La rectificación de Forcadell
(Cavilaciones tras la detención, encarcelamiento y puesta en libertad de Carme Forcadell)
Forcadell y su compañía son libres de escoger la defensa más conveniente. Pero hay una parte de sus recientes biografías que ya han sido socializadas por centenares de miles de personas que, tal vez, ahora se sientan atribuladas por la rectificación ante el Magistrado. Lo que hicimos era «simbólico», afirman. Pero políticamente aquellos hechos tuvieron una fisicidad concreta con consecuencias calamitosas de todo tipo en la sociedad catalana.
Ahora, dicha rectificación podría conllevar una profunda desazón en el movimiento independentista. Por su mala cabeza, cosa que no lamentamos. Ahora, tal rectificación podría concretarse en grietas, de complicada reparación, en el fermento escatalógico: algunos predicadores de la salvífica solución catalana han colgado los hábitos. Los fraticelli se han convertido en ortodoxamente dominicos.
Claro, cada cual baja las escaleras como puede o sabe. Y cada cual elige salir del atolladero como Dios le da a entender. Y, repetimos, está en su derecho. Pero políticamente ahora tienen que asumir las consecuencias de la rectificación, ya sea forzada o fingida. No vale esconder la explicación pública en argucias por legítimas que sean. En definitiva, un clamoroso traspiés del procés que podría tener enormes consecuencias.
En todo caso, la declaración de Forcadell en el Tribunal Supremo pone en evidencia los chicoleos de Puigdemont en Bruselas. Su twitter tendrá que reinventarse.
Artículo publicado en el blog 'Metiendo Bulla'