crítico y eficaz en la lucha contra el PP y las derechas españolas, no nos vieron en cambio en Catalunya como el instrumento más eficaz frente a la derecha catalana, que rebautizada como independentista, dividía al pueblo catalán, por clase social y por identidad nacional e idioma.

El hecho de que Podem Catalunya se alinease con el independentismo, hegemonizado por las derechas, contribuyó al enfado de las bases -los inscritos- y a las tensiones entre las izquierdas. Teníamos que haber sido percibidos por las clases populares como su instrumento, no solo en su lucha contra la derecha española sino también contra la derecha catalana. Y fue una lástima y un grave error, pues no hay partido más semejante al PP en Catalunya que Convergència. Ambos son corruptos hasta la médula y ambos utilizan las banderas (la borbónica y la estelada) para ocultar sus vergüenzas y sus responsabilidades por haber creado la mayor crisis social que ha habido en Catalunya y en España durante el período democrático.

Estamos pues en una lucha de banderas detrás de la cual hay una lucha de clases brutal. Como consecuencia, el 40% de los catalanes no viven mejor que sus padres.

Las luchas internas en Podem Catalunya están haciendo un gran daño

Y frente a esta realidad, no se puede aceptar que Podem Catalunya esté dando esta imagen de luchas internas por el poder, imagen real pero también ficticia en parte pues está amplificada por los medios de información que controla el adversario para destruir a Podem. Es lamentable que tales medios estén utilizando a los albanistas, dentro y fuera de Podem para destruirlo y todo lo hacen bajo la excusa de “intentar salvar a Podem”. ¿Salvarlo de qué? ¿De dejar de ser un aliado de los independentistas? Es indignante ver a ex dirigentes de Podem, atacando a Podem en las cajas de resonancia proveídas por los mismos medios que están sirviendo a las derechas catalanas que les ofrecen todo tipo de accesos y facilidades a fin de combatir a las izquierdas no independentistas a las cuales niegan todo espacio.

Pero también es insultante e indignante ver el esfuerzo de otras voces, conocidas por su oportunismo y carrerismo, que están intentando judicializar lo que es un hecho político. Como también hace Rajoy, intentan utilizar los tribunales para aplicar decisiones políticas. La judicialización de la política es lo que tanto Rajoy como los y las oportunistas dentro de Podem están haciendo. Estamos viendo el intento de tales voces de evitar que los inscritos tengan la oportunidad de poder votar por un candidato, Xavier Domènech, una de las personas de Podem que ha estado más comprometido con Podem, defendiéndolo y representándolo por muchos años, tanto en las Cortes como ahora en el Parlament. Son los inscritos (la máxima autoridad de Podem Catalunya, la Asamblea Ciudadana) y no los jueces los que tienen que decidir si quieren o no a Xavier Domènech. Estas voces están dañando enormemente a Podem y a Podemos intentando conseguir a través de los tribunales lo que no pueden conseguir a través del proceso democrático.

Una nota personal

No quisiera terminar estas notas sin añadir una observación personal. He tenido el honor de coordinar la Gestora provisional de Podem Catalunya por varios meses a partir del momento en el que el Secretario General dimitió debido al voto masivo de la Asamblea Ciudadana en contra de su línea política. En un momento de considerables dificultades, la dirección de Podemos me pidió a mí, el catalán más votado en Vistalegre, que dirigiera esta Gestora. Y fue una experiencia que valoro muy positivamente pues pude ver como sensibilidades políticas distintas -acostumbradas a pelearse- podrían trabajar conjuntamente en la Gestora en un espíritu no sólo de colegialidad sino también de camaradería. Y todo ello al servicio de las clases populares en general y de la clase trabajadora en particular. Fue una etapa difícil en la Campaña Electoral pues sólo a último momento pudimos dar visibilidad a la enorme crisis social, amagada y ocultada por la crisis nacional.

Pero los enemigos de Podem intentaron destruirnos con todo tipo de calumnias, como falta de transparencia (cuando en realidad fue la única Gestora que publicó todas las actas de sus reuniones), o de lo que fuera. Pero tuve también la oportunidad de visitar muchos círculos y a mucha gente, teniendo el enorme honor de representar a Podem Catalunya. Mi labor ahora está prácticamente terminada cuando la nueva dirección haya sido elegida. Pero espero que por el bien de Cataluña y de Podem haya un cambio profundo que incluya todas las sensibilidades que antepongan un proyecto común -de profunda transformación de Catalunya- a las rencillas internas, a fin de que la experiencia muy positiva de las estatales puede reproducirse en las autonómicas y municipales. De ahí que mi voto como individuo y militante irá a Xavier Domènech (que representó a toda y a todos en estos años y cuya capacidad dialogante y espíritu de entrega y sacrificio ha quedado ampliamente probado en estos años de servicio)  pues veo en él y en su equipo (que reúne todas las familias políticas dentro de Podem) al mejor candidato para Secretario General y al mejor equipo para dirigir Podem Catalunya. No me queda ninguna duda que bajo su dirección Podem Catalunya será más fuerte y más influyente en el quehacer cotidiano de mejorar la calidad de vida y el bienestar de las clases populares en Catalunya, hoy muy deterioradas debido a la permanencia en el poder institucional de las derechas de siempre, que claramente están utilizando las banderas para ocultar su responsabilidad en tal deterioro. Así de claro.

Por qué Podem Catalunya necesita un cambio profundo