jueves. 25.04.2024

Solidaridad con las víctimas del yihadismo: En defensa del multiculturalismo

El yihadismo ha vuelto a golpear duramente a Europa en estas últimas semanas. El viernes 16 de octubre, el profesor de Geografía e Historia, Samuel Paty, era asesinado por un terrorista islámico cuando salía de su colegio Bois-d’Aulne, en las proximidades de París.  El 29 de octubre, tres personas sufrieron un ataque mortal por parte de otro extremista yihadista, dentro de la iglesia neogótica de Notre Dame de Niza. Y el pasado domingo, en Viena, una cadena de atentados causó cuatro muertos y 14 heridos graves cerca de una sinagoga.

Ante estos horribles hechos, mi corazón y pensamientos están con las familias de las víctimas, me solidarizo con ellas y con sus principales allegados. Nada puede justificar esta barbarie cometida. Desde aquí quiero condenar y repudiar, como siempre lo he hecho, este acto atroz, posicionándome junto a los pueblos francés y austríaco.

Además, es importante insistir en la necesidad de defender, ahora más que nunca, el multiculturalismo, basado en la integración de personas étnicamente diferentes que conviven en respeto mutuo y convivencia pacífica. Debemos alejarnos, por tanto, de respuestas autoritarias nacional populistas, como la que representa Reagrupación Nacional (antiguo Frente Nacional), de Marine Le Pen, y el resto de formaciones de ultraderecha que defienden sociedades homogéneas y excluyentes.

Del mismo modo, pienso que es primordial la mejora constante del estado de bienestar y de la educación como instrumentos fundamentales para la construcción de sociedades más cohesionadas. Por tanto, por un lado, es necesario incrementar los servicios públicos para mejorar las condiciones de vida de personas excluidas o en riesgo de exclusión, fácilmente propensos a caer en el radicalismo. Y, por otra parte, la educación debe servir para evitar la propagación del odio, difundiendo valores interculturales que aúnen recíprocamente las diferencias socioculturales.

Multiculturalismo, estado de bienestar y educación como instrumentos fundamentales para mejorar la convivencia y evitar el radicalismo islámico. 

Solidaridad con las víctimas del yihadismo: En defensa del multiculturalismo