El año que acabamos de despedir no ha sido un año de bonanza pero los problemas y calamidades, ni siquiera la avalancha de escándalos, puede despistarnos sobre la gravedad y trascendencia futura de las medidas que está adoptando el Partido Popular que nos gobierna. Tras la brutal reforma laboral, asistimos al desmantelamiento de la buena parte de la democracia con la reforma local, a la destrucción de derechos con la reforma del aborto, al desmantelamiento de los pilares del estado del bienestar con la anulación de hecho de la ley de dependencia, la aplicación de copagos sanitarios o la eliminación de becas. No queda ahí la cosa, los sectores más reaccionarios de la derecha española tratan de adoctrinar a nuestros jóvenes con la LOMCE; los más voraces de condenarles a la precariedad o el exilio económico, ayudando el Gobierno con la ley de “emprendedores”.
En lo social nos retrotraen a los tiempos del franquismo; en lo económico nos entregan en bandeja a los tiburones de la especulación. Estas reformas no ayudarán ni mejorarán la eficacia de la gestión, debilitando los pilares del estado social y la democracia.
En la Comunidad de Madrid, tanto Ignacio González, como su antecesora Esperanza Aguirre, decidieron ser punta de lanza en lo que se refiere a hacer recortes y tomar medidas contra los derechos que tanto esfuerzo nos ha costado conquistar. Aguirre y González llevan años haciendo de Madrid el banco de pruebas de las medidas más neoliberales y reaccionarias del Partido Popular privatizando la sanidad y la educación bastante antes de que llegase Rajoy. Desde el gobierno regional han sido los paladines de la política popular, y muchos votantes de Rajoy estarán lamentando no haber tenido en cuenta que tras sus promesas incumplidas de creación de empleo y reactivación de la economía había un programa oculto similar a lo que llevan años practicando en Madrid. Como también han llevado la sombra de la corrupción a su gestión en la Comunidad de Madrid, foco de corruptela y de pagos de favores, rompeolas de la cobardía del señor Rajoy que no ha sabido afrontar el problema de sus filas que lo ha intentado tapar o ignorar, obviando que ese problema no se tapa ni con una manta.
Empezamos un año difícil. El Partido Popular va camino de extremar su política aplicando su más rancia ideología y extendiendo cortinas de humo. Un año de elecciones europeas, en las que todos los europeos nos jugamos el futuro. También el año en el que se decidirán los candidatos de cada partido a las elecciones generales, autonómicas y municipales de 2015; los socialistas los elegiremos en procesos de elecciones primarias. Un año que con el gobierno de Rajoy se nos va a hacer larguísimo porque el único brote verde es el de las macetas de Rajoy.
Victoria Moreno | secretaria ejecutiva del PSM y
Juan Pedro Rodríguez | coordinador de la Secretaría de Educación del PSM