La trinidad del miedo
El negocio de la seguridad no solo requiere producir lo que se va a ‘ofertar’ sino que exige además ‘producir’ al mismo tiempo una buena parte de la ‘necesidad’ que alimenta la propia demanda.
El negocio de la seguridad no solo requiere producir lo que se va a ‘ofertar’ sino que exige además ‘producir’ al mismo tiempo una buena parte de la ‘necesidad’ que alimenta la propia demanda.
Desciende lentamente el telón. El espectro de nuevas elecciones no dejará de estar presente en el Segundo Acto, desde el momento en que ese mismo telón se alce de nuevo.
No es nuevo, pero en momentos en que la ‘teatralización’ se intensifica en los políticos de turno, más imprescindible resulta descifrar sus mensajes.
A día de hoy, si descartamos la más plausible de las salidas al embrollo electoral, solo queda ya una alternativa factible.
¿Por qué ha de darse por cierto que Rajoy "cambió de planes sobre la marcha" y declinó la invitación Real a raíz de la rueda de prensa de PODEMOS?
Si yo fuese del PSOE -que no lo soy-, propondría un gobierno de coalición PP-PSOE con un Presidente "independiente" y con veto absoluto a Rajoy.
¿Qué sentido puede tener para los que nada tienen esa machacona alusión a lo que nos pertenece, a lo que es de todos?
La próxima liga no debería jugarse con las reglas trucadas que han regido las 12 elecciones celebradas desde 1976, fecha en que se aprobó la Ley Electoral.
He tomado prestada para la ocasión esa tan arcaica como castiza locución que dio título también a un delirante artículo de Santiago Carrillo publicado en el clandestino “Mundo Obrero” al final del tardofranquismo.
Recorrido fugaz aunque detallado de los avatares registrados en el urbanismo normativo en Madrid en las dos últimas décadas.
Lo del embrollo 62-63 catalán puede acabar resultando un juego de niños a lado de lo que pueda ocurrir en el Reino estas Navidades, es decir a partir del 21D.
La falsificación del principio de igualdad en el sufragio ha de ser puesta ya de una vez en el centro del debate político.
Pasado el 20D, la política tendrá de nuevo que aspirar a ser el método para afrontar y tratar de resolver conflictos de intereses y discrepancias.
Para tratar de comprender la realidad política catalana es requisito indispensable partir de la caracterización pluridimensional de su espacio político.
El final de CiU: una secesión trascendental (UDC).
Los apoyos “externos” a cada una de las posiciones hoy enfrentadas -unionismo e independentismo- comienzan a hacerse por fin visibles como elemento clave para el desenlace del conflicto.
En vísperas del 27S la política parece estar penetrando a través de la cortina de humo tejida por los medios en torno a las disquisiciones sobre mayoría de votos o de escaños.
A tenor de la contestación de los entrevistados por el CIS a principios de septiembre, algo más de 2 millones de catalanes hubieran votado por las lista de Junts pel Sí o de la CUP.
El País ha publicado con veinte días de intervalo, los resultados de dos encuestas electorales realizadas por Metroscopia.