viernes. 19.04.2024

La colgadura griega

Grecia se acerca al siglo V a.c. España, por su parte sólo ha retrocedido unos decenios el pasado 1 de julio.

Grecia se acerca al siglo V a.c. España, por su parte sólo ha retrocedido unos decenios el pasado 1 de julio. Si el tiempo últimamente pasa demasiado rápido tras décadas de monotonía, posiblemente en menos de dos, cuatro o seis meses este país dé un rodeo por la Grecia clásica, 1931, 1977, 1978,  1979, 1982,  2011… Y así iniciar una senda de esperanza.

Antes, habrá que lidiar con la que sólo el PP llama “Ley de Seguridad Ciudadana”. Que no nace muerta.  Vivirá poco y morirá matando. Como partido gobernante.

No hay diques que frenen al tsunami que tiene como epicentro el 15 de mayo de hace cuatro años. Todas las olas que asustan a los fareros de Génova serán difíciles frenar por más que levanten una construcción específica para cada una de ellas. Estas aguas turbulentas llegarán al Reino de España quieran o no.  

Antes, a la ciudanía que habita en el país que se sitúa en el podio en paro juvenil, pobreza infantil y laboral… tal vez le toque unos meses realizar colectas para quienes soliciten en la Universidad Pública la retirada de las capillas; realicen manifestaciones pacíficas frente al Congreso, el Senado y asambleas autonómicas; impidan la ejecución desahucios; ocupen bancos a modo de protesta;  promuevan escraches –  más del 80 por ciento de los españoles apoyan esta acción –; o escalen edificios para poner pancartas que sensibilicen a la población para proteger el medio ambiente.  Eso sí: hay que evitar mostrar el escarmiento. A los informadores la Ley Mordaza les castiga severamente por mostrar imágenes del abuso policial para tratar de blindar a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado ante los habituales excesos.  Previamente al miércoles pasado se podía mostrar ante el mundo la desproporción policial con periodistas y manifestantes pese a la impunidad. Ahora… NO.

Pero al parecer ni a los nacionales les convence. Menos cuando deben hacer de jueces por la nueva normativa. Llevan tiempo cansados. PP y PSOE desde el poder legislativo en la última década han convertido a  magistrados y policías en  los malos de la película, y ya no están por la labor ambos actores. Ni aunque les toque.

Si el temor a la negativa, NO doblega de manera tan sencilla hombres y mujeres armados o con toga. Al resto: tampoco. “Para curar el miedo es muy buena la aspereza porque da confianza”, escribió Víctor Hugo en Los Miserables. Tienen conciencia de ello los habitantes del sur de Europa. Tanto, que hasta suena tan bello el NO como en boca de Alberti. “Colgadura no barrera, pone a tu calle la mar. / Sal. / Una ciudad marinera quiere a tu casa arribar. /Sal./ Di que no, con tu bandera”.  Yo porto la griega, y digo NO.

La colgadura griega