martes. 16.04.2024

La política internacional no puede estar ausente en un debate en elecciones europeas

El Socialismo, no es una forma de gestionar el capitalismo, sino de acabar con él e instaurar el reparto...

Las personas no son tontas y no es cuestión de hacer propuestas de campaña electoral simplemente con lemas fáciles y sin sustancia. Armas arrojadizas dialécticas sin más y sobre todo tratando de centrar el debate donde este se produce y que al igual que los diez mandamientos se resume en dos: Saber en que mundo vivimos y queremos vivir. Cuál es el papel de la Unión Europea en el mundo y en segundo lugar si vamos a seguir permitiendo o no que un grupo selecto de banqueros imponga su ley de hierro sobre los que nos gobiernan y los gobiernos en general o no.

La UE es en estos momentos una colonia política y militar de los EE.UU y además está vinculada a todas las operaciones agresivas y ofensivas que bajo el paraguas de la OTAN se producen. La autentica UE no es sino un negociado de la alianza militar euro-atlántica. Esto en un mundo cambiante y con potencias emergentes, no solo en el plano económico, sino también en el militar, es muy peligrosos ¿Nuestros pueblos se quieren arriesgar a guerras de dominio de los poderosos y los oligarcas, para obtener solo riesgos mientras ellos -los oligarcas-los beneficios? Pues bien esto debe quedar claro.

El mundo vive en una crisis capitalista muy profunda y no resuelta, con graves peligros de recesiones, estallidos de burbujas financieras y una moneda sobrevalorada y en crisis como es el dolar. La crisis capitalista no ha sido superada y la tentación de la salida bélica a la misma existe.

¿Como influye la política internacional en el empleo? Pues mucho. Para muestra un botón, al objeto de hacernos competir con China, quieren que las clases obreras europeas se equiparen a las chinas, en todo.

Pero hay más. Se está negociando de espaldas a las gentes un tratado comercial trasatlantico con los EE.UU el TTIP, que de aprobarse provocará mucho más paro, quiebras a nuestra agricultura, comercio, cultura y seguridad alimentaria y perdidas en derechos laborales y de soberanía. Luego las personas si desean vivir y que sus hijos tengan futuro deben saber que proponen los partidos y candidatas/os con respecto al TIIP, esto es clave y por tanto se debe situar en el debate electoral.

Hay solo dos posiciones y por tanto es fácil elegir. La primera opción, es la que apoya a la OTAN, las políticas exteriores agresivas y bélicas, un mundo inseguro y controlado por no más de diez banqueros con el apoyo de nueve estados o bien la un mundo de paz, cooperación y comercio justo, sin paraísos fiscales y con control sobre los movimientos de capital especulativo. Respeto por la Madre Tierra y lucha contra el cambio climático.

Quienes apoyan el TTIP, y quienes no. Quienes quieren reducir los derechos sociales y laborales y quienes no. Podemos luego matizar entre fuerzas políticas más o menos neoliberales o más o menos conservadoras. Pero en su visión del mundo y el papel de la UE en el mundo, son coincidentes.

En segundo lugar quienes apoyan la extinta Constitución Europea y quienes no. Eso es ya toda una declaración de principios y de apoyo o no ante las elecciones europeas a una u otra opción.

Solo dos fuerzas, los del 135 y el apoyo a la monarquía corrupta o los que apoyamos otra política social y otra Constitución. Otra Europa no de los mercaderes y una oposición frontal a los banqueros que nos dominan y controlan el llamado digamos primer mundo o potencias centrales.

Solo nos queda apelar a la inteligencia y a los deseos de vivir en paz y con dignidad y a no dejarse engañar por los medios de propaganda del sistema y de sus partidos marioneta, que hacen como que se pelean, pero en el fondo y en lo fundamental coinciden.

Como socialista, apelo a no dejarse engañar por personas que afirman ser socialistas, pero que no pasan de ser liberales sistémicos avalados por grandes grupos de comunicación y carentes de ideas para impulsar un mundo nuevo. El Socialismo, no es una forma de gestionar el capitalismo, sino de acabar con él e instaurar el reparto, la igualdad, la solidaridad y los medios de producción y de consumo en régimen de propiedad colectiva y no individual, todo ello alcanzado de forma democrática. Los demás son engaños.

La política internacional no puede estar ausente en un debate en elecciones europeas