20 de julio de 2010, 12:13
NUEVATRIBUNA.ES - 13.7.2010
...que nos queremos mucho porque nos conocemos poco, y practicar con ganas la pereza, ese inmenso lujo.
Mientras ese periodo, intrascendente y feliz, llega, no quiero dejar de compartir con los lectores algunas reflexiones, sensaciones, risas y llantos (de risa) que me ha proporcionado el recorrido último, hasta ahora, del Estatuto de Cataluña.
Para no reiterar y aburrir a los lectores con hechos que de sobra conocen, empezaremos con la no muy diligente sentencia del Tribunal Constitucional al recurso del PP.
Cuando el tribunal emite la sentencia y publica un extracto resumen de la misma se conocen, perdón, conozco tres tipos de reacciones:
La perfilera del PP. “aquí no ha pasado nada....... acatamos, no podía ser de otra manera..... miremos el futuro.....”.
La numérico deportiva del Gobierno de España. “acatamos, no podía ser de otra manera..... supone una derrota del PP.... de tropecientas mil palabras apenas trescientas son suprimidas o alteradas ....” Caamaño, Ministro de Justicia y, presunto principal artífice del recorte y pulido del Estatuto en el Congreso. Rubalcaba, Ministro de Interior, esto duele más, también aportó su chispeante inteligencia “....supone una derrota del PP.... en términos futbolísticos mas o menos equivale a un noventa a uno...”
Y, por último, las reacciones en Cataluña, prácticamente unánimes (excepto las muy minoritarias del PP y Ciudadanos). “Ataque sin precedentes a Cataluña....... intolerable ataque de tribunal franquista a lo ratificado por la ciudadanía catalana en referéndum......se nos pone muy difícil nuestro encaje en España......convocaremos a la sociedad catalana a expresar su rechazo al fallo.....”
Convocaron la manifestación más de mil entidades políticas, sociales, culturales, sindicatos, empresarios, medios de comunicación etc. Al frente de la misma el Gobierno Catalán con su Presidente José Montilla a la cabeza.
El viernes 9, un día antes de la manifestación, el Tribunal Constitucional hace pública la totalidad de la sentencia y procede a su distribución. De una lectura más atenta o menos interesada ¡vaya usted a saber! de las terminales mediáticas progresistas y conservadoras se deduce que sí recorta y bastante algunas competencias del Estatuto y modifica la aplicación del mismo en capítulos importantes. Montilla califica la publicación de la sentencia de provocación.
El 10 de Junio de 2010 tiene lugar en Barcelona la mayor manifestación de su historia, o la segunda mas grande, enorme en cualquier caso. Al frente una enorme senyera y en primera fila el Presidente de la Generalitat.
Junto a José Montilla, todos los responsables institucionales que son o han sido en Cataluña.
Aunque Manuela de Madre, Vicepresidenta del PSC y diputada en el Parlament dice que “la manifestación es contra el PP preconstitucional”, de lo visto en las televisiones y lo que contaban EL PERIÓDICO, EL PAÍS y LA VANGUARDIA ni se gritó ni se vieron pancartas contra el PP o el Tribunal Constitucional; al contrario, en positivo, se jaleó la independencia, la autodeterminación y el derecho a decidir y, sólo de forma grosera, extemporánea y minoritaria, se oyeron gritos de traidor dirigidos a José Montilla quién, para evitar males mayores y visto que la manifestación no avanzaba se retiró discretamente, después de reposar unos minutos en la cercana y oportuna Consejería de Justicia.
Resulta, en mi opinión, paradójico que el principal convocante en su calidad de máxima autoridad en Cataluña y del Estado allí, y por ello el que más concurrencia aporta, sea el mayor perjudicado.
Esta porteña barriobajera (con papeles) cree, President, que el PSC y tu mismo estáis en términos taurinos tan de actualidad allí como fuera de sitio.
El 13 y martes entrego este artículo, el principal titular de Nacional de EL PAÍS dice: Montilla deplora las “ofensas gratuitas” del Constitucional , también anuncia que se reunirá con Zapatero para “reforzar” el Estatuto. ¡Dios nos asista!, que nos asistirá porque estamos en Año Santo Compostelano y viene a vernos Sor Benedicto.
Felices vacaciones.
Mirlyna Moreno - Periodista
...que nos queremos mucho porque nos conocemos poco, y practicar con ganas la pereza, ese inmenso lujo.
Mientras ese periodo, intrascendente y feliz, llega, no quiero dejar de compartir con los lectores algunas reflexiones, sensaciones, risas y llantos (de risa) que me ha proporcionado el recorrido último, hasta ahora, del Estatuto de Cataluña.
Para no reiterar y aburrir a los lectores con hechos que de sobra conocen, empezaremos con la no muy diligente sentencia del Tribunal Constitucional al recurso del PP.
Cuando el tribunal emite la sentencia y publica un extracto resumen de la misma se conocen, perdón, conozco tres tipos de reacciones:
La perfilera del PP. “aquí no ha pasado nada....... acatamos, no podía ser de otra manera..... miremos el futuro.....”.
La numérico deportiva del Gobierno de España. “acatamos, no podía ser de otra manera..... supone una derrota del PP.... de tropecientas mil palabras apenas trescientas son suprimidas o alteradas ....” Caamaño, Ministro de Justicia y, presunto principal artífice del recorte y pulido del Estatuto en el Congreso. Rubalcaba, Ministro de Interior, esto duele más, también aportó su chispeante inteligencia “....supone una derrota del PP.... en términos futbolísticos mas o menos equivale a un noventa a uno...”
Y, por último, las reacciones en Cataluña, prácticamente unánimes (excepto las muy minoritarias del PP y Ciudadanos). “Ataque sin precedentes a Cataluña....... intolerable ataque de tribunal franquista a lo ratificado por la ciudadanía catalana en referéndum......se nos pone muy difícil nuestro encaje en España......convocaremos a la sociedad catalana a expresar su rechazo al fallo.....”
Convocaron la manifestación más de mil entidades políticas, sociales, culturales, sindicatos, empresarios, medios de comunicación etc. Al frente de la misma el Gobierno Catalán con su Presidente José Montilla a la cabeza.
El viernes 9, un día antes de la manifestación, el Tribunal Constitucional hace pública la totalidad de la sentencia y procede a su distribución. De una lectura más atenta o menos interesada ¡vaya usted a saber! de las terminales mediáticas progresistas y conservadoras se deduce que sí recorta y bastante algunas competencias del Estatuto y modifica la aplicación del mismo en capítulos importantes. Montilla califica la publicación de la sentencia de provocación.
El 10 de Junio de 2010 tiene lugar en Barcelona la mayor manifestación de su historia, o la segunda mas grande, enorme en cualquier caso. Al frente una enorme senyera y en primera fila el Presidente de la Generalitat.
Junto a José Montilla, todos los responsables institucionales que son o han sido en Cataluña.
Aunque Manuela de Madre, Vicepresidenta del PSC y diputada en el Parlament dice que “la manifestación es contra el PP preconstitucional”, de lo visto en las televisiones y lo que contaban EL PERIÓDICO, EL PAÍS y LA VANGUARDIA ni se gritó ni se vieron pancartas contra el PP o el Tribunal Constitucional; al contrario, en positivo, se jaleó la independencia, la autodeterminación y el derecho a decidir y, sólo de forma grosera, extemporánea y minoritaria, se oyeron gritos de traidor dirigidos a José Montilla quién, para evitar males mayores y visto que la manifestación no avanzaba se retiró discretamente, después de reposar unos minutos en la cercana y oportuna Consejería de Justicia.
Resulta, en mi opinión, paradójico que el principal convocante en su calidad de máxima autoridad en Cataluña y del Estado allí, y por ello el que más concurrencia aporta, sea el mayor perjudicado.
Esta porteña barriobajera (con papeles) cree, President, que el PSC y tu mismo estáis en términos taurinos tan de actualidad allí como fuera de sitio.
El 13 y martes entrego este artículo, el principal titular de Nacional de EL PAÍS dice: Montilla deplora las “ofensas gratuitas” del Constitucional , también anuncia que se reunirá con Zapatero para “reforzar” el Estatuto. ¡Dios nos asista!, que nos asistirá porque estamos en Año Santo Compostelano y viene a vernos Sor Benedicto.
Felices vacaciones.
Mirlyna Moreno - Periodista