jueves. 28.03.2024

Pensiones: el nuevo atentado del Partido Popular

España no tiene un gobierno. España está sufriendo a un gobierno ultraliberal, ultraconservador que está llevando a cabo con cada Ley que legisla un atentado...

España no tiene un gobierno. España está sufriendo a un gobierno ultraliberal, ultraconservador que está llevando a cabo con cada Ley que legisla un atentado contra el Estado del Bienestar que tanto trabajo ha costado implementar en nuestro país. El último ha sido el inicio de la destrucción del sistema de pensiones con un recorte de 33.000 millones de Euros, es decir, un recorte del 3,3% del Producto Interior Bruto. Este recorte se veía venir, primero por la promesa de Mariano Rajoy de que no iba a tocar dicho sistema. Cuando Mariano Rajoy promete algo hay que dar por hecho que su gobierno hará exactamente lo contrario. En segundo lugar, porque desde la Troika se les impuso como una de las condiciones para percibir el rescate a la banca. El Partido Popular rescata a los bancos que fueron cómplices y responsables últimos de la actual crisis económica a costa de los derechos de los más débiles, en el caso que nos ocupa, de los pensionistas, ya que España es uno de los países de la UE con las pensiones más bajas, con una cifra aproximada de 200€ mensuales por debajo de la media. Nuevamente el Partido Popular y su presidente atacando a los más débiles.

33.000 millones de Euros. Ese es el dinero que Mariano Rajoy les va a quitar a los pensionistas a partir de 2014. Como en otras ocasiones, las medidas del gobierno ultraconservador van en contra del contrato que firmaron con los ciudadanos en las elecciones de 2011. Este recorte de las pensiones no estaba en su programa electoral ni fue presentado por Mariano Rajoy en su debate de investidura. Por tanto es una medida que no tiene legitimidad democrática como no la ha tenido ninguna de las medidas que ha tomado este gobierno, como no tiene ni el propio gobierno, ya que gobernar gracias a un engaño electoral resta legitimidad de facto a quien gana los comicios así.

Un 3,3% del PIB es lo que va suponer este recorte. Los genoveses lo defienden porque con las tasas de paro y la caída de la población activa que están provocando sus medidas el actual sistema de pensiones es insostenible. No es cierto. El problema está en que se están priorizando las medidas macroeconómicas para la recuperación económica en detrimento de la reactivación de la economía real, la que sostiene el sistema de pensiones. Con una tasa de desempleo superior al 26% de la población activa es complicado mantener un sistema de pensiones como el español, en eso estamos todos de acuerdo. Sin embargo, el Partido Popular, Mariano Rajoy y su presunta Ministra de Empleo sólo han legislado para destruir más empleo, para rebajar las bases de cotización salarial y dar satisfacción a las reivindicaciones de los empresarios, no para hacer lo contrario, que sería lo lógico para una reactivación económica. ¿Cómo es posible que en un país con unos salarios muy inferiores a los de Alemania o Francia la economía no sea competitiva y genere más productividad, mientras que esas economías que no han atacado los sistemas fundamentales del Estado del Bienestar, con unos costes salariales superiores?

No hay ninguna intención por parte de Mariano Rajoy ni de su gobierno de regenerar la economía real. Así lo demuestran sus medidas. La ligerísima mejora de los datos macroeconómicos beneficia a las élites económicas, pero no a los españoles. Por eso ya adelantan que durante 9 años los pensionistas van a dejar de percibir 33.000 millones de Euros. Pero nos lo quieren vender con el eslogan fácil, con el titular fácil para el NO-DO de las 15.00 en RTVE: el Gobierno asegura que las pensiones no van a bajar. Un falacia más porque los pensionistas van seguir perdiendo poder adquisitivo, como lo llevan haciendo desde que gobierna el PP. Ya perdieron poder adquisitivo con el repago farmacéutico; ya perdieron poder adquisitivo en la revalorización de este año 2013 cuando el Ministerio de Empleo se inventó una nueva fórmula para pagarles 1,3 puntos menos de lo que les correspondía y eliminando la pequeña paga que cobraban los pensionistas en base a la pérdida de poder adquisitivo en función del IPC acumulado. La propaganda genovesa alentada desde la Prensa Palmera del Movimiento dice que las pensiones no van a bajar, que, al menos, se les garantiza una subida del 0,25%. En el mes de agosto, con la repercusión en los precios de las rebajas, el IPC se situó en 1,5. Los alimentos subieron un 0,4%. Por tanto, tomando como referencia el IPC de agosto como si fuera el de noviembre, con la garantía genovesa de no bajar las pensiones, los pensionistas ven rebajada su pensión en 1,25%. Es decir, mienten como bellacos y sus mentiras, además, son jaleadas por el NO-DO de RTVE y por los palmeros mediáticos.

El hecho de que el Gobierno viva alejado de la realidad hace que sigan legislando en base a un guión que parece redactado por la misma Margaret Thatcher. Son millones los españoles que tienen para comer gracias a la pensión del abuelo. Son millones los españoles que se han visto obligados a sacar al abuelo de su residencia para poder comer con la menguada pensión que percibe. Las pensiones se han convertido en el sostén económico de millones de familias porque, gracias a las medidas destructivas del Partido Popular, no disponen de ingresos para subsistir.

Lo más grave es que saben que estas medidas van a generar descontento, pero también saben que no les va a pasar nada porque España es un país de ovejitas pacíficas que no va a protestar más que en la barra de un bar, en el sofá de casa mientras, en la cola del paro, en la fila del banco de alimentos o mientras esperan a que les sirvan una comida caliente en un comedor social. En un país con conciencia de clase obrera Mariano Rajoy ya habría sentido el poder de la calle, tal y como la ha sentido Rousseff en Brasil, por ejemplo.

El Partido Popular ya ha atacado a todos los niveles que conforman el Estado del Bienestar. ¿Qué será lo próximo? ¿Tal vez derogar la Constitución y la Democracia? Espero equivocarme pero parece que vamos por ese camino.

Pensiones: el nuevo atentado del Partido Popular