jueves. 28.03.2024

Ruedas de molino

Esta semana los militantes socialistas han tenido ocasión de recitar varias veces eso de comulgar con ruedas de molino...

El refranero español está lleno de dichos muy certeros y terriblemente plásticos además de atemporales. Uno de ellos contiene el título de este post y reza “Comulgar con ruedas de molino” haciendo referencia al tamaño de dichas ruedas que no pueden pasar por la boca o la garganta y, por extensión, algo que es materialmente imposible de creer, tragar, transitar.

Esta semana los militantes socialistas y gentes de izquierda han tenido ocasión de recitar varias veces eso de comulgar con ruedas de molino.  Para ellos, como describe el refrán, es difícil no solo creer lo que ciertos cargos y responsables manifiestan, sino también transitar por las explicaciones que reciben ya sea al intentar hacerlas suyas o al transmitirlas a otros.

Los hechos que han desencadenado esto han sido la firma del pacto antiterrorista, las explicaciones del mismo por parte de los responsables, las declaraciones exculpatorias referidas al Secretario General del PSM y ex alcalde de Parla, la disposición a firmar más pactos con el PP manifestada al día siguiente de la firma del primero.

El gran lío se produjo en relación con el contenido de dicho pacto antiterrorista. Sobre éste distintos portavoces se esforzaron en remarcar que no existía referencia a la cadena perpetua revisable sin tener en cuenta que, en tanto en cuanto habla de las penas establecidas en el Código Penal (y en este se va a establecer dicha pena cuya propuesta ha sido aprobada por el Congreso y elevada al Senado, además de la evidencia de la mayoría del PP en ambas cámaras), se remitía –directamente- a la nueva pena.

Y aquí viene la perplejidad de los ciudadanos y de la militancia. Uno se pregunta si estos representantes recuerdan algo de las clases de Filosofía en bachillerato o su equivalente. Aquello del Silogismo: si A es a B y B es a C, luego A es a C. Es decir si A habla de una cosa que se relaciona con B y esta B implica a una C, finalmente A se relaciona con C. En realidad por muy dura que resultase la clase de Filosofía todos aprendimos algo, a hacer silogismos, que luego nos fue de gran ayuda para orientarnos en la vida, ver claro cuando todo está oscuro.

Pero la perplejidad continuó cuando llegaron las explicaciones, momento en el cual nos enteramos de que el partido firmante del acuerdo va a recurrir la prisión permanente revisable, cuando se apruebe. Haciendo un silogismo resulta entonces que es inevitable que se apruebe. Entonces ¿para qué se firma ese pacto?, ¿para qué tanta prisa en firmar?, ¿cuál es el objetivo?, ¿es un objetivo evidente o existe un objetivo oculto?

Las dificultades múltiples que se evidencian al explicar su contenido, ramificaciones y consecuencias es obvio que resultan de la conceptualización de lo que es la cadena perpetua o la prisión permanente revisable. Los portavoces saben que es un pacto contra natura, no sostenido por los principios defendidos por la izquierda y por el partido socialista, que nos aleja del fin humanista que hasta ahora ha sostenido a nuestro derecho penitenciario. Quizás ignoran las razones que han llevado a su firma pero han de salir a explicarlo. Y entonces cuando se monta el guirigay.

Aunque no parece que sus efectos se hayan notado demasiado pues, de modo repentino, al día siguiente se muestran dispuestos a firmar más pactos con el PP, muchos, en aspectos importantes para la ciudadanía. Esto indica, a mi juicio, dos cosas: la primera de ellas es la necesidad de huir hacia adelante y poner el foco en otros posibles pactos –más relevantes socialmente- que hagan olvidar este; la segunda es mostrar un liderazgo consolidado capaz de jugar un papel de responsabilidad en la actualidad y el devenir del país. Es  decir, un liderazgo diferente del apuntado por el diablo con vaqueros y coleta que promete acabar con la casta y el bipartidismo.

Como a tenor de otro refrán muy popular “ …no hay dos sin tres…” esta misma semana tuvieron lugar unas declaraciones de respaldo total a la inocencia –o actuación- del exalcalde de Parla en el asunto del tranvía, es decir en el sobrecoste de casi 200 millones de euros que, a juicio de la UDEF, son inadmisibles. En otras palabras, no es responsable de algo que se hizo cuando ya no estaba. Lo que viene a demostrar, una vez más, en qué abismo de pensamiento y conceptualización se encuentran sumidos algunos responsables del socialismo que son incapaces de separar lo que tiene efectos políticos de aquello que tienen otros –jurídicos, administrativos, etc- . Y lo que es peor, dejan ver una falta de Visión ya no a largo plazo sino a corto, muy corto, pues si no se gana Madrid existe alto riesgo de perder España. También aquí era grande la rueda del molino.

No creo que las cosas que suceden en la vida, su desarrollo concatenado, sea inocente o se deba al azar sino que, más bien, todo lo que sucede es producto de lo que hacemos, esto de lo que sentimos, esto a su vez de lo que pensamos y solo este pensamiento está directamente relacionado con los hechos. Así que un hecho no solamente es el inicio de un camino sino que resulta el final de otro camino distinto que se ha iniciado con un hecho diferente y la interpretación que del mismo hacemos, la emoción que sentimos y la acción que, en consecuencia, llevamos a cabo. La circularidad de la vida.

Aplicando esta teoría a la imposición de comulgar con ruedas de molino que ha ocurrido esta semana ha quedado al desnudo, al menos par mí, que en el pacto antiterrorista –mal denominado de estado- había una intención oculta, algo que interesaba ocultar o incluso modificar y que el jaleo mediático derivado de la incomprensible firma iba a propiciar.

Como es obvio nunca se puede estar al completo seguros de algo, en este caso de qué es lo que conviene ocultar o resaltar, pero…¿les suena los resultados del CIS publicados hoy? ¿les parece que son tan importantes como para intentar amortiguar sus efectos mediáticos con el jaleo –también en el nivel mediático- que se ha originado? . Me parece una explicación plausible que, por cierto, disimularía la torpeza con la que fue explicado. Dejo la reflexión por hoy pero seguiré con atención los acontecimientos.

Ruedas de molino