viernes. 29.03.2024

El Si Irlandés: La crisis financiera y Obama impulsan la construcción europea

NUEVATRIBUNA.ES - 19.11.2009...del año 2005, ya que ha sido un catalizador de la firma del acuerdo por el euroescéptico presidente checo.Este cambio de opinión de Irlanda, junto a la reciente solicitud islandesa de entrada en la UE, pone en evidencia que los vientos en Europa están cambiando.
NUEVATRIBUNA.ES - 19.11.2009

...del año 2005, ya que ha sido un catalizador de la firma del acuerdo por el euroescéptico presidente checo.

Este cambio de opinión de Irlanda, junto a la reciente solicitud islandesa de entrada en la UE, pone en evidencia que los vientos en Europa están cambiando.

La rápida integración de los antiguos países del Este supuso un cambio gravitacional de la UE, hacía la MittelEuropa, que en muchos casos se entendió como una ralentización del proceso de integración.

¿Que ha pasado ahora para que se haya empezado a poner fin a ese euroescepticismo? Simplemente la constatación de que el proceso de construcción europeo obedece fundamentalmente a impulsos externos.

La crisis financiera ha hecho que los pequeños países europeos que no están en al UE consideren en mucha mayor medida las ventajas de tener un paraguas común, como es el euro, frente a las inclemencias financieras y a las borrascas especulativas, que los inconvenientes que puede tener la cesión voluntaria de parte de su soberanía.

Pero ahí no acaban los impulsos externos hacia más Europea. La reciente decisión de Obama de desmarcarse del escudo antimisiles de Bush, que supuestamente iba a hacer frente a una amenaza fantasma de misiles intercontinentales iraníes, supone un jarro de agua fría para quienes, en los antiguos países de la Europa del Este (PECOS), consideraban que era mejor para sus intereses ser un súbdito de EE.UU. que un ciudadano de la UE.

El abandono de ese proyecto militar, que en palabras de un asesor de Obama: “Era un sistema que no iba a funcionar, para hacer frente a una amenaza que no existe y que iba a ser pagado con un dinero del que no se dispone”, supone un claro mensaje para los dirigentes derechistas de los PECOS, y principalmente para los de Polonia y Chequia.

Pero es también un tácito reconocimiento de que los EE.UU. de Obama no van a buscar enfrentamientos absurdos con Rusia, cuando buscar coincidencias de análisis, y sobre todo de actuación, con el país heredero de la URSS, es mucho más importante, en términos geopolíticos planetarios. Sobre todo teniendo en cuenta lo que esta en juego a escala mundial: la reducción de los arsenales nucleares heredados de la Guerra Fría; la contención nuclear de Iran y Corea del Sur; el intento de poner fin al abismo afgano, y por extensión a la amenaza del islamismo radical en África y Asia; que la emergencia de China no suponga una colisión con las potencias ya existentes.

Obama es consciente de que son demasiadas tareas para una sola potencia y que la multipolaridad es una realidad existente de la que hay que aprovecharse, incluso en términos de reducción del gasto militar, en vez de ponerle obstáculos.

Es muy posible que directa, o indirectamente, esta nueva visión estadounidense de los equilibrios globales sea un nuevo impulso al alicaído proceso de construcción europeo. En la mente de algunos dirigentes de los PECOS estará cuajando la idea de que, si ya no hay papá americano, mejor será llevarse bien con los hermanos mayores europeos.

A partir del 2010, una vez se despejen las últimas incertidumbres del proceso de ratificación europeo, la UE debería concentrase en buscar su espacio en este mundo multipolar, poniendo en la agenda política global el desarrollo de políticas que se enfrenten al cambio climático; el incremento de la regulación del desmadrado sistema financiero internacional; el impulso la lucha contra el hambre, que alcanza ya a 1.000 millones de personas; en resumen transformar a escala mundial el crecimiento económico en unos mínimos aceptables de bienestar y desarrollo para todo el planeta.

Esto posiblemente cuente con el respaldo de EE.UU., ahora que la reforma sanitaria de Obama esta evidenciando que son los EE.UU. quienes se aproximan a Europa, y no al revés, como decían algunos desde las Azores.

Bruno Estrada es Director de Estudios de la Fundación 1º de Mayo.

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