jueves. 18.04.2024

Más vale tarde

Supongo que somos muchas las personas a las que no nos gustó nada la imagen de otros tiempos, de cuando no había democracia en este país...

Supongo que somos muchas las personas a las que no nos gustó nada la imagen de otros tiempos, de cuando no había democracia en este País, ante los juzgados de Sevilla y vociferando contra una juez que, vuelvo a suponer, sólo está realizando su trabajo lo mejor que puede y le dejan con tantas interferencias interesadas como las que ha venido soportando.

Que personas de los sindicatos UGT y de CC.OO., estuvieran en la puerta de los juzgados gritándole a la juez en lugar de exigir absoluta claridad y responsabilidades (si las hubiera) dentro de sus respectivos sindicatos, a mi me causa una profunda pena y una gran desazón.

Aunque la juez estuviera equivocada.

Aunque como señalan algunos, se tratara de un infundio contra los sindicatos… Nunca debió producirse la penosa imagen a las puertas de los juzgados de Sevilla.

Por eso, aunque tarde, bienvenida sea la declaración de los secretarios generales de ambos sindicatos Méndez y Toxo, criticando los hechos y desligando a los sindicatos oficialmente de esos reprobables y nefastos acontecimientos contra la juez que instruye todo lo concerniente a los ERES en Andalucía.

Y no me detengo ahí. Ese es solo un primer paso de mero talante democrático. Es además imprescindible que se investigue, y se ponga negro sobre blanco qué se cobró, en concepto de qué trabajos se hizo y a donde han ido hasta el último euro de dinero público de lo ingresado por los sindicatos a través de los procesos investigados.

Y eso no para el año siguiente o el siguiente. Es urgente “y para ayer”.

Por el propio honor de los sindicatos y porque está en juego el prestigio ganado con años de renuncias y sacrificios, de mucha gente honrada, que dieron los mejores años de su vida a un trabajo sindical desinteresado y profundamente ético.

A la justicia se le puede y se le debe instar a que haga bien su trabajo y a que lo resuelva con la mayor celeridad posible y todas las garantías procesales oportunas. Pero nunca con “el circo montado” a las puertas de los juzgados sevillanos; porque además de ser profundamente antidemocrático, es un tremendo y contraproducente error para la propia imagen de los sindicatos.

Más vale tarde