miércoles. 24.04.2024

Cómo encontrar salida al conflicto cuando perdiste la esperanza

unnamedQuizás os parezca un título muy pretencioso pero es la pura verdad que vivimos cuando estamos desesperados en la espiral de un problema que por más que intentamos salir de él, no encontramos la salida. Cuando uno está pasando por un mal momento por la relación personal, profesional o de relación con otra persona, siente que no hay nada, ni nadie que lo pueda ayudar, es difícil encontrar fe y sobre todo ánimo para seguir adelante e intentar salir de un callejón sin salida.

Te levantas… y no sabes que hacer. Sientes que la suerte te abandonó, aun cuando has oído muchas veces que la suerte la encuentra quien la busca. Desconfías… porque si lo has intentado ya, ¿Cómo puede ser que exista otra oportunidad que tu no has sido capaz de bucear. Simplemente lo ves imposible y quieres que el tiempo lo cure, pero ¿podemos o debemos esperar?.  Aquí es donde nos encontramos el punto de partida de la mediación.

No creo que sea muy lejana esa línea de salida, en la que se encuentren nuestros clientes en la mayoría de las ocasiones. Por eso también es parte de nuestra misión como gestores de conflicto… DEVOLVERLES LA FE.

Les parece imposible que nuestro comienzo alentador, pidiéndoles que depositen la confianza en nuestro método de trabajo, les devuelva la serenidad suficiente que requiere su problema para ver más allá. ¡¡ que fácil es decirles que son ellos los responsables de buscar la salida!!, ¡¡ que fácil es decirles que nosotros les ayudaremos pero que no les daremos solución, dado que somos los agentes del viaje en su vida!!, ¡¡ que fácil es decirles que ambos van a ganar!!... lo difícil es TENER FE en que eso se puede producir.

Cuando uno se encuentra en una situación desesperante, no entiende, ni escucha, los buenos deseos para salir adelante, y que se fundan la fe con la confianza en nosotros

Dicen que la filosofía china nos muestra que todos tendremos a lo largo de nuestra vida tenemos 58 problemas y que tarde o temprano los tenemos que confrontar, sin embargo, solo la madurez te dice como afrontarlos. La fe en el mediador y la mediación te dará ánimo y fuerza extra para pensar que es posible gestionar en positivo tu conflicto.

Los conflictos deben “pulir el alma”, esa que se encuentra en el corazón del otro cuando reconocemos la parte de razón que puede tener ante un problema surgido, y se adapta a él, cuando somos conscientes que nosotros también tenemos parte de culpa de lo ocurrido.

Las herramientas que tiene el mediador, se ponen a disposición de las personas que perdieron la fe en cambiar el conflicto por una oportunidad, por eso no hay mayor receta que tu esfuerzo, tu confianza y tu actitud positiva para el cambio, ingredientes que debes confiarnos para ajustar los sentimientos y conseguir el mejor proceso de mediación posible.

Querido/a lector/a, gracias por estar siempre ahí, y por tener fe.

Cómo encontrar salida al conflicto cuando perdiste la esperanza