viernes. 29.03.2024

Primarias abiertas para ganar Madrid

Los ciudadanos “no pasan de politica”, ni del sistema de Partidos, sino de determinados “comportamientos políticos”...

La política, ¿está en crisis? Al parecer, por los reiterados malos datos sobre pobreza, desigualdad,  pérdida de derechos laborales (desempleo, precariedad, devaluación salarial) y de derechos civiles y humanos (ley “mordaza”, contra el aborto, emigración, xenofobia…), la “persistente” corrupción, el deterioro institucional… no es tanto que los ciudadanos hayan abandonado la política sino “que nosotros hemos abandonado a la ciudadanía” (Martín Schultz, en el Acto de lanzamiento de las Elecciones Europeas, 30 de marzo 2014, en el Palacio de Congresos de Madrid).

Por el contrario, desde los “sorprendentes” datos electorales de las Elecciones Europeas con la ruptura del bipartidismo y el surgimiento de Podemos, se ha hecho realidad la canalización hacia la participación política del “confuso” movimiento del 15-M y de las posteriores movilizaciones y “mareas” en defensa del empleo de calidad y los Servicios Públicos (Educación, Sanidad, Dependencia…), contra la corrupción y el alejamiento de los ciudadanos de las Instituciones. En los últimos tiempos hay un clamor ciudadano por la necesidad de un cambio de rumbo de la politica (en España y Europa), tanto en sus formas como en sus contenidos, que superen el actual “déficit democrático”. Los problemas del empleo, la pobreza, los desahucios, el robo de las “preferentes”, la transparencia, la participación... interesan porque recogen aspiraciones históricas  de la ciudadanía: libertad, igualdad, justicia social…

Afortunadamente para nuestra democracia se está incrementando la “conciencia política”. De no ser así, existiría un mayor riesgo de no interesar ni Europa, ni la Constitución Española, ni “esta” democracia… Especialmente, si no cambian las salidas a la crisis (“austericidio”, recortes, reforma laboral regresiva,…), tanto el “sentido de pertenencia” (España, UE…) como el “vínculo social” tienen riesgo de fractura. Así nos lo indican tanto el Eurobarómetro (aumento del “euroescepticismo”) como el CIS y otras Encuestas  (los PP.PP. aparecen en el más bajo nivel de confianza).

En efecto, los ciudadanos “no pasan de politica”, ni del sistema de Partidos, sino de determinados “comportamientos políticos”. Está en revisión nuestro sistema de representación y participación, no solo en los procesos electorales, sino en los temas cotidianos que les afectan (posibilidades de las redes sociales) y, sobre todo, al interior de los PP.PP para hacerlos más representativos y eficaces a la hora de realizar tanto  la labor legislativa como la gestión de los asuntos públicos.

Si esto es importante para la “ciudadanía en general”, haciendo más transparente y cercana la política, apostando por “la rendición de cuentas”… lo es mucho más en los “asuntos” de las Ciudades, de las Comunidades. Una apuesta radical por la democracia interna y, en los procesos electorales, por las primarias abiertas es una tarea urgente para todos los PP.PP. Hace falta cierta “audacia democrática”. Así lo ha ido defendiendo el PSM desde hace tiempo.

El agotamiento y hartazgo de las políticas antisociales practicadas por los gobiernos del PP, tanto en la Comunidad de Madrid como en los Ayuntamientos (especialmente en el Ayuntamiento de Madrid) nos sitúan ante el reto de un “cambio radical”.

Nos  sitúa, sin miedos, ni temores o planeamientos “ambiguos” (más propios de los “aparatos” o grupos de interés que temen perder sus limitadas “cotas de poder”), ante la oportunidad y responsabilidad que tienen los socialistas  de plantear “negro sobre blanco” la realización de Elecciones Primarias abiertas, tanto ante la Comunidad como ante el Ayuntamiento de Madrid. Hoy por hoy, este parece ser el camino adecuado para “movilizar” el voto progresista, con la firme decisión de ganar Madrid para la izquierda. El PSOE debería ser ejemplar en recuperar esta confianza de muchos ciudadanos de “hacer política a través del PSOE”.

Claro que este planteamiento supone “revertir el poder” a los afiliados, simpatizantes, ciudadanos… (fortaleciendo la sociedad civil), haciendo de “cauce” de las reivindicaciones y movilizaciones por los Servicios Públicos, la vivienda, la cultura… apoyados decididamente por el PSM que, ahora, podrían ser capitalizados, recuperando la credibilidad y confianza dañadas, haciendo realmente posible tanto la tan pregonada “transparencia” como la “gobernabilidad democrática”..

Un paso que, sin duda, fortalecerá nuestra democracia por el “efecto espejo” que, más pronto que tarde, estará en la “agenda política” de todos los PP.PP. como acaba de hacer público el PSOE en su “Agenda Ciudadana”.

Las limitaciones experimentadas en el proceso de Primarias para la elección de Secretario General del PSOE con el actual Reglamento de Primarias (número de avales necesarios, falta de igualdad de oportunidades de los candidatos, ausencia de una 2ª vuelta…) debería llevar a los socialistas madrileños a plantearse una adaptación de aquel Reglamento, en términos lo más avanzados posible, para recabar un amplio “compromiso ciudadano” por hacer real la concurrencia de los mejores candidatos y, tras un amplio debate de alternativas o concreciones de “modelo de Ciudad, de Comunidad”, concitar el mayor apoyo progresista en los próximos procesos electorales del Ayuntamiento de Madrid y de la Comunidad (Primavera de 2015).

Finalmente, este proceso participativo no puede ser “coyuntural” (solo para las Primarias). De forma coherente, por parte de cada candidato (de los programas e “Ideario”) debería ser un compromiso, “un estilo de hacer política” regional y municipal, fomentando:

  • La descentralización en la toma de decisiones
  • Los Presupuestos participativos
  • La Transparencia y “rendición de cuentas” (incompatibilidades, “un solo sueldo” –limitado a unos ingresos no superiores a 5 veces el SMI, por ejemplo-; eliminación de gastos suntuosos, de asesores… )

En definitiva, estamos ante un tema de clara demanda política que ahora debería hacer visible el PSM con una apuesta pública urgente de Primarias abiertas municipales y autonómicas en este Otoño. Ha llegado el momento de “hacer lo que se dice” y “decir lo que se va a hacer”, la hora de la credibilidad y la coherencia. Se trata de evitar que el “malestar interno” de un supuesto acuerdo “entre bambalinas” se traduzca en una mayor “desafección” de militantes, simpatizantes y votantes socialistas  y, por tanto, de un eventual fracaso, al que no podemos resignarnos los progresistas madrileños.

Primarias abiertas para ganar Madrid