viernes. 29.03.2024

Conversando con Roque Dalton

El pasado viernes 15 de Julio, el diario El País, publicó un artículo bajo el título de “Se busca tumba para un poeta revolucionario” en el que se celebraba el cambio operado en la Justicia salvadoreña en relación al asesinato y desaparición del cuerpo de Roque Dalton. Aconsejo al lector pinchar en el siguiente enlace

A primeros de 2013 viajé a El Salvador y tuve ocasión de conversar sobre la vida y la obra literaria de Dalton, con algunos compañeros del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional. Eran tiempos de campaña pre-electoral pero la admiración por la persona y su poesía, encontraba tiempo para recordar poemas y mantener la esperanza en la justicia.

Roque Dallton es un caso paradigmático de la lucha entre la conciencia crítica del artista-militante y los aparatos burocráticos represores, encargados de mitificar la Revolución para señorear el campo con sus ambiciones espurias y su grosera muestra de incultura.

En aquella primavera compuse un poemario titulado “Conversaciones Intra-ascendentes” - integrado en el libro “Qué de la Vida” (Argerust Creaciones, S.L., 2014) - en el que tomaba acta de hipotéticas tertulias virtuales. Una de esas conversaciones reunía a Dalton con Gabriel García Márquez y Plinio Mendoza, que también sufrieron la experiencia de trabajar para Prensa Latina.

Recojo aquí esa conversación a modo de recuerdo y homenaje.

Plinio MTrabajamos en la agencia cubana Prensa Latina. Renunciaste conmigo cuando el viejo Partido Comunista empezó a tomar el control de muchos organismos de la revolución.

Gabriel GMCreo que nuestra decisión en Prensa Latina fue correcta. De habernos quedado allí, con nuestro modo de pensar, habrían terminado por sacarnos por la tangente con algunos de los parches que los dogmáticos de entonces le pegaban a uno en la frente: contrarrevolucionarios, lacayos del imperialismo, y todo lo demás. Lo que yo hice, como recuerdas, fue marginarme en silencio…

Roque D | Mi poesía es como la siempreviva paga su precio a la existencia en términos de asperidad.

Un lector: Quiero decir que en todos sus poemas,… noto un cierto tonillo zumbón… Yo también soy enemigo de la solemnidad,… tendría usted que tener mucho cuidado… para no parecer constantemente irrespetuoso. No olvide que ya concede usted, de partida, una gran ventaja polémica: un poeta, la poesía, interviniendo en estos menesteres de política explícita, directa, no es lo más, dijéramos… Bueno, usted me entiende.

El poeta: Eso que usted identifica por un ‘tonillo zumbón’, por un ‘distanciamiento irónico’, es simplemente lo que alguien ya ha llamado ‘el lenguaje crítico’.

Un lector:…son necesarias algunas aclaraciones inmediatas de su parte.

El poeta: Recuerde que, antes que nada, lo que yo hago es escribir un poema. Un poema peculiar, si usted quiere,…

Para descubrir un burócrata plantéale un problema ideológico. El rostro del problema no se reflejará en el burócrata. El rostro del burócrata no se reflejará en el problema.

Un lector: Le ruego encarecidamente que no trate de hacerse el gracioso, enredando de paso las cosas.

Escribidor | Cómo confundiste la Revolución con un poema

No te diste cuenta que para descubrir a un burócrata no bastaba con plantearle un problema ideológico no advertiste que son robots de mil caras en un mismo espejo amigo-enemigo siempre dispuestos a adivinar los deseos del Comandante Supremo ensimismado a la distancia en sueños asesinos de gloria                                                    Cómo no viste el filo del puñal

Dime necesito saberlo

Cómo queman las balas por la espalda

Roque D Podréis juzgar la catadura moral de un régimen político, de una institución política, de un hombre político, por el grado de peligrosidad que otorguen al hecho de ser observados por los ojos de un poeta satírico.

Escribidor | Nos aconsejaste una vez que sería mejor apartarnos de tu camino pero no dijiste el cómo 

Conversando con Roque Dalton