viernes. 29.03.2024

Quitar de en medio al mensajero

nuevatribuna.es | 10.12.2010Es evidente que la detención sin fianza decretada contra el fundador de la agencia que está sacando a la luz los trapos sucios de la diplomacia de los EEUU, tiene un claro hilo conductor con los servicios secretos americanos.Las acusaciones presentadas en Suecia contra el fundador de Wikileaks, resultan de lo más sospechosas.

nuevatribuna.es | 10.12.2010

Es evidente que la detención sin fianza decretada contra el fundador de la agencia que está sacando a la luz los trapos sucios de la diplomacia de los EEUU, tiene un claro hilo conductor con los servicios secretos americanos.

Las acusaciones presentadas en Suecia contra el fundador de Wikileaks, resultan de lo más sospechosas. Es más, se ha publicado que fueron descartadas en un primer momento y que se retomaron posteriormente coincidiendo, prácticamente, con el comienzo de las publicaciones.

Penoso espectáculo el que está dando la administración de los EEUU; no niega los hechos, no se disculpa por la forma en que trata a quienes presenta como sus aliados… No, la reacción lamentable con la señora Clinton a la cabeza, es tratar de silenciar y desacreditar al mensajero.

Lo han intentado acallar por la vía de “ahogar” sus fuentes de financiación, forzando a que las Web americanas suspendan las transferencias económicas hacia Wikileaks. Lo han intentado presionando a los portales informáticos que utilizaba Wikileaks (caso Amazon o Paypal) y consiguiendo que no les permitan su uso. Por cierto, ahora todo un “ejército” de jakers simpatizantes de Wikileaks, han entrado también en escena dejando en blanco y sin poder operar durante un tiempo a estas páginas por su boicot a la agencia.

La cuestión ha transcendido de tal forma que la red se ha llenado de mensajes, demostrando una vez más, que en la era de la informática el pretender prohibir una información es una batalla (felizmente) llamada a la derrota.

Hoy la noticia en el mundo, ocupando las cabeceras de los periódicos más importantes del globo, están siendo las filtraciones reveladas por Wikileaks, y ello a pesar de todos los esfuerzos de la administración norteamericana por silenciarlos.

Digo yo que quizás le trajera más cuenta a los EEUU, pedir disculpas por tantas insensateces y tanta arrogancia como se demuestra en las transcripciones, en lugar de arremeter contra el mensajero.
Pero quizás sea que el esperpento de la doble moral con la que salen “fotografiados” en las transcripciones sus flamantes embajadores, esté siendo demasiado fuerte para quienes se consideran a si mismos como el ombligo del universo.

Wikileaks se presenta hoy al mundo como el nuevo periodismo que, ante las dudas sobre los límites a la información su resolución es: más información. Estas las resuelven desde el convencimiento de que nadie tiene derecho a prohibir o a omitir la información veraz y contrastada por mucho que esta afecte a intereses particulares de empresas o países.

Esa es la apuesta que defiende Wikileaks, considerar a los ciudadanos mayores de edad para obtener sus propias conclusiones; sin duda un reto demasiado grande para los censores de la información en el mundo. Y por eso mismo ya nada va a volver a ser igual. La doble moral y la hipocresía están recibiendo un potente rejón en todo lo alto de la diplomacia del País más importante del mundo.

Martín Landa

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